Cada juego retrocompatible de Xbox ha llevado 16-24 horas de testeo, de un equipo de más de 500 personas

La retrocompatibilidad de Xbox Series X y Series S es uno de los grandes puntos a considerar a la hora de escoger consola y una de las claves de la estrategia de Microsoft. Hay mucho interés en ver cómo se ha realizado esta optimización de miles de juegos para que se puedan jugar en las nuevas consolas.

Por ello, el director de gestión de programas de Xbox, Jason Ronald, ha concedido una entrevista a Inverse, en la que se explica cómo ha sido el ambicioso proyecto para trasladar todos esos juegos de Xbox, Xbox 360 y Xbox One a Series X y Series S.

Aproximadamente durante el último año, hemos realizado pases de prueba, que pueden llevar de 16 a 24 horas para un solo juego, explicaba Ronald. Teníamos un ejército de testers, aproximadamente 500 de ellos, que los revisaron todos según un orden de prioridad.

Si encontraban problemas, nuestro equipo de compatibilidad con versiones anteriores lo solucionaría sin que los desarrolladores hicieran nada. La responsabilidad recae en nosotros para asegurarnos de que estos juegos sigan funcionando.

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Además, parece que desde Microsoft piensan que en un futuro se podrán añadir más títulos de anteriores consolas Xbox como el sistema original o Xbox 360 a Game Pass: Sí, definitivamente es algo que estamos investigando. Algunos de los desafíos son técnicos, pero la mayoría de las veces se trata de licencias. En algunos casos, el desarrollador o editor ya no existe. Incluso rastrear de quién necesitamos la aprobación puede ser muy, muy difícil.

Sobre la retrocompatibilidad, Xbox Series X dará más importancia a las suscripciones y servicios de Microsoft, según Phil Spencer y hoy mismo hemos podido conocer que Forza Horizon 4 podría presentar un nuevo coche junto a estreno en Xbox Series X.