Hubo un tiempo en que Wonder Woman y Superman fueron pareja romántica, pero la cosa no salió precisamente bien. De hecho, ¡todo lo contrario!
Superman y Wonder Woman son la pareja más tóxica de los superhéroes. En una realidad alternativa de DC, la unión entre el Hombre de Acero y la Mujer Maravilla es de todo, menos romántica. Desde luego, hay que tener muchísimo cuidado con lo que se desea.
En el número 21 del cómic Justice League Beyond 2.0, se revela cómo una versión de Wonder Woman se casó con el Superman de una dimensión distópica. Una unión que fue forjada para poner fin a una guerra. Sin embargo, esta relación resultó ser completamente tóxica y llena de odio. Nada que ver con lo que muchos lectores esperaban.
A pesar de tener un hijo concebido por ingeniería genética, las diferencias entre ambos eran demasiado profundas, llevándolos incluso a intentar matarse mutuamente. En esta versión distorsionada, un Superman tiránico cree en su gobierno de hierro como lo mejor para su planeta, mientras que una Diana altruista lucha contra ese concepto.
Aunque ella sacrificó su sentido del deber, al final no puede tolerar a un monstruo como él. Esta representación muestra la imposibilidad de un romance entre dos personajes tan fundamentales pero opuestos en cuestiones de bien y mal.
Afortunadamente, en las líneas temporales principales, Superman y Wonder Woman son solo buenos amigos o incluso amantes, pero esta versión alternativa revela la toxicidad extrema de su unión debido a sus opuestos fundamentales en la moralidad.
Ser superhéroe no se suele compaginar con el amor
Los superhéroes, a pesar de su poder y valor, a menudo tienen dificultades en el amor y las relaciones personales debido a las complejidades de su doble vida. La lucha constante entre su identidad secreta y su rol superheroico tiende a generarles conflictos internos y externos que complican sus relaciones amorosas.
Además, la necesidad de mantener en secreto su identidad para proteger a sus seres queridos crea barreras de confianza en sus relaciones. El temor a exponer a sus parejas al peligro o a que descubran su vida secreta crea tensiones constantes y dilemas éticos que los alejan emocionalmente.
Por otro lado, su compromiso con la justicia muchas veces los lleva a sacrificar su vida personal en aras del bien común. La constante lucha contra el crimen, la responsabilidad de salvar el mundo y la imprevisibilidad de su los lleva a descuidar sus relaciones.
Desde luego, aunque es complicado, existen excepciones donde los superhéroes logran mantener relaciones exitosas. En el caso de Wonder Woman y Superman, parecía que todo esto podría ser mucho más fácil. Pero lo cierto es que ha sido todo lo contrario.
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