John Boyega echó en falta más presencia de los personajes clásicos en las secuelas de Star Wars
El actor que interpretó a Finn considera que los personajes clásicos están desaprovechados, así como una oportunidad de contar algo diferente.
A día de hoy, no cabe duda de que la Trilogía de las secuelas de Star Wars fue, sobre todo, divisiva como ninguna. A pesar de que El despertar de la Fuerza se salvó de la quema solo con unas modestas comparaciones con Una nueva esperanza, sus dos secuelas no tuvieron tanta suerte.
El plan de introducir a nuevos personajes al tiempo que los personajes antiguos "pasaban el testigo a una nueva generación" se fue al traste cuando ese salto generacional se saldó con la muerte del trío protagonista de la Trilogía clásica.
La narrativa contradictoria y no continuista de las tres películas también constituyó uno de los principales problemas de la trilogía de cara a los fans.
Uno de los personajes que llegó en 2015 a la franquicia fue Finn, un soldado de asalto de la Primera Orden que se libera de su condicionamiento y se une a la Resistencia a través de Poe Dameron.
John Boyega fue el encargado de dar vida a Finn en las películas, aunque su paso por la saga no fue un camino de rosas. De hecho, el actor declaró recientemente que no cree que regrese a la franquicia.
Mientras charlaba con Vanity Fair, Boyega ha abordado dos de los que, para él, son los grandes problemas del conjunto de la Trilogía de las secuelas.
El actor considera que la posibilidad de representar una rebelión de soldados de asalto se perdió en el camino. Además, opina que el tiempo concedido a los personajes clásicos (Luke Skywalker, Leia Organa y Han Solo) no fue suficiente para nada.
"Debería haber habido una rebelión de soldados de asalto. Y luego desarrollar un poco más el personaje de Luke. Dale más momentos de redención, que siento que se necesitaban después de Los últimos Jedi. Siento que los fanáticos de Star Wars necesitaban más tiempo con esos personajes que amamos tanto".
Para bien o para mal, la Trilogía de las secuelas de Star Wars finalizó en 2019 con El ascenso de Skywalker. Finn cada vez tuvo un papel más secundario en la historia, haciendo que cualquier potencial "rebelión" entre los soldados de asalto de la Primera Orden se perdiese.
Cada una de las tres películas vio morir a uno de los personajes clásicos que, durante décadas, han sido idolatrados por fans de todo el mundo. Es posible que un tratamiento diferente, sin la necesidad de morir o dando un sentido genuino a sus muertes, habría conseguido satisfacer a los fans, pero es algo que nunca sabremos.
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