Si habéis visto la imagen promocional de arriba y el arranque de la segunda temporada de American Crime Story, dedicada al asesinato de Gianni Versace, ya tenéis una composición de lugar de lo que vais a encontraros en esta miniserie de nueve episodios. Como apunta la sinopsis, fue asesinado a tiros frente a su mansión en Miami Beach, el 15 de julio de 1997. El asesino, Andrew Cunanan, fue encontrado muerto en su yate tras una intensa búsqueda por las autoridades. Según el informe, se suicidó con el mismo arma con el que mató a Versace.
En el comienzo de esta temporada de American Crime Story, tenemos todas las constantes que se irán reafirmando en los minutos siguientes: grandilocuencia, ingentes dosis de morbo y una especie de fobia a mantener quieta la cámara (venga travellings y planos cenitales) que acompaña los últimos momentos del modisto al ritmo del Adagio de Albinoni. Todo hiperrecargado y llevado al extremo. Y por supuesto, el meollo de la historia no es la estrella talentosa que fue asesinada, sino el psicópata que se lo llevó por delante. Amén de los detalles sórdidos de su vida privada.
Así es como el show, por una parte, lo roba Darren Criss, que da vida a un personaje complicadísimo, no exento de los mismos manierismos que la realización (esos largos planos de Cunanan mirándose a sí mismo en el espejo no pueden ser más cliché), si bien tiene también cierta capacidad de ambigua atracción.
Recordemos que la primera temporada de American Crime Story arrasó en los Premios Emmy, acaparando el galardón a la mejor miniserie, guión y tres premios interpretativos (para Sarah Paulson, Sterling K. Brown y Courtney B. Vance).
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Los más optimistas pronostican que quizás Penélope Cruz se podría llevar el premio como secundaria por su trabajo como Donatella Versace. La caracterización y la forma de moverse de la hermana de Gianni son clavadas, pero Pe sigue siendo demasiado bella debajo del maquillaje como para ser creíble. De hecho, todo en la puesta en escena parece impostado, de cartón piedra casi.
Luces y sombras en la Mansión de la Medusa
Otro de los grandes problemas que tiene American Crime Story: el asesinato de Gianni Versace es su enrevesada forma narrativa con constantes idas y venidas en el tiempo. La idea es mostrar en primer lugar el asesinato para ir desgranando a posteriori cómo se conocieron víctima y verdugo, cómo impactó el deceso del diseñador italiano en la empresa familiar y cómo se fue forjando la personalidad del hombre que se lo llevó por delante y qué crímenes había cometido con anterioridad (a las autoridades les consta que mató a cuatro personas antes). Y todo no es sino una excusa para denunciar la homofobia latente en determinados círculos en los años noventa y anteriores.
Llama la atención que, de momento, tras tres horas de visionado, no hayamos visto más que un desfile y que los valores positivos de la figura de Gianni Versace apenas encuentren espacio en el discurso: su visionaria capacidad creativa, su manera de revolucionar el mundo de las pasarelas o el simple hecho de que fuese una persona muy querida por su entorno. Ni siquiera la complicidad con su hermana tiene el peso que se merece.
También hay aspectos muy positivos como la magnífica lista de hits que componen la banda sonora de la miniserie y lo bien que está insertada de forma diegética: escuchamos "Last Night a DJ Saved My Life", "Easy Lover", "Gloria", "Drive" o "Runaway" y la música nos transporta por completo.
¿Antena 3 sacando ventaja o haciendo un megaspot gratuito para Netflix?
Leemos con estupefacción en otros medios que Antena 3 ha ganado por la mano a Netflix al adelantarse a la emisión con la exclusiva en España anoche mismo, 18 de marzo, en prime time. Los datos de audiencia parecen constatar que ha sido un éxito en la parrilla de la cadena (un 15,6% de share, solo superado por Supervivientes con un 16%), pero depende de la vara con la que lo midamos: el peaje que ha tenido que pagar es el de embutir tres episodios cada noche. Que, ciertamente, un domingo no lo resiste cualquiera. Pero es que si echamos cuentas, ni por esas cuadran las fechas.
Con los tres primeros episodios emitidos anoche, restan otras dos tandas por emitir presumiblemente el 25 de marzo y el 1 de abril. Problema: Netflix lanza la serie completa el 30 de marzo... ¿Quién en su sano juicio se quedará hasta las tantas para ver la serie en Antena 3? El caso es que, de consolidarse en el interés por la serie, la cadena privada al menos habrá hecho buenos datos dos noches estratégicas. Es pan para hoy y hambre para mañana, pero pan al fin y al cabo, aunque sin quererlo estén publicitando ellos mismos a Netflix... Qué cosas.
De momento, American Crime Story: el asesinato de Gianni Versace parece un ejercicio de estilo con demasiadas pretensiones y poca naturalidad sostenida por buenas interpretaciones pero una historia que no termina de hacerle justicia a los hechos reales en los que se basa. Veremos si remonta o sigue la misma senda. ¡Seguiremos informando!
Descubre más sobre Raquel Hernández Luján, autor/a de este artículo.
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