Kena Bridge of Spirits para PS5 o 12 Minutes para Xbox Series X son juegos independientes que han llegado para compensar la falta de exclusivos en las consolas de nueva generación.
Hace unos días publicaba un listado con los juegos exclusivos de PS5 y Xbox Series X hasta finales de 2021. Y la verdad es que en ambos casos se echaban de menos más títulos "first party" publicados por Sony y Microsoft.
Ambas compañías (aquí os contamos cuáles son los últimos estudios de desarrollo que han adquirido) han sufrido retrasos en sus lanzamientos por culpa de la pandemia global. Es el caso de Halo Infinite, que se lanzará en diciembre, un año después de lo previsto o de Horiizon II Forbidden West, que llegará en febrero.
Lo curioso es que han encontrado una forma de compensar esta falta de exclusivos a través de desarrollos independientes. En efecto, hoy se trata de Kena Bridge of Spirits, desarrollado por Ember Lab, pero tenemos numerosos ejemplos.
En el caso de PS5, alguno de los juegos "indie" que han llegado en exclusiva son The Pathless (Giant Squid y Annapurna Interactive), F.I.S.T. Forged In Shadow Torch (Ti Games) o el próximo Jett The Far Shore (Superbrothers).
Por su parte el catálogo de juegos exclusivos de Xbox Series X cuenta con juegos independientes como 12 Minutes (Luis Antonio y Annapurna), The Ascent (Neon Giant) o The Artful Escape (Beethoven and Dinosaur).
Y a esto hay que añadir The Medium,, The Falconeer o el desarrollo español Call of the Sea que aparecieron en la consola de Microsoft como exclusiva temporal, y que ya han llegado también a la máquina de Sony.
Y como esto es un artículo de opinión, voy a adelantar que me parece una solución fantástica. Es una decisión con la que todos salimos ganando. Me explico. Por una parte, ambas compañías pueden ofrecer a sus usuarios un catálogo de exclusivos algo más nutrido.
Por otra parte, los pequeños estudios de desarrollo (pequeños en tamaño o en presupuesto, pero no en talento) pueden beneficiarse de una promoción mucho mayor. El principal enemigo de los juegos independientes es el riesgo de "perderse" por la cantidad de juegos que se lanzan a diario en las plataformas digitales.
Sin embargo, el respaldo de una "first party" y una aparición en un State of Play de Sony o Xbox Showcase de Microsoft, ayuda a que los jugadores tengan estos títulos en el punto de mira. Es una decisión que compensa con creces el no aparecer en otra plataforma durante unos meses.
El tercer factor en esta ecuación, los jugadores, también se benefician. Seguro que más de uno ha descubierto auténticos juegazos que hubiera pasado por alto de no haber estado "respaldados" por una de las grandes.
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Sólo hay un inconveniente. En muchas ocasiones, las expectativas se pueden disparar. El hecho de contar con el apoyo de una gran editora no cambia las circunstancias de un desarrollo independiente.
No son juegos peores que los triple A, pero tienen medios más limitados. Esto se traduce en que pueden ser desarrollos más cortos, no contar con la tecnología más puntera o con actores de renombre para interpretar a sus personajes.
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