ATENCIÓN: Este artículo incluye spoilers de la temporada 4 de Westworld. Anfitriones y humanos vuelven a verse las caras en la exitosa serie de HBO Max, que nos lleva a un nuevo emplazamiento que puede dar mucho juego.
El pasado 27 de junio aterrizó en HBO Max la temporada 4 de Westworld, la prestigiosa serie de ciencia ficción que inició su andadura en un futurista parque temático ambientado en el Lejano Oeste. Androides provistos de Inteligencia Artificial, conocidos como Anfitriones, se encargaban de satisfacer todas las necesidades de los visitantes... todas.
La serie dejó el material original atrás hace mucho tiempo. Nos referimos, claro, a la película homónima de Michael Crichton de 1973. La tercera temporada fue objeto de críticas por su narrativa confusa para algunos espectadores.
Uno de los objetivos de la temporada 4 es recuperar la esencia de la primera temporada, y no hay arco narrativo que lo exprese mejor que el de Maeve (Thandiwe Newton) y Caleb (Aaron Paul).
Con sus vidas y la de la familia de Caleb amenazadas por las maquinaciones de Charlotte Hale (Tessa Thompson), ambos se meten de lleno en "una trampa" que los lleva de regreso al parque Delos.
Esa trampa tiene la forma del nuevo parque de Delos ambientado en la época de la Prohibición, también conocida como la Ley Seca de los Estados Unidos.
El nuevo parque temático se ambienta, pues, en los años 20 y principios de la década de 1930, cuando el alcohol estaba prohibido en los Estados Unidos. Es la era en la que proliferaron las grandes organizaciones criminales, empezando por la Mafia.
William (Ed Harris) hace alusión a eventos trágicos de principios del siglo XX, como la Gran Guerra (la I Guerra Mundial) y la pandemia de gripe española que sacudió al mundo hace un siglo.
A juzgar por las declaraciones de Alison Schapker, guionista de Westworld, para io9 (a través de Gizmodo), parece que Caleb y Maeve van a pasar algún tiempo en este entorno en un intento por "devolver al genio a su lámpara".
El entorno artificial y controlado de un parque es uno de los rasgos que dieron mucho juego en la temporada 1 de Westworld y que se perdieron, en gran medida, en la tercera. La serie recupera esa esencia al devolver algunos personajes a un entorno con esas condiciones.
Por otro lado, algo similar está sucediendo con Christina (Evan Rachel Wood), aunque no está confirmada todavía la teoría que os comentábamos la semana pasada.
¿Qué os está pareciendo la temporada 4 de Westworld por ahora? ¿Creéis que la serie está recuperando los puntos fuertes que había perdido?
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