Ninja Gaiden 3, análisis sangriento

La trama de Ninja Gaiden 3 vuelve a ponernos en el papel del ninja Ryu Hayabusa, que en esta ocasión sufre una maldición que le va matando por dentro, a causa de todos los enemigos que ha ido eliminando con su katana a lo largo de todos estos años. Una maldición lanzada por un misterioso personaje llamado "El Regente de la Máscara"… Y siendo como es un juego de la saga Ninja Gaiden,  uno de los máximos exponentes del género denominado "hack´n slash" (donde los combates usando diferentes armas blancas son los protagonistas), este Ninja Gaiden 3 sigue apostando por la acción en tercera persona más desenfrenada para poner en pantalla un desarrollo que no deja ni un segundo de tregua al jugador. Y sin olvidarse de la sangre, por supuesto, que salpica con ganas al abrirnos paso con nuestra katana, aunque con respecto a la segunda entrega se ha bajado el nivel de "gore".

Un Ninja Gaiden para casi todos los públicos

Mucho se ha especulado sobre cómo podía afectar la marcha de Tomonobu Itagaki (el controvertido creador de la saga) en el desarrollo de este Ninja Gaiden 3, pero desde luego las dosis de acción son incontestables, aunque la ambientación de esta entrega es más "moderna": viajamos por lugares como Londres, Japón o un desierto africano y luchamos contra decenas de enemigos  ninjas, soldados, monstruos de laboratorio...) haciendo uso de sencillos combos con nuestra katana, mientras la cámara de juego nos obsequia con escenas espectaculares en primer plano de los enemigos caídos en cada mandoble.

En esta ocasión, la experiencia de juego y su dificultad se han vuelto más accesibles para acercar su jugabilidad a un público más amplio. Por un lado, los que siempre han disfrutado con los difíciles combates de anteriores entregas disponen de un modo "Ninja Difícil" que pone las cosas bastante duras. Por el otro lado, los menos habilidosos también se lo pasarán en grande ya que pueden simplificar mucho las cosas, especialmente jugando con el mando PS Move. Y fiel a las más modernas tendencias no faltan los Quick Time Events (eso de pulsar el botón adecuado en el momento justo) para realizar ciertas ejecuciones o ciertos movimientos. Y, aunque no son muy abundantes, también hay pequeñas zonas de plataformas en las que poner a prueba nuestras habilidades ninja.

No hay duda de que el resultado final es toda una experiencia visual en la que el jugador se siente como un auténtico ninja dando "tajos" por todos los lados... Desgraciadamente, esta experiencia visual resulta repetitiva a las pocas horas por la sencillez de los combos, la escasez de armas (sólo contamos con la katana, arco y estrellas ninja) y el uso de un único tipo de ataque Ninpo (las magias de Ryu) que además, no se puede mejorar.

Y no es que los combates de Ninja Gaiden 3 no sean dinámicos o que no encontremos diversas escenas épicas  (no se puede negar que luchar contra un Tyrannosaurus Rex siempre es un espectáculo impagable), pero la mecánica de juego es repetitiva y las escenas que al principio son todo un "puntazo" (como planear para aterrizar sobre un enemigo desprevenido), dejan de sorprender y se vuelven un trámite a corto plazo.

Novedades, pero sólo en el cooperativo

por todo lo dicho, es bastante obvio que, salvo una dificultad más "relajada", Ninja  GAiden 3 no aporta mucho a la saga... Si exceptuamos, los modos online, sin dudad una sorprendente novedad. Ninja Gaiden 3 incluye modos online cooperativos (diferentes pruebas para dos jugadores) y competitivos (hasta para 8 jugadores que manejan otros tantos ninjas) que suponen un añadido interesante que alarga la vida de juego.

Habrla qué ver que nuevas sorpresas nos tienen preparados los de Tecmo Koei con el tema de los DLC, pero de momento los primeros que se han anunciado son contenidos gratuitos, lo que no está nada mal...

Técnicamente Ninja Gaiden 3 no supone un giro radical a lo visto en las anteriores entregas y luce bien con un motor sólido y personajes grandes y detallados, aunque algunos escenarios (especialmente los interiores) se ven algo desfasados con respecto a otros títulos del género. Con todos estos elementos Ninja Gaiden 3 se destapa como un espectacular juego de acción que tiene algunos momentos inolvidables, pero que se queda a medio gas a la hora de mostrar un desarrollo más variado o combates con algo más de profundidad. Si buscas acción directa y con una jugabilidad sencilla seguro que lo disfrutas, pero si eres un "purista" de la saga puede que te decepcione la dirección que ha tomado esta última entrega (incluso con una bajada de su mítica dificultad o recortes como un menor número de armas o menor componente "gore") que no aporta, exceptuando sus opciones Online, nada nuevo a la serie.