Los 6 juegos de Star Wars que aparecieron en la primera PlayStation
Hoy se cumplen 25 años del lanzamiento de PlayStation en Japón. Podéis leer todo sobre el origen y la historia de PSX en el reportaje especial que hemos preparado, que seguro que traerá buenos recuerdos a los jugadores más veteranos, nostálgicos y amantes del retro.
Aprovechando el 25 aniversario de la consola, vamos a hacer un repaso de los juegos de Star Wars que se lanzaron en la máquina de 32 bits de Sony, que entonces corrieron a cargo de Lucasarts (antes Lucasfilm Games). Sorprendentemente, entre los títulos disponibles, sólo hay una adaptación de las películas (el caso de Episodio I La amenaza Fantasma), mientras que el resto se trata de spin-off que intentaron aprovechar el tirón de los diferentes géneros que estaban en boga.
Si queréis seguir con la nostalgia de PlayStation, aquí os dejamos un blog que habla de nuestra experiencia con la máquina, las dudas de la generación, cómo nos decidimos entre PSX y PlayStation y cuáles fueron los juegos a los que dedicamos más horas. Y ahora, con más sentido que nunca, bienvenidos a una galaxia muy lejana, hace mucho tiempo, porque tanto hoy como hace 25 años, Star Wars estaba de moda.
Star Wars Dark Forces
Habrá quien diga que "sólo es un clon de Doom", pero se trata de una de las mejores adaptaciones del universo Star Wars a videojuego, precursor de los Jedi Knight y Jedi Academy y Jedi Outcast. Dark Forces estaba protagonizado por Kyle Katarn, quien (antes de Rogue One) era el encargado de robar los planos de la Estrella de la Muerte, y que después se veía envuelto en una trama muy interesante, contra las fuerzas más temibles del imperio.
Star Wars Dark Forces apareció en 1995 tanto en PC como en PlayStation, y era uno de los FPS (por aquel entonces no existía la denominación) que mejor sabía combinar el componente de historia con los tiroteos. Kyle era un mercenario (desertor de las fuerzas del Imperio mucho antes que Finn) pero se reflejó tan bien su personalidad que dio lugar a numerosas apariciones en el universo expandido.
Star Wars Rebel Assault II
El mayor atractivo de la saga Rebel Assault (el primero apareció en Sega Mega CD y PC) estaba en la incorporación de gráficos FMV (Full Motion Video) que recordaban a la trilogía original. La historia del segundo se aleja de las películas, pero recrea tiroteos, carreras de moto jet y secuencias de naves espaciales casi como si estuviéramos allí. A decir verdad el gameplay se limitaba a mover el punto de mira y abatir enemigos por unos escenarios "pasilleros", pero con un despliegue visual tan impresionante.... que necesitaba 2 CD en PlayStation.
The Hidden Empire, el subtítulo del juego, uno de los primeros juegos de Star Wars en aparecer en la consola de Sony, en 1995, y en las primeras partidas nos dejaba con la boca abierta... aunque era facilón y repetitivo.
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Star Wars Masters of Teras Kasi
Puede que la resolución técnica de Star Wars Masters of Teras Kasi echase por tierra un proyecto que no carecía de atractivo. Se trataba de replicar combates como los que habíamos visto en Soul Blade/ Soul Edge, pero ambientados en el universo Star Wars. Dejando a un lado el problema de enfrentar, por ejemplo a Han Solo contra Luke Skywalker, la verdad es que tenía una buena colección de personajes (incluidos Mara Jade, un guardia gamorreano y un morador de las arenas) y trajes ocultos -como el de Leia esclava-.
Donde fallaba Star Wars Masters of Teras Kasi era en el sistema de control, el parecido de todos los personajes entre sí (ya luchasen con sables láser o con bláster) y muy poca profundidad.
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Star Wars Episode I The Phantom Menace
Coincidiendo con el estreno del Episodio I, en 1999 pudimos disfrutar de dos adaptaciones muy diferentes en consolas de sobremesa. Los usuarios de N64 tenían Racer, un juego de carreras en que pilotábamos vainas, como Anakis Skywalker y Sebulba en Boonta Eve. Por otra parte, en PC y PSX se lanzó la adaptación oficial de la película.
Era una aventura tridimensional con una perspectiva aérea un tanto incómoda, y que deslucía alguno de los mejores momentos del film (como la carrera de vainas, precisamente), pero al menos seguía fielmente los pasos de Obi Wan Kenobi, Qui Gon y el joven Anakin, desde la nave de la Federación de Comercio hasta la batalla final de Naboo.
Incluso en el momento de su lanzamiento, el desarrollo parecía demasiado simple y el control requería todo el uso de la Fuerza para conseguir ataques precisos.
Star Wars Jedi Power Battles
Cuando se estrenó Star Wars Episodio I La Amenaza Fantasma, los fans no habíamos visto duelos de sables de luz tan dinámicos como el enfrentamiento de Obi Wan y Qui Gon Jinn contra Darth Maul, pero esta parte había quedado un poco "decafeinada" en la adaptación oficial. De modo que Lucasarts lanzó en 2000 un "beat´em up" en que controlábamos a diferentes maestros jedi, y donde la clave estaba en los combates.
Obi-Wan, Qui Gon, Mace Windu, Adi Gallia y Plo Koon eran los cinco caballeros jedi con los que podíamos masacrar droides de la Federación de Comercio, cada uno con habilidades y poderes de la Fuerza únicos que los hacen muy diferentes. Además, una vez completado el juego (cosa nada fácil) desbloqueábamos al mismísimo Darth Maul.
Pero por si eso no era suficiente, también podíamos disfrutar del juego en modo cooperativo. ¡Usar la Fuerza en compañía de un amigo es mucho más divertido!
Star Wars Demolition
También en 2000, cuando PlayStation ya estaba dando sus últimos coletazos (el juego apareció igualmente en Dreamcast) tuvimos la ocasión de disfrutar de un desarrollo atípico (al menos en el universo Star Wars). No se parecía a nada que hubiésemos visto en las películas.
La "excusa" argumental era que el Imperio prohibía las Carreras de Vainas, de modo que los Hutt inventaban un nuevo deporte con que apostar. El problema de Demolition (que era un clon de otros juegos de combate en vehículos como Demolition Derby, Twisted Metal o Vigilante 8) afectaba tanto a la simpleza del desarrollo como a las incongruencias temporales. En una misma arena se podían enfrentar vehículos como una AT-ST (el andador imperial de dos patas), un rancor, Boba Fett con su jetpack, vainas de carreras, tanques y droides de la Federación...
Quizá es el ejemplo más claro de toda la lista de un uso "abusivo" de la licencia Star Wars, con poca fidelidad al material original y ningún respeto al canon, que por aquel entonces era diferente del que ha impuesto Disney en la actualidad.
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