Darren Lynn Bousman, el director de Spiral, explica cómo tuvo que eliminar una trampa mortal para ajustarse al límite de clasificación por edades.
El reboot de Saw, Spiral: Saw, iba a ser sangriento, pero quizá ya no lo sea tanto. Pudimos ver hace unos días con nuestros propios ojos imágenes del rodaje de la cinta en las que se intuía algo de gore en uno de los asesinatos planeados por el lunático que aparecerá –o no- en la gran pantalla cuando vayamos al cine el próximo 21 de mayo, pero quizá sea sangre insuficiente.
Darren Lynn Bousman, el director de la cinta, ha confirmado que Spiral: Saw iba a ser aún peor, que había una trampa especialmente macabra que le dolió mucho quitar del montaje final pero que debía ser eliminada para seguir mantenido a la película dentro de la calificación por edades R -las que pueden ver los menores de 17 años siempre que vayan acompañados de un adulto, estando un paso por detrás de las X-.
Quizá algún día lleguemos a ver esa escena -ya que sí llegó a rodarse y editarse- cuando la cinta no esté siendo proyectada en salas, aunque por ahora no podemos hacer otra cosa que imaginarla con las descripciones del propio director: “la cara de un tío está completamente… su rostro entero se ha desprendido. Sin duda hubo algo de gore que se cortó”. Las que nunca llegaremos siquiera a imaginar serán aquellas que se pensaron pero no se ejecutaron por ser demasiado violentas.
Por si queréis seguir intentando adivinarla, la escena eliminada ocurre en el tercer acto de la película, involucrando a un personaje que inicialmente iba a morir en esa trampa mortal pero que termina sobreviviendo al haberla eliminado del metraje. El director se alegra de que sobreviviera ese actor, ya que podría volver en caso de que se hiciera una segunda parte de Spiral…
Recordemos que Bousman había dirigido previamente Saw II, Saw III, y Saw IV, que no son precisamente películas para toda la familia, pero Spiral se contendrá más que aquellas, quizá también motivada por contar en el reparto con actores como Chris Rock, Samuel L. Jackson o Max Minghella que invitan a un público más mainstream, “creo que puede ser la película de Saw más accesible ya que tienes a dos grandes superestrellas”. Precisamente por ser menos explícita que las anteriores, el director no acaba de entender por qué tuvo que cortar esa toma “no creo que sea en ningún aspecto la película más violenta de Saw”.
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