Crítica de Enganchados a la muerte, el remake de Línea mortal
Se enciende la luz de la sala y los periodistas nos miramos con una cara difícil de describir... Se puede leer en nuestro gesto algo así como "¿pero qué demonios...?". La razón es que acabamos de asistir al pase de Enganchados a la muerte, el remake de la cinta de 1990 Línea mortal, que era una bobería similar pero tenía cierto encanto, en gran medida debido a su reparto en el que encontrábamos a Julia Roberts, Kevin Bacon y Kiefer Sutherland (rescatado aquí con blanca melena y aspecto de médico autoritario, por cierto).
El casting no es precisamente el fuerte de esta película en la que se salvan por los pelos Ellen Page y Diego Luna, si somos muy permisivos. El resto trabaja bastante mal dando masajes cardiovasculares a ritmo de samba, primando el escote bonito por encima de la interpretación digna y sin conseguir transmitir una emoción sincera en ningún momento del metraje. El culpable, el director, que en materia de dirección de actores deja bastante que desear. Se trata de Niels Arden Oplev que se alzó con el BAFTA a la mejor película de habla no inglesa con Los hombres que no amaban a las mujeres y que presenta ahora un trabajo que roza el esperpento.es un desastre, pero no es lo suficientemente mala como para enfadarte, así que hasta en ese punto es frustrante. Intentar buscarle la lógica es un trabajo baldío porque carece de ella, así que solo se me ocurre hacer una crítica divertida para que al menos, si vais a verla, os echéis unas risas posvisionado leyendo estas letras.
Yonkis de la parada cardiaca
Pero antes os cuento "el argumento" por encima, sin spoilers: Cinco estudiantes de medicina, con la esperanza de desentrañar el misterio de lo que aguarda más allá de los confines de la vida, emprenden un atrevido y peligroso experimento. A base de detener su corazón durante un breve lapso de tiempo, cada uno de ellos sufre una experiencia cercana a la muerte clínica que documentan con vídeos, resonancias y recopilando sus propios testimonios.
De regreso de su viaje por la línea que separa la vida y la muerte cada uno de ellos desarrolla una nueva capacidad: recordar vivencias pasadas, desinhibirse, afrontar con madurez ciertos traumas... A medida que la investigación se vuelve cada vez más peligrosa, se verán obligados a afrontar los pecados de su pasado, además de vérselas con las consecuencias paranormales de sus incursiones en el más allá.
Hasta ahí un resumen rápido del comienzo de la historia de Enganchados a la muerte, pero como soy muy buena os voy a proporcionar mi propia sinopsis: treintañeros haciéndose pasar por estudiantes descerebrados y ultracompetitivos de medicina de veintipocos que después de hacer el descubrimiento científico más importante de la historia lo utilizan para salvar el culo en los exámenes adquiriendo "ventajas académicas" y se truñan cuando tienen que enfrentarse a sus malas acciones (malas, muy malas, estos van todos al infierno de cabeza) imaginándose a muertos que están vivos que tienen poderes paranormales y hasta les agreden físicamente. Ya, ya, no tiene lógica, pero lo de las pestañas postizas de Nina Dobrev tampoco y es de lo mejor de la película.
Producción de telefilm
Es casi insultante el nivel de algunas producciones que están llegando a la gran pantalla últimamente... Si dejas de lado ya el hecho de que el guión no tiene ni pies ni cabeza, que creo que ya os habrá quedado claro, el caso es que hay secuencias que parecen grabadas con un móvil: el remake no le ha dado ni un mayor empaque a los efectos especiales, ni ha fortalecido el casting y ni tan siquiera consigue convencer con el maquillaje de las apariciones de ultratumba. Ergo podría haberse estrenado perfectamente en mercado doméstico sin rozar las carteleras siquiera.
Me pregunto por qué razón un actor que ha despuntado en el universo de Star Wars y una actriz como Ellen Page (solo me explico que su agente le escoja los proyectos bajo los efectos del alcohol, porque no da una) soportan una carga tan pesada tratando de salvar esta película. Si al menos hubiera tirado de sentido del humor para reírse de los clichés de los 90 sería divertida pero no hay peor situación que la de quedarse en tierra de nadie: ni tan mala como para despotricar ni mucho menos lo suficientemente buena como alabarle las virtudes, que alguna tiene.
Como los protagonistas de esta historia, vamos a dejar Enganchados a la muerte en en impás de lo desconocido: entre la vida y la muerte. El coma cerebral lo tenéis garantizado durante una hora y cuarenta minutos y mirad si tiene poca coherencia que hasta el cartel es engañoso: ni el personaje de Diego Luna se somete al proceso, ni éste les hace a los protagonistas ser monstruitos como insinúa... (Suspiro).
VALORACIÓN:
El remake de línea mortal tiene uno de los guiones más absurdos de los últimos tiempos. Podría proporcionar un entretenimiento razonable de no saltarse la lógica cada dos por tres.LO MEJOR:
Las pestañas postizas de Nina Dobrev (ultrarresistentes) y las camisas vaporosas de Ellen Page.LO PEOR:
El maquillaje de los muertos es más propio de una fiesta infantil de Halloween que de una película con ciertas pretensiones de verosimilitud.50
RegularDescubre más sobre Raquel Hernández Luján, autor/a de este artículo.
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