Es domingo, y eso significa que regresamos con un nuevo análisis de Dragon Ball Z. En esta ocasión, nos zambullimos en el episodio 27 de la serie, donde veremos el desenlace fatal de uno de nuestros Guerreros Z. ¿Recuerdas quién era el último defensor de la Tierra en caer en el campo de batalla?
Son Goku por fin ha resucitado y ha llegado a la Tierra, y en estos momentos, se encuentra volando a toda velocidad en su nube Kinton en busca de sus amigos, con el objeto de hacer frente a la terrible amenaza saiyan. ¿Llegará a tiempo o fracasará?
Mientras tanto, la tregua de 3 horas de Vegeta ha llegado a su fin, por lo que Nappa se aventura a atacar a sus adversarios: Piccolo, Gohan y Krilín. De este modo, la defensa de la Tierra se prepara para defenderse de esta mole saiyan, y como la mejor defensa es un buen ataque, planean una acometida combinada para derrotar al guerrero del espacio.
El plan es sencillo, mientras Krilín distrae a Nappa, Piccolo se encargará de cogerle de la cola, su teórico punto débil, para que Gohan remate la jugada con un buen golpe. Sin embargo, Nappa ha entrenado ese punto flaco y no surte efecto, asestando un codazo a bocajarro en la cabeza de Piccolo, dejándolo inconsciente.
Tras ello, los Gohan y Krilín se quedan petrificados, y el hijo de Goku sufre todas las consecuencias. Conforme observamos en el episodio, la dirección es realmente notable, dosificándose la tensión con dramáticos silencios e intercalando tomas con gran inteligencia. Por ejemplo, justo cuando Gohan recibe esta patada de Nappa en el estómago, se nos presenta en pantalla un televisor codificado de la Kame House, impactando al espectador.
En dicho emplazamiento encontramos a la familia Z muy preocupada, con Bulma sosteniendo un cuadro de toda su pandilla, llegando a derramar una lágrima en el rostro de Yamcha. Una imagen muy bien traída que representa las pérdidas que se están sucediendo en la dura batalla contra los saiyans.
Ya de vuelta al campo de combate, nos encontramos a Krilín preparando una nueva técnica. ¡El disco destructor Kienzan! El bueno de Nappa se confía demasiado, pero gracias al aviso de Vegeta, logra apartarse a tiempo para que el disco de Krilín solo alcance a rozarle. ¡Menuda potencia! El kienzan es capaz de cortar todo lo que encuentra a su paso, devastando hasta una montaña en el horizonte. Tras este susto, Nappa intenta rematar al guerrero, pero en último instante Piccolo le asesta una ráfaga de energía en su espalda y salva a Krilín de milagro.
Con Krilín casi fuera de combate, Gohan y Piccolo son los últimos que quedan en pie, y en ese instante Piccolo capta la tremenda energía que se acerca hacia ellos. ¡Es Goku, y según Vegeta, llega con más de 5000 unidades de poder! Si se uniera al resto de terrícolas lo podrían pasar mal, así que impera a Nappa que acabe con ellos. Además, le asegura que no tiene que temer por la muerte de Piccolo, y por tanto, el fin de las bolas de dragón, ya que en el planeta Namek puede que encuentren algo parecido...
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Gohan se lo pondrá difícil, dándole una potente patada que lo estampa contra un montículo y lo empapa en sangre. Ahora, Nappa está realmente furioso, y no duda en asestar su mejor golpe con una última ola de energía. ¿Será el fin del pequeño saiyan? ¡Parece que no, pues Piccolo se interpone entre el ataque, a modo de escudo, para proteger a su querido discípulo! ¿Qué le sucederá a este valeroso guerrero?
¡CURIOSIDADES!
1- Justo cuando Piccolo protege a Gohan, se suceden una serie de imágenes que representan el vínculo afectivo entre los dos personajes, algo realmente emocionante. Pero además, se utiliza el tema principal del largometraje Dragon Ball: La bella durmiente en el castillo del mal, evidenciando que estamos ante el fin del "rey de los demonios".
2- Chichí, impotente ante la situación, no duda en coger las armas que tenía Lunch escondidas en la Kame House. Como se puede apreciar, en Toei Animationno renegaban de este personaje bipolar, aunque estamos ante una de las últimas referencias que veremos en la serie.
3- Al desenlace del episodio, vemos algunas tomas que se utilizarán en el capítulo posterior y que no pertenecen al estilo artístico desplegado durante los 20 minutos del episodio 27.
¡Y así finalizamos nuestro análisis semanal! ¿Qué os pareció este episodio? ¿Realmente es uno de los mejores de la saga pese a ser uno de los peor dibujados de la serie? ¡Kai, Kai!
VALORACIÓN:
Un episodio lleno de drama y tensión, cuya dirección se ajusta perfectamente a las necesidades del mismo. Los silencios son la auténtica clave, dejando fluir los acontecimientos de manera acertada. Sabes que va a pasar algo gordo pero no te imaginas qué será, quién caerá o si Goku llegará a tiempo. Una pena que el dibujo no acompañe.LO MEJOR:
La dirección del drama y la tensión. Los silencios. Las lágrimas de Bulma con el cuadro de sus amigos. El kienzan de Krilín. El desenlace de Piccolo.LO PEOR:
El dibujo es catastrófico de principio a fin, con grandes desproporciones. Yukio Ebisawa es uno de los peores animadores de Dragon Ball.75
Bueno
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