Qué es el código Konami y lugares sorprendentes donde puedes seguir utilizándolo
Arriba, arriba, abajo, abajo, izquierda, derecha, izquierda, derecha, B, A. Si ya quemabas botones en los ochenta y noventa, es muy probable que te sepas este truco mejor que tu propio número de teléfono. Para muchos juegos, este código era la única opción para poder pasarte los infernales juegos arcade de Konami en aquella época, como Gradius o Contra.
Pero incluso si nunca llegaste a usarlo, es posible que te suene por su nombre: el código Konami. Tal ha sido su influencia que ha permanecido en la actualidad como "easter egg", incluso en cosas que poco tienen que ver con los videojuegos.
Tristemente, su creador, Kazuhisa Hashimoto, falleció hace pocos días a los 61 años de edad. El programador se había unido a Konami recién graduado en 1981, trabajando primero en máquinas recreativas como Scramble, Super Cobra, Track & Field, y posteriormente en adaptaciones de dichos juegos a la NES y SNES. Hashimoto continuó trabajando toda su vida para Konami, pero sin duda su logro más famoso fue el Código Konami.
El truco hizo su debut en la versión para NES del juego de disparos Gradius, en 1986. Al introducirlo, se activaban todas las armas y potenciadores de la nave, lo que hacía que fuera mucho más fácil. O al menos factible, pues no olvidemos que estas adaptaciones de juegos de recreativa tenían una dificultad intencionadamente elevada, para picar a los chavels de la época a echar más y más monedas.
En una entrevista en 2003, Hashimoto reconoció que el juego era demasiado difícil, así que puso el código para ayudarle en el desarrollo. Su intención era eliminarlo del juego final, pero finalmente el código acabó en el cartucho que llegó a las tiendas.
Sin embargo,fue el juego Contra, lanzado en 1988, el que popularizó el código. Al igual que Gradius, es la adaptación a la consola de Nintendo de un juego de disparos para salones recreativos, famoso por su punitiva dificultad. Introduciendo el código en Contra, el jugador recibía 30 vidas extra, algo que ayudaba a los jugadores a superar la frustración inicial y continuar.
El código, conocido solo por los programadores de Konami y los pocos jugadores que lo habían descubierto en Gradius, se hizo de dominio público cuando fue publicado en el primer número de la revista americana Nintendo Power (lanzada en verano de 1988). Desde entonces, el código ha aparecido en docenas de juegos posteriores.
Casi todas las entregas posteriores de las franquicias de Konami como Gradius, Contra, Castlevania, Teenage Mutant Ninja Turtles, Dance Dance Revolution, International Super Soccer, Silent Hill y Metal Gear lo han incluido de alguna forma. Generalmente, con efectos que ayudan al jugador: vidas extra, rellenar munición, desbloquear armas...
Sin embargo, según pasaban los años y los trucos se hacían menos populares, muchos juegos empezaron a utilizarlo para desbloquear curiosidades y extras que premiaran la curiosidad del jugador y rindieran homenaje al código, más que otra cosa. Es el caso, por ejemplo, de Castlevania: Harmony of Dissonance de Game Boy Advance, que al introducirlo desbloquea un modo Boss Rush en el que controlar al Simon Belmont del original de NES. Si lo introduces en Metal Gear Solid 2 al terminar el juego, Snake te preguntará molesto "¿Qué crees que estás haciendo?".
El código se hizo tan popular que ha aparecido también en infinidad de juegos de otras compañías. Algunos casos notables son Bioshock Infinite, con el que puedes desbloquear el endiablado nivel de dificultad 1999; Borderlands 2, donde desbloquea la opción "Extra Wubs" que, en la línea del humor del juego, no hace absolutamente nada; o Grand Theft Auto Online, que nos da 99 vidas extra para el minijuego arcade del casino.
Incluso Fortnite desbloqueó un minijuego durante el famoso "agujero negro" con el que concluyó el capítulo 1 (solo se pudo acceder durante los dos día que duró el "cataclismo".
Pero quizá los casos más interesantes son aquellos que no tienen nada que ver con los videojuegos. La página web del Bank of Canada, anunciando el billete conmemorativo por los 150 años de la fundación del país, hace que lluevan billetes mientras suena una versión chiptune del himno canadiense. La página web de Polaroid Oiriginals desbloquea un minijuego de Stranger Things.
Esperad, que aún hay casos más surrealistas. Si pronunciamos el código konami al asistente de voz de Google, esta nos responderá que hemos obtenido "búsquedas de Google ilimitadas". Un juguete de Fisher Price emite una serie de luces y sonido especial si introducimos el código (algo que, evidentemente, solo los padres más frikis entenderían). Hasta hizo un cameo en la película de Disney ¡Rompe Ralph!
Y esta es solo una selección de cientos de casos. El Código Konami se ha convertido en una pieza inseparable de la cultura pop, y aunque muchos no conozcan su historia, ni la persona que lo creó, o incluso ni siquiera sepan qué es Konami, reconocerán la combinación. Arriba, arriba, abajo, abajo, izquierda, derecha, izquierda, derecha, B, A. Tampoco es muy complicado de recordar, ¿no?
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