Crítica de Héroes de Central Park, una entrañable película animada de aventuras

El cine español de animación está de enhorabuena. Después de los magníficos datos cosechados por Buffalo Kids, que se ha alzado como uno de los estrenos familiares más interesantes del verano, le toca el turno a Héroes de Central Park (The Inseparables), la película de animación que ha surgido de la colaboración de tres países: España, Francia y Bélgica 

De las sinergias salen buenos productos y aunque éste es, ciertamente, bastante ecléctico en lo que se refiere a referencias culturales. Tiene elementos de las andanzas del caballero de la triste figura, de las obras de Shakespeare o de Pinocho pero también de corrientes culturales mucho más modernas como la del rap y el breakdance o la franquicia de Pixar Toy Story.

Y esto no es una mera casualidad. La historia original la escribieron Joel Cohen y Alec Sokolow, guionistas de Toy Story si bien la adaptación del guion ha sido llevada a cabo por Bob Barlen y Cal Brunker que traen a sus espaldas títulos como La Patrulla Canina: La película o La familia Bigfoot.

La vida secreta de los muñecos

Don Quijote de la Mancha es un títere que trabaja en una suerte de compañía teatral junto a otros como Di, Alfonso o Sunny. Su rol, en todas y cada una de las funciones, es la de bufón y,  a pesar de que intenta explicarles a los demás que no tienen por qué ceñirse siempre a lo mismo, no hay manera de innovar.

Sus compañeros consideran que, indefectiblemente, el carismático y fanfarrón Alfonso debe seguir interpretando al héroe en la función y Di seguir siendo la dama en apuros. 

Un buen día, reciben una visita inesperada: un par de hermanos problemáticos que se dedican a robar, ven las posibilidades de ganar una buena suma de dinero haciéndose con un títere, en la medida en que son piezas de artesanía.

Adicionalmente Don, cansado de la situación, decidirá emprender un camino de aventuras para satisfacer al rey que, en su imaginación vive en un pomposo palacio situado entre las nubes. Su prodigiosa imaginación le lleva a creer que puede enfrentarse a un dragón e incluso rescatar a indefensos en favor de la justicia.

En su periplo se encontrará con DJ Doggy Dog, un muñeco moderno pero limitado por su software de voz, a quien le mostrará cómo ser más original, saliendo de su área de confort ya afrontando nuevos retos.

Hay muchos aspectos positivos a reseñar en Héroes en Central Park. La primera de ellas es que es lo suficientemente atractiva y tiene el ritmo necesario para embelesar al público infantil, pero también tiene aspectos que pueden interesar a una audiencia más madura a la que le guste cazar referencias de obras literarias o guiños simpáticos hacia personajes inmortales.

Por otra parte, sin ser especialmente moralista, incide en algunos aspectos como la necesidad de salirse de los raíles, improvisar y prestar atención al mundo de la imaginación. La mezcla de técnicas de animación le sienta bien a este proyecto puesto que cada vez que Don se dispersa, vemos sus aventuras imaginarias en 2D, algo que resulta refrescante y divertido.

A todo eso hay que sumar la calidad intrínseca de la propuesta: Central Park, una de las localizaciones más emblemáticas de Nueva York, se explora en profundidad en una cinta que le presta especial relevancia a los paisajes, ya sean diurnos o nocturnos.

Lo peligroso no es soñar, sino no hacerlo

Sí que choca, por contraste, la amalgama de personajes y situaciones. No le pega demasiado haber sido rodada en inglés y probablemente una ubicación europea, también icónica, le sentaría mejor a la trama, aunque son decisiones que, a buen seguro, se han tomado para abrir las puertas del mercado audiovisual del otro lado del charco.

Al final, el hecho de que convivan personajes dispares, con problemas diferentes, maneras de hablar que tienen poco que ver entre sí (pero que en el fondo son evoluciones: del lenguaje literario y poético a las rimas del rap), viene a recalar en la historia de fondo de crear una familia escogida, que le saca partido a esos contrastes y que permite que todos convivan en paz, a pesar de todo.

En suma, Héroes de Central Park tiene su atractivo y convencerá, sobre todo, a los amantes de soñar con los ojos abiertos.

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