SyFy es una cadena del grupo de NBCUniversal que se caracteriza por: 1) contar con un nutrido catálogo de series de Ci-Fi y 2) ser una de las empresas que más han apostado por los proyectos transmedia en los que videojuego, series de televisión y nuevas tecnologías. Sirva como ejemplo, Defiance, un producto que contaba con su propia serie de televisión (que duró sus nada desdeñables tres temporadas) y su MMORPG Free to Play, llamado ahora Defiance 2050, asociado a los eventos del programa en su recta final.
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NBCUniversal y SyFy, en colaboración con Sky1, vuelven a ejercer de pioneros, probando nuevos modelos de entretenimiento. Ya, desde este mismo mes de mayo, es posible disfrutar de su última apuesta por nuevas formas narrativas con las que enganchar al público, sacándole partido a las incipientes tecnologías VR y AR. Nos referimos a Eleven Eleven, que ya puede adquirirse a nivel internacional desde el pasado 11 de mayo.
Eleven Elevenno es, propiamente dicho, un videojuego VR o AR, formatos en los que se ha lanzado. Se trata de una propuesta para dispositivos de Realidad Virtual, con su contrapartida en formato de Realidad Aumentada, que apuesta por crear una experiencia narrativa, interactiva e inmersiva, en donde el espectador va más allá del relato. Esto es, puede disfrutar de todos los puntos de vista de los personajes.
Mehrad Noori (responsable también del proyecto de mini-serie VR The Halcyon), Michael Salmon y Lucas Taylor (Vikingos: El diario de Athelstan) son los creadores de esta aventura de Ciencia Ficción dura, con tintes de Space Opera, producido en asociación con el oscarizado estudio de efectos especiales Digital Domain.
La trama nos lleva a descubrir los últimos minutos de vida del planeta Kairos Linea, habitado por diversas tribus y razas enfrentadas entre sí a lo largo de los siglos. Cuando una facción tecnócrata se harta de sus enemigos, ahora aliados contra ella, decide barrer la faz del mundo, iniciando un sistemático bombardeo orbital. Para evitar la purga, los miembros de la facción construyen un arca, una nave espacial, que les mantendrá a salvo de las bombas.
La acción de Eleven Eleven transcurre durante los últimos once minutos y once segundos, antes del despegue de la última lanzadera hacia el arca. La historia nos muestra los puntos de vista de distintos personajes que intentan alcanzar este transbordador final. De esta forma, el usuario del dispositivo de VR (o de AR), sigue la pista de cada uno de los seis personajes principales, pertenecientes a diferentes facciones y que tienen sus propios objetivos.
A lo largo de la cuenta atrás, "jugada" en tiempo real, el usuario puede ir saltando de uno a otro personaje (y más aún, como ahora os explicaremos), descubriendo la intrincada historia de este relato de superviviencia a toda costa. Eso sí, sin poder cambiar el final. Estamos ante una experiencia narrativa, que no lúdica. Al menos no en la forma tradicional de entender el concepto.
Seguid leyendo, os contamos más sobre Eleven Eleven en los siguientes párrafos.
No es contar una historia, es vivir una historia...
Y no lo decimos nosotros. Citamos a los creadores del título, Mehrad Noori y Michael Salmon, quienes hace un par de semanas presentaron Eleven Eleven en la London Comic Con (MCM Comic Con). A grandes rasgos, Eleven Eleven no se puede considerar, per sé, un juego. Aunque algo de experiencia lúdica sí que tiene y algunas mecánicas propias de un videojuego VR/AR. Es algo distinto y, vamos a decirlo, vanguardista y de espíritu pionero.
El producto es una suerte de cápsula narrativa en formato de animación digital que discurre a lo largo de once minutos y once segundos (sin contar con un bonus que se muestra al desbloquear todas las perspectivas de cada personaje). En muchos sentidos, no pretende ser un juego en el que el jugador tome el control y vaya desbloquenado finales, subtramas o sidequests. Es, más bien, una experiencia multilíneal. O, lo que es lo mismo, líneal, pero con múltiples perspectivas de visionado y de análisis.
Para que tengáis una analogía a mano, imaginad un capítulo de Juego de Tronos en el que pudieras experimentar y visualizar a tiempo real las perspectivas de Jon, Cersei, Tyrion o la Madre de Dragones desde el punto de vista de cada uno. Gracias a las mecánicas del título, podrías saltar de un personaje a otro a voluntad e, incluso, explorar libremente el escenario, siendo testigo de eventos de gran impacto narrativo. O, en palabras de sus creadores, estamos ante una experiencia muy influenciada por Pulp Fiction y los múltiples perspectivas de sus protagonistas, quienes están íntimamente interrelacionados incluso aunque ellos no lo sepan.
Esto, traducido a la experiencia de Eleven Eleven significa que, aunque iniciemos cada sesión con un personaje distinto, podemos intercambiar sus puntos de vista, explorar libremente para ver escenas "detrás de las bambalinas" e, incluso, contemplar toda la acción desde "arriba".
Y todo ello, gracias a los los tres modos de visionado, que son: 1.Modo Historia, en el que seguimos a los personajes, pudiendo saltar de uno a otro cuando interactúan entre sí. 2. Modo Exploración, en el que, libremente, recorremos el escenario de Eleven Eleven, explorando habitaciones, rincones, zonas, que no necesariamente tendrían que estar en la ruta directa de ningún personaje. Y 3. Modo Diosa, en el que vemos la historia desde un mapa miniaturizado, pudiendo contemplar todos los eventos en una suerte de plano táctico.
Por otro lado, como se trata de una experiencia narrativa, se han cuidado muchos elementos clave, tales como son la música y el sonido. Como os hemos dicho antes, la música corre a cargo de Bleeding Finger, un estudio musical co-creado por el propio Hans Zimmer. Entre sus encargos más célebres se encuentran numerosas piezas músicales para episodios concretos para Los Simpsons y para diversos documentales de History Channel. El compositor de las piezas de Eleven Eleven es Christian Lundberg, autor dela cabecera de la serie de Snatch.
Este apartado, por cierto, es significativo, porque cada personaje tiene su propia BSO, que (ATENCIÓN) gana más o menor volumen según nos acerquemos al personaje al que seguimos. Y si, dato curioso, dos personajes se cruzan, sus BSO se entremezclan de forma muy natural, creando una amalgama curiosa de sus respectivos leitmotif. Este detalle es un detalle importante, ya que crea atmósferas muy específicas en ciertas secuencias y momentos de la historia.
Paralelamente, aunque también contará con una versión traducido al Castellano, Eleven Eleven cuenta con un elenco de actores de voz nada desdeñable en su versión original. Destacamos, por ejemplo, a James Mathis III (SigInt en Metal Gear Solid: Snake Eater), Enuka Okuma (Rodonita de Steven Universe) y Chris Tergliafera (Muhammad Avdol en la versión anglosajona de JoJo's Bizarre Adventure), entre otros. Esto, ya de por sí, es un regalito para los oídos. Sobre todo si pilotas en Inglés.
A nivel visual, cabe decir que el estudio de Digital Domain, ha trabajado también en el proyecto, dotando a Eleven Eleven de un impactante aspecto visual. Entre los hitos del estudio se cuentan sus trabajos en X-Men: Días del Futuro Pasado,Iron Man 3 y Titanic (por la cual recibió un Óscar, por cierto). DD es una empresa que, aunque se ha movido tradicionalmente en cine, no es desconocida en el campo del formato VR. En su haber cuenta con más de una decena de títulos en este formato, de distinta temática y orientación. Esto, por lo tanto, garantiza cierto experiencia en el sector, como una garantía de calidad visual.
Respecto a las plataformas en las que podremos disfrutar de Eleven Eleven, sus desarrolladores han apostado por la multiplataforma y diversos medios, en aras de hacer accesible y asequible esta experiencia. Por un lado, existen dos formatos VR bien distintos. El primero de ellos está pensado para dispositivos VR como Oculus Rift, HTC Vive o Vive Pro y PlayStation VR. En estas plataforma, podremos disfrutar de más 90 minutos de historia y todos su modos. En tanto, la versión VR de Eleven Elven para Oculus Go y Samsung VR reduce la experiencia a 70 minutos, laminando el modo free roam.
En tanto, existe luego una versión de Realidad Aumentada (AR), que está pensada, en concreto, para dispositivos iOs. Es decir, Apple iPhone 75 Plus e iPad Pro, que utilicen ARKit. Este modo, y a pesar de las limitaciones de la tecnología AR, ofrece una experiencia casi tan impactante y larga como la VR. La historia puede verse en los tres modos principales, y su duración vuelve a ser de 90 minutos. El precio de cada una de las versiones de Eleven Eleven varía. Desde los 20,00 hasta los 10,00 euros, en función de cada plataforma y formato.
¿El futuro de las series y del cine?
No lo descartemos. Ciertamente, Eleven Eleven apuesta por el desarrollo de ciertas premisas que ya se han mostrado en proyectos VR ya lanzados al mercado y otros tantos que todavía se están esperando. Sin embargo, su valor es el de haberlo lanzado y conjugado, esgrimiendo ante el público un nuevo paradigma que podría marcar tendencia en poco menos de unas décadas. Cuando decimos que se trata de un proyecto vanguardista, lo decimos muy en serio.
A nivel narrativo, la idea de la multiperspectiva y la coralidad no es algo nuevo. Pero la simultaneidad en tiempo narrativo real sí que es un elemento que todavía no se había desarrollado y que brinda posibilidades inusitadas e inexploradas al campo del entretenimiento y la la producción de series y películas.
En honor a la verdad, admitimos que a la presente generación le costará convertir este formato en un modelo de consumo mainstream. Sobre todo, con la tecnología VR todavía en pleno desarrollo (y lejos de ser barata, aunque ya los dispositivos son más asequibles y eficaces). No obstante, Eleven Eleven pronostica maneras acerca de cuál será le modo de consumir, ver, entender y disfrutar de series y del cine en un par de décadas, si no es antes. En la próxima generación, lo sumo.
Sus creadores, de hecho, son muy optimistas al respecto Ya apuestan por una secuela y una precuela de Eleven Eleven, cuya producción no se ha confirmado todavía, pero que podríamos realizarse dentro de no mucho si este título logra calar en un porcentaje significativo de consumidores. Algo que, la verdad, nos gustaría llegar a ver.
Cierto es, ya haciendo un poco de crítica constructiva, que Eleven Eleven no representa el pináculo de las tecnologías VR y AR, y requiere cierto pulido en el acabado, que los próximos parches deberían solventar sin demasiados quebraderos de cabeza. Minucias sin importancia, en comparación con el problema de la barrera idiomática. En tanto Eleven Eleven no llegue traducido al Castellano, dudamos que logre penetrar entre los usuarios españoles, poco abiertos al consumo de series y películas en VO de natural.
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Con lo que nos tenemos que quedar, en cualquier caso, es que este proyecto de SyFy y NBCUniversal asienta un paradigma de consumo muy rico, innovador e inteligente. No es, propiamente dicho, una experiencia lúdica, pero sí ofrece un buen rato de entretenimiento narrativo, que marcará el camino a la producción de títulos semejantes. Dicho de otro modo, no perdáis de vista a Eleven Eleven, el futuro podría estar llamando ya a nuestras puertas.
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