El pasado martes 12 de noviembre, Disney+, el nuevo servicio de streaming de Disney, fue lanzado en Estados Unidos, Canadá y Países Bajos. Esta nueva plataforma es una de las grandes apuestas de la Casa del Ratón para irrumpir en el mercado del streaming que se está convirtiendo en tendencia entre las empresas de Mass Media. Con series tremendamente anticipadas como The Mandalorian, y muchas propuestas en camino, la plataforma ha resultado muy atractiva para mucha gente.
Durante sus primeras horas de vida, Disney+, como era previsible y, dentro de lo asumible, normal, ha sufrido problemas logísticos propios de este tipo de lanzamientos. Sin embargo, esto no ha impedido que la plataforma alcance la vertiginosa cifra de más de diez millones de suscriptores en los 3 países en los que está disponible.
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Parafraseando al Gran Maestro Yoda... "Las Guerras del Streaming comenzado ya han". Las acciones de Disney subieron un 6% durante el lanzamiento de Disney+, mientras que las del rival a batir, Netflix, cayeron un 2%. Claro que la compañía de la N mantiene el liderato mundial del streaming con más de 150 millones de suscriptores en todo el mundo, cifras que, presumiblemente, se reducirán a medida que Disney+ vaya ampliando su cobertura, recordemos que a España y varios países de Europa Occidental llegará en marzo, al igual que también se verán afectadas por la llegada de HBO Max.
Como hemos comentado en otras ocasiones, la decisión de escoger solo un servicio de transmisión se pone cada vez más complicada.
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