Batman (1989) - 10 curiosidades sobre la película de Tim Burton por su 30 aniversario

Corría el año 1989. Una década de ensueño para la industria del cine tocaba su fin. Aquella vorágine de fantasía, de revolución y de originalidad exhalaba sus últimos alientos, inconsciente de lo que estaba por venir, inocente ante lo desconocido. Pero en esa vorágine de fantasía, revolución y originalidad faltaba la última pieza, esa pieza que lo movería todo de cara a los próximos años y que acabó significando el punto de partida moderno del género de superhéroes en el cine. Sí, estamos hablando de Batman (1989), la película de Tim Burton protagonizada por Michael Keaton.

Y es que tuvieron que pasar once años desde el último gran estreno de superhéroes, Superman (1978) de Richard Donner, para que a las salas de cine llegara una nueva adaptación superheroica a la altura. ¿Os imagináis más de una década de espera para ver la próxima película de Marvel Studios? Es inimaginable en estos momentos. Es más, si cogemos once años y miramos al pasado desde ahora, como en el caso de Batman con Superman, hemos tenido un total de tres actores diferentes que han vestido el atuendo del Cruzado de la Capa: Christian Bale, Ben Affleck y, próximamente, Robert Pattinson.

El Batman de Tim Burton puede haber envejecido mal para algún que otro consumidor cinematográfico actual, o puede ser una proeza del cine para el que lo ve con los ojos cargados de nostalgia, escuchando Cindy Lauper en su walkman o cantando "The Power of Love" hasta quedarse sin voz. Lo cierto es que, sea cual sea el punto de vista con el que se mire, la primera gran adaptación a la pantalla grande (perdóname, Adam West) del Caballero Oscuro fue ésta. Tim Burton se aproximó a la mitología del Hombre Murciélago sin ser infiel a su particular estilo visual, desarrollando una Gotham espectacular (la mejor hasta la fecha, sin lugar a dudas) y con mucha personalidad y explorando al superhéroe Batman con el prisma del animal frente al hombre.

Hoy, el día en el que se cumplen 30 años de su estreno, en Hobby Consolas hemos querido rendir homenaje al Hombre Murciélago de Tim Burton, a ese Caballero Oscuro de finales de los 80 que marcó a toda una generación y que le enseñó al mundo lo que pasa cuando, detrás de la máscara, un hombre furioso que sigue siendo un niño solo en un callejón frente a los cadáveres de sus padres aprieta los dientes y dice: "Soy Batman". ¡Así que aquí van unas cuantas curiosidades sobre el Batman de Tim Burton que quizás no conocíais y que os van a encantar!

1. Mel Gibson iba a ser Batman

Es más, Warner Bros. Pictures le ofreció el papel de Batman a Mel Gibson antes que a Michael Keaton. El protagonista de Braveheart lo acabó rechazando porque, en aquella época, estaba rodando la secuela de Arma Letal. Los fans estaban tan encantados con la idea de que Mel Gibson pudiera interpretar al Cruzado de la Capa que, cuando el estudio confirmó a Keaton, la cosa se fue de las manos y a las oficinas de Warner llegaron unas 50.000 cartas protestando por la elección. Vista atrás, parece una pérdida de tiempo porque, finalmente, Michael Keaton se convirtió en Batman. Pero, en aquel momento, tanto el creador del personaje en los cómics, Bob Kane, como el productor de la película, Michael E. Uslan, llegaron a valorar la opción de despedirlo.

2. Una película de récord

Batman llegó a los cines a mediados de 1989 y logró una asombrosa recaudación de 43.6 millones de dólares en su primer fin de semana, destrozando absolutamente el récord establecido por Cazafantasmas 2 apenas siete días antes (29,4 millones). La trayectoria de la película de Tim Burton acabó con un total de más de 400 millones de dólares, cosechando un éxito nacional de 251 millones e internacional de 160. Como curiosidad, fue la primera película que superó la cifra de 100 millones de recaudación en sus primeros diez días.

3. Una producción polémica y criticada

Aunque las cosas acabaron saliendo tremendamente bien, el Batman de Tim Burton tuvo una producción muy complicada. La polémica y las críticas, especialmente hacia Michael Keaton, hicieron que Warner Bros. Pictures tuviera que lidiar con algo que se escapaba a su control. Por eso, el estudio tomó la decisión de adelantar las fechas establecidas para la presentación del tráiler y hacer que llegara antes para acallar a las masas. ¿El resultado? Éxito rotundo con fans enloquecidos que llegaban a pagar una entrada de cine sólo para ver el tráiler en pantalla grande y, cuando terminaba, se marchaban a casa sin ver la película que proyectaban.

4. El Batmóvil era un Chevrolet Impala

O, más bien, llevaba el chasis y el motor de un Chevrolet Impala. Lo cierto es que el Batmóvil de Tim Burton está considerado por muchos amantes del Hombre Murciélago como la mejor versión del vehículo de Batman que hemos tenido jamás. Ese diseño timburtoniano funcionó a la perfección y, para desarrollarlo, el equipo de producción cogió el chasis y el motor de un Chevrolet Impala y los unió a las luces traseras de un Ferrari, piezas de motor de un caza Harrier y hasta las tapas de combustible de un autobús londinense. Para los que preguntan por las llamas que aparecían en la parte posterior del Batmóvil cuando Bruce Wayne pisaba el acelerador: no, no eran reales, estaban creadas con parafina.

5. Dos grandes momentos fueron improvisados

¡No estaban en el guion! Cuando escuchamos la legendaria frase, que ya ha pasado a la posteridad de la cultura popular occidental, de "Yo soy Batman", Michael Keaton estaba improvisando. En lugar de "Yo soy Batman", en el guion estaba escrita la línea "Yo soy la noche". La verdad es que el actor hizo un cambio muy breve, pero esencial. Sin embargo, no fue el único momento legendario de la película que fue improvisado. ¡Ni mucho menos! Y es que la escena del Joker bailando en el apartamento de Vicki Vale estuvo completamente influida por un amigo de Jack Nicholson. El actor se inspiró en su colega para improvisar en esta escena.

6. El traje fue un problema para Michael Keaton

Como ya hemos dicho, el rodaje de esta película no fue precisamente modélico. No porque fuera un desastre, sino porque las condiciones en las que se movió la producción no ayudaban a la normalidad. Sumado al hecho de las críticas externas por parte de los fans hacia el casting elegido y las dudas internas del propio estudio sobre dicha elección, el Batman de Tim Burton tuvo que hacer frente a un particular problema con el traje. Y es que el atuendo del Caballero Oscuro fue una complicación para Michael Keaton, ya que el actor no se encontraba cómodo dentro de él. No porque no le quedara bien, sino porque, como él mismo reconoció en una entrevista posterior al estreno, entender a sus compañeros fue una tarea compleja, ya que no escuchaba dentro del traje. Es más, ¡incluso admitió haber sentido claustrofobia cuando lo llevaba puesto!

7. La polémica con Robin Williams

¡Más polémicas! Esta vez, con alguien ajeno a la propia película. Y es que, antes de empezar con la producción, Warner Bros. Pictures tanteó a Robin Williams para interpretar al Joker. En Batman (1989) vimos finalmente a Jack Nicholson, quien siempre fue la primera opción para el estudio. Sin embargo, Nicholson, quien acabó cobrando la friolera de 60 millones de dólares gracias al porcentaje de taquilla que se llevó, rechazó la oferta en primer lugar. Por ello, Warner le ofreció a Robin Williams ser el encargado de caracterizar al Príncipe Payaso del Crimen de DC Comics. Lo que nadie le dijo al tristemente fallecido intérprete es que esa oferta no era real, sino que se le hizo exclusivamente para presionar a Jack Nicholson a reconsiderar y aceptar la propuesta. Robin Williams se tomó tan a mal esta situación que, años después, rechazó el papel de Enigma en Batman Forever (1995) y se negó rotundamente a trabajar con Warner Bros. en cualquiera de sus películas hasta que el estudio se disculpó personalmente con él.

8. Dick Grayson fue borrado del guion

Dick Grayson, quien fuera el primer Robin de Batman y se convirtiera después en el héroe conocido como Nightwing, estuvo en el primer borrador oficial del Batman de Tim Burton. La idea de los guionistas era contar su origen y ligarlo directamente con El Joker, en una escena en la que la némesis del Cruzado de la Capa disparaba a John y Mary Grayson, los padres del sidekick de Bruce Wayne. Sin embargo, esta escena fue eliminada y la idea de incluir a Robin tuvo que esperar unos cuantos años.

9. El nombre del Joker fue un homenaje

Aunque nunca se ha revelado el verdadero nombre del Joker en los cómics, ni siquiera en la famosa historia de origen de La Broma Asesina de Alan Moore, en el Batman de Tim Burton sí le dieron identidad al villano del Caballero Oscuro. Warren Skaaren y Sam Hamm, guionistas de la película, quisieron rendir homenaje al actor que dio vida a Alfred Pennyworth en la famosa serie de los años 60, Alan Napier, y al Joker le pusieron el nombre de Jack Napier.

10. Gaudí inspiró la recreación de Gotham

Para terminar con estas 10 curiosidades de la película de Batman de 1989, como ya hemos comentado, la recreación de Gotham en esta película es la más comiquera y alucinante que hemos tenido en la gran pantalla hasta la fecha. Esa parte artística no recayó exclusivamente en Tim Burton, ya que fue Anton Furst quien se encargó de los diseños de producción de la película. Curiosamente, Furst se inspiró en la obra de Antonio Gaudí para desarrollar la asombrosa ciudad gótica que nos encontramos finalmente en el filme. No sólo Antonio Gaudí sirvió de inspiración al diseñador de producción, sino también la obra de otros artistas como Louis H. Sullivan (Edificio Carson), Otto Wagner (Majolikahaus) o Shia Takamatsu. El trabajo de Anton Furst en el Batman de Tim Burton fue tan artístico y preciso que la Academia lo premió con el Oscar a Mejor Dirección Artística.