Puede que El cuerpo en llamas haya tenido que contentarse con una segunda posición en muchos mercados de Netflix, pero en España ha sido un éxito. La serie protagonizada por Úrsula Corberó, Quim Gutiérrez y José Manuel Poga es un true crime basado en el crimen de la Guardia Urbana.

Corberó y Gutiérrez interpretan a Rosa Peral y Albert López, dos exagentes de la Guardia Urbana de Barcelona condenados a 25 y 20 años de prisión, respectivamente, por el asesinato de Pedro Rodríguez (Poga), compañero de ambos en el cuerpo y pareja de Peral.

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Durante la semana pasada, la exagente trató de impedir que Netflix estrenase su serie original mediante una demanda ante la justicia donde alegaba que El cuerpo en llamas vulneraba su derecho al honor. La demanda no fue admitida a trámite y Netflix estrenó sin problema El cuerpo en llamas el viernes 8 de septiembre.

Esta semana, con la serie ya en emisión, Rosa Peral vuelve a la carga contra Netflix y exige derechos de autor por el uso de su imagen en cada uno de los episodios de El cuerpo en llamas.

El cuerpo en llamas continúa levantando polémica en Netflix

Este tipo de controversias no son nada nuevo en el entorno de Netflix. La plataforma levanta ampollas con casi todos los true crime que lanza, ya sea por un motivo u otro.

El cuerpo en llamas ha venido acompañada por el documental Las cintas de Rosa Peral, donde sí se hace uso de la propia imagen de la exagente, así como de material de archivo personal. 

Como ya decíamos la semana pasada tras la primera denuncia, es curioso que, colaborando, presuntamente, con el documental adjunto, Rosa Peral tenga tanto empeño con la dramatización de su caso criminal. Por supuesto, no conocemos las condiciones de su acuerdo con Netflix.

Sea como fuere, El cuerpo en llamas ha sido el estreno más visto del fin de semana en España y promete dar buenas cifras a Netflix, incluso habiendo sido eclipsada a nivel internacional.