Este año 2020 está siendo especialmente duro para la industria cinematográfica en muchos aspectos. Nunca faltan los fallecimientos de personalidades importantes a lo largo del transcurso del año. Pero este 2020 está dejándonos algunas muertes de personas legendarias dentro del séptimo arte. En febrero, nos despedíamos de Kirk Douglas, y hace tan solo unas semanas se apagaba la luz del compositor Ennio Morricone.
Ahora, Hollywood vuelve a vestirse de luto. En esta ocasión, la legendaria actriz Olivia de Havilland, ha sido quien ha fallecido en su casa de París a los 104 años de edad, tras una larga y provechosa vida y una carrera envidiable.
Olivia de Havilland fue candidata hasta en cinco ocasiones al Oscar, incluyendo su papel de Melania en Lo que el viento se llevó. Sin embargo, fueron las películas de La vida secreta de Julia Norris y La heredera, las que le valieron las dos estatuillas que ganó la actriz a lo largo de su carrera.
La abogada de Olivia de Havilland fue la encargada de notificar el óbito de la actriz el pasado sábado. La actriz fallecía en su residencia de París, donde vivía desde hace más de sesenta años. El entorno de la actriz asegura que gozó de buena salud tanto física como mental hasta sus últimos días. De hecho, hace un par de años se pudo ver una fotografía de Olivia de Havilland cerca de su casa montando en triciclo y disfrutando de un soleado día.
Nos despedimos pues de la última de las leyendas vivas de la Edad Dorada de Hollywood. Descanse en paz.
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