Crítica comiquera de la Liga de la Justicia de Zack Snyder. ¿Es una buena adaptación?
Ha llegado. La Liga de la Justicia de Zack Snyder, el denominado Snyder Cut, ya está aquí. Después de cuatro años de líos y enredos entre el estudio, el cineasta y las redes sociales, este movimiento histórico ha desembocado en marzo de 2021. Y lo ha hecho, como suele ser desgraciadamente habitual, con la polémica de las filtraciones como telón de fondo. Una polémica, que gracias a Dios, no ha ido a más. De momento.
La Liga de la Justicia de Zack Snyder se ha presentado al mundo como la nueva venida del mesías cinematográfico que va a transformar el género de superhéroes en la gran pantalla. Aunque, paradójicamente, de gran pantalla este estreno tiene bastante poco, porque desafortunadamente no vamos a ver esta película en cines. Al menos, por ahora. Y decimos desafortunadamente porque es una pena no poder ver este filme en una sala y disfrutar del despliegue audiovisual que realiza su director para trasladar a los superhéroes de DC Comics a la acción real. Una verdadera lástima.
Sin embargo, esta venida del mesías nos ha sorprendido porque, básicamente, no se trata tanto de una visión del director, sino más bien de una versión muy, muy extendida del corte que vimos en 2017, dirigido por el propio Zack Snyder y retocado por Joss Whedon para ajustarse a los parámetros dictados desde arriba, desde las oficinas de Warner. A excepción de lo que rodó con los 70 millones de dólares que le ofrecieron al cineasta cuando se confirmó el Snyder Cut, el resto sólo añade valor al metraje reducido y sintetizado por Whedon hace cuatro años. Y, por lo tanto, como sucedió en su día, estamos delante de una muy buena adaptación de los héroes del Universo DC.
La influencia directa de Los Nuevos 52 e indirecta de Injustice: Gods Among Us
Hablemos primero de cómics. ¿En qué se ha basado la Liga de la Justicia de Zack Snyder para trasladarse a la pequeña pantalla? Como decimos, al no cambiar nada de la narrativa de la versión de 2017 y simplemente extender la historia y el desarrollo de personajes, la influencia directa sigue siendo el reinicio que sufrió la organización de superhéroes de DC Comics en la etapa de Los Nuevos 52. Estamos hablando, efectivamente, de la etapa correspondiente al equipo creativo liderado por Geoff Johns. En aquel escenario de reboot comiquero fuimos partícipes de cómo la invasión de Darkseid provocaba la reunión, creación, establecimiento y consolidación de la Liga de la Justicia. Básicamente, lo mismo que sucede en el filme.
Aquella etapa desembocaría en la famosa historia de Liga de la Justicia: La guerra de Darkseid, algo que no sabemos si veremos próximamente en el cine o en la televisión, teniendo en cuenta que se ha pasado de #ReleaseTheSnyderCut a #RestoreTheSnyderVerse. No sería extraño ver que Zack Snyder tiene la intención de desembocar precisamente en eso, en una guerra abierta contra el dueño y señor de Apokolips, que lanzaría todas sus huestes hacia la Tierra en busca de la preciada Ecuación de la Anti-Vida que tanto le quita el sueño. Tendremos que esperar para saberlo.
Por otro lado, y según lo que hemos podido ver hasta la fecha en Batman v Superman: El amanecer de la Justiciay la propia Liga de la Justicia de Zack Snyder, la denominada Pesadilla tiene una notable influencia de los aclamados cómics Injustice: Gods Among Us. No estamos hablando del universo que plantea, desde luego; sino que estamos hablando en realidad del comportamiento de Superman, las acciones que acomete y el hecho de que héroes, villanos y anti-héroes se unan para enfrentarse a un Clark Kent consumido por la ira y la venganza, entendiendo que la pérdida de Lois Lane es precisamente el motor que lo empuja para esos actos malévolos.
Cambios con respecto al cómic los encontramos muy ligeramente en los orígenes de Cyborg. El accidente del laboratorio pasa a ser aquí un accidente de tráfico. Un cambio que no afecta en nada al hecho de que Silas Stone se vea obligado a usar la tecnología para salvar la vida de su hijo y darle una nueva oportunidad. Y, como sabemos, el traje negro del regreso de Superman está también aquí. Uno de los grandes atractivos y cambios de esta versión extendida y guiño / homenaje a El regreso de Superman de Dan Jurgens. Una saga que comenzó con La muerte de Superman y nos regaló también Un mundo sin Superman y El reinado de los superhombres.
Para concluir, ha sido interesantísimo ver una pequeña porción de las leyendas de Apokolips en un par de secuencias. Darkseid está muy bien adaptado y diseñado, y lo mismo en cuanto a su historia, su manera de comportarse y hasta los Omega Beams que aparecen en esa espectacular escena de "La Era de los Héroes" que viene a ser el opening de El Señor de los Anillos: La Comunidad del Anillo. Aunque sin la épica de esta última, por supuesto. Es para que os hagáis una idea.
¿Qué tal está la Liga de la Justicia de Zack Snyder como película?
En cuanto a lo que es cine, hemos de reconocer que nos ha sorprendido que prácticamente sea una versión muy extendida del filme original, a excepción del epílogo de la Liga de la Justicia de Zack Snyder que, básicamente, es todo lo que pudo rodar recientemente como colofón o supuesto canto de cisne ante su potencial salida del Universo DC. Y lo cierto es que ha dejado un par de puertas muy abiertas de cara a un posible continuación, agarrándose a un clavo ardiendo por si hubiera una posibilidad de retomar una secuela o pasar a realizar una cinta o serie de Batman con Ben Affleck como protagonista y Deathstroke como villano.
La libertad creativa total que ha tenido Zack Snyder en esta cinta hace que las dos primeras horas sean un derroche absoluto de estilo por encima de narrativa y ritmo. El director ha hecho todo aquello que caracteriza su cine... ¡y más! Lo ha llevado a su máximo esplendor, con secuencias larguísimas, extenuantes y asfixiantes, pretendiendo que cámaras lentas y música inyectada al servicio del videoclip de turno es sinónimo de belleza lírica. Y, por el contrario, lo que hace es ahogar todo lo que cuenta por cómo lo cuenta.
Sin embargo, a partir de las dos horas la cinta coge una velocidad de vértigo y empieza a funcionar como el mecanismo de un reloj. Las piezas tediosas del principio, que básicamente amplían la narrativa y el desarrollo de los personajes de la película estrenada en cines hace cuatro años, encajan a la perfección y Zack Snyder se permite el lujo de hacer lo que mejor sabe hacer: acción, acción y más acción. Secuencias alucinantes, con una potencia visual mayúscula y un gran montaje de imagen, sonido y música.
De hecho, el ejercicio de montaje está tan pulido en este acto final que mencionamos que, esta vez sí, en la Liga de la Justicia de Zack Snyder somos partícipes de una asignatura pendiente del cineasta. Mientras que, desde nuestro punto de vista, el clímax final de El Hombre de Acero y Batman v Superman: El amanecer de la Justicia nos provocó cierta indiferencia, aquí el director maneja esa conclusión emocional de una forma épica y a la altura del Universo DC. Un final maravilloso, deslucido quizás por el epílogo, que le pondrá la piel de gallina a más de uno y que presenta el mayor cambio con respecto a la versión original de 2017.
En definitiva, la Liga de la Justicia de Zack Snyder hará las delicias de todos los fans del cineasta que llevan peleando por su corte desde hace cuatro años y pondrá a examen al espectador genérico, que deberá superar la barrera de las cuatro horas y el tedio de las dos primeras para disfrutar de un final apoteósico y mayúsculo. Quizás el formato serial le hubiera funcionado muchísimo mejor para ese público masivo. Y puede que así lo consuman muchos suscriptores de HBO. Sea como sea, la Liga está de vuelta. Es la misma Liga que hace casi un lustro, pero es nuestra Liga. ¡Ya veremos qué es lo que nos deparará el futuro con ella!
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