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Spectral - Crítica de la nueva película de ci-fi de Netflix

Jesús Delgado

Spectral - Crítica de la nueva película de ci-fi de Netfix
Spectral, de Nic Mathieu, ya se ha estrenado en Netflix. En esta critica os desbrozamos la última película de ciencia ficción original de la plataforma VOD, protagonizada por James Badge Dale, Max Martini y Emily Mortimer.

Netflix ha estrenado este mes una nueva película de ciencia-ficción como uno de sus contenidos originales. Se trata de Spectral, una película dirigida por Nic Mathieu  y protagonizada por James Badge DaleMax MartiniEmily Mortimer y Bruce Greenwood. La trama sigue los pasos del Dr. Mark Clyne, un ingeniero de DARPA que es enviado a Moldavia, más concretamente a la ciudad Kishinev durante una ficticia guerra civil entre el Gobierno y los milicianos, en la cual Estados Unidos ha desplegado una división de Delta Force. Sin embargo, las armas convencionales poco pueden hacer contra un nuevo enemigo espectral e invisible, cuyo tacto puede ya de por sí matar a una persona. 

Clyne habrá de unirse a los Delta Force en una arriesgada, por no decir suicida, misión con el fin de descubrir la naturaleza de estos fantasmas que acosan tanto a soldados como a la población y así encontrar una manera de detenerlos. Su camino, empero, pronto se tornará en un peligroso periplo por la calles devastadas por la guerra, atestadas de unos espectros furiosos, deseosos de acabar con los vivos. 

Con esta premisa comienza Spectral, una película de ciencia ficción bélica que, ya os adelantemos, gustará a los amantes de ambos géneros. Sin embargo, antes de dar por cerrada esta crítica, dejad que desbrocemos algunos detalles más de ella.

XCom + Cazafantasmas + El amanecer de los muertos

Pues casi casi. La verdad es que Spectral es una película que no tiene muy claro en qué terreno se mueve. Se nos presenta como una cinta del género ciencia ficción con un tamiz bélico que trata de hacer épica una historia sobre survival horror con fantasmas en lugar de zombies, que además utiliza el armamento experimental la tecnología puntera como axiomas de una trama ramplona pero a la vez no demasiado ambiciosa. 

Por un lado, tenemos el factor de las unidades militares, desplegándose por territorio hostil, amparados por armas fantásticas pero científicamente posibles, al menos en teoría, las cuales nos recuerda a las vistas ya en series como la de Cazafantasmas. Esto a su vez se mezcla con una estética propia de la saga de juegos XCom y  juegos similares, de ahí que los adictos al género bélico con ciertas dosis fantásticas estarán encantados con el tratamiento de la historia en este aspecto. Elementos como el ver drones de carga reconvertidos en vehículos de apoyo o la construcción de prototipos de armas de plasma son cositas que les alegrarán el visionado. Y eso sin contar el cómo se ejemplifica el modus operandi de estas unidades sobre el terreno, algo bastante molón. 

No obstante, que no echen las campanas al vuelo tan rápido. Porque realmente este aspecto "molón" solo es incidencial. Aunque los militares son un elemento importante de la trama, solo son meros secundarios. Si alguien logra retener el nombre de los personajes con graduación se merecerá un aplauso, ya que pasan sin pena ni gloria por la pantalla, siendo meros apéndices de apoyo para la para la pareja protagonista formada por James Badge Dale y Emily Mortimer, dos actores que por cierto no acaban de convencer.

Y es que hemos aquí una de las principales pegas de Spectral. Un elenco insulso, reciclado en parte de la reciente 13 Horas: Los soldados secretos de Bengasi de Michael Bay, que deambula por una película en la que los tonos grises abundan, convirtiendo la narración bélica en algo tan carente de vida como la gama de colores de la cinta.

Afortunadamente, para compensar, Spectral no resulta farragosa en cuanto a discurso y discurre con relativa suavidad y buen ritmo, de ahí que aunque tediosa en algunos momentos, al final logre llegar a algún punto. Y aún así, su deselance resulta apresurado ya que el camino recorrido hasta llegar a este algo innecesario y artificioso. Sobre todo en las justificaciones de cómo logran montar el armamento y los gadgets de cara al enfrentamiento final. Ojo, que en cambio, el secreto detrás de la creación de los antagonistas fantasmales mola mucho y tiene su enjundia. Así que nos dan una de cal y otra de arena. 

Spectral entretiene. Pero no os vamos a engañar, no es de lo mejor del catálogo de Netflix. Si bien a nivel visual y de efectos especiales es más que correcta, y no acaba flojeando  en este apartado. Además tiene detalles muy interesantes como es el fiel retrato de los soldados de EEUU en el exterior operando en el extranjero, mostrándoles más como una suerte de guerrilleros desaliñados y algo paternalistas con el nativo, en lugar de como los heroicos combatientes de altos ideales y faces pulcras y rasuradas, el retrato idealizado que la industria nos lleva vendiendo desde hace de´cadas. 

Aún así, en contrapunto el retrato amoral, decadente e inhumano de los gobiernos de Europa del Este resulta muy tendencioso, acorde a los gustos del público occidental, demonizando y deshumanizando a los gobiernos de estas regiones del mundo. En este apartado, huelga decir que la Moldavia que retratan, en guerra, no se ajusta a la Moldavia real, que simplemente vive momentos de inestabilidad política y un alto grado de corrupción institucional. Pero este tipo de inexactitudes no deberían de desquiciarnos, habida cuenta del pueril y pésimo retrato de muchos otros paises en las producciones de Hollywood, empezando por el nuestro propio. 

En conjunto pobderamos que Spectrales por tanto una cinta palomitera para un sábado por la noche o una sobremesa, sin nada más que ver en el catálogo de Netflix. No va a sentar precedente, ni para bien ni para mal. Pero se deja ver y cumple lo prometido: militares disparando armas enormes, persecuciones, intentos de susto y un entorno más o menos de ciencia ficción. ¿Queremos más? Posiblemente, pero no lo encontraremos en esta cinta. 

VALORACIÓN:

Película de ciencia ficción bélica que juega con el horror de manera muy endeble. Entretenida y recomendada para amantes del género. Pero no por ello memorable.

LO MEJOR:

El retrato de los militares fuera de terreno norteamericano, las fantasmadas que se marcan con el armamento, la explicación de los espectros.

LO PEOR:

Un reparto carente de tirón, unas explicaciones científicas traídas por los pelos para su desenlace, la demonización del Europa del Este
Hobby

68

Aceptable

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