Dying Light 2 Stay Human. Todo lo que sabemos del juego de zombies de mundo abierto
Toda la información disponible sobre Dying Light 2, el juego de zombies en un mundo abierto que llegará a consolas actuales, next gen y PC el próximo 4 de febrero de 2022.
Uno de los juegos más esperados de 2022 es Dying Lght 2 Stay Human, un desarrollo de Techland (también responsables de Dead Island) que profundiza y multiplica todo lo que nos cautivó en el juego anterior. Aquí podéis leer nuestro análisis de Dying Light para Nintendo Switch.
En efecto Dying Light 2 será un juego de zombies (o infectados) en un mundo abierto, con movimientos de parkour y un combate salvaje centrado en el cuerpo a cuerpo. Pero bajo los niveles de acción se esconde un complejo RPG.
El protagonista, a quien controlamos en primera persona, será Aiden Caldwell. Se trata de un peregrino (una de las facciones que nos vamos a encontrar a lo largo de la historia) que está infectado. El virus en su cuerpo le otorga habilidades especiales, pero también nos obliga a encontrar una cura antes de que sea demasiado tarde.
Por otra parte, Aiden ha perdido la memoria, y el único modo de descubrir su pasado es encontrar a su hermana Mia, perdida en la ciudad. Para encontrar su rastro, necesitaremos la colaboración de varios personajes, como la antigua "nightrunner" Lawan (interpretada por Rosario Dawson).
Pero eso es sólo el principio. En este reportaje os contamos todo lo que sabemos sobre Dying Light 2 Stay Human. Si queréis profundizar en la ambientación, también podéis escuchar los relatos sonoros Dedrick, Antígona, Rosemary... en que diferentes supervivientes cuentan sus historias.
Son una muestra del cuidado que se ha puesto en todos los aspectos del juego. Pese a que se trata de un título de terror y ciencia ficción
El mundo tras el estallido zombie
Dying Light 2 se desarrolla 15 años después de la infección. El juego nos ofrece una perspectiva diferente a lo acostumbrado; los supervivientes se han organizado en diferentes bandos, se refugian en fortificaciones y han aprendido a moverse entre las hordas de no muertos.
En cierto modo, el virus ha devuelto al mundo a una época medieval. Las máquinas y la tecnología cada vez son más escasos, y los humanos deben recurrir a armaduras, mazas, cuchillos y arcos para hacer frente a la amenaza exterior.
En el universo de Dying Light 2, la mejor defensa contra los infectados son muros, fosos y estacas,, y los campamentos recuerdan a antiguos castillos. Este regreso al medievo también se traduce en una nueva forma de pensar, en que se impone el fanatismo y el sometimiento del pueblo a los caudillos.
Lo descubriremos a medida que recorremos la ciudad, una localización dividida en 7 distritos que tiene un tamaño cuatro veces mayor que en el primer juego. Esta ciudad europea es el último bastión de la humanidad, y tiene un mapeado muy variado (desde las zonas residenciales con casas bajas al antiguo centro financiero, con grandes rascacielos).
Cada una de las zonas está controlada por una facción diferente. Además de los peregrinos, que ya hemos mencionado, nos vamos a cruzar con un grupo paramilitar conocido como "Pacificadores", con los Renegados y grupos de bandidos que salpican las calles.
Según sus creadores, el 95% de los interiores podrá explorarse y ofrecerá desafíos más duros, para obtener mejores recompensas.
Movimientos de parkour
La navegación marca la diferencia en el mundo abierto de Dying Light 2. El juego hereda los movimientos de "free running" del original, como la posibilidad de saltar, trepar por tuberías, colgarnos de cornisas y correr por la pared.
Todos estos movimientos están limitados por una barra de energía, que se agota a medida que encadenamos acrobacias, y se pueden mejorar en un árbol de habilidades.
El futuro del gaming según el director general de PlayStation España
En esta ocasión se introducen dos elementos que multiplican las posibilidades de Aiden. El primero de ellos es un garfio que nos ayuda a trepar a lugares elevados. Su uso es especialmente útil cuando nos encontramos rodeados de no muertos, ya que las zonas elevadas nos ofrecen vías alternativas.
La segunda pieza de equipo es un parapente que nos sirve para desplazarnos por el aire. Podemos lanzarnos desde grandes alturas y planear -mientras nos mantenemos a salvo- o bien aprovechar las corrientes ascendentes para alcanzar zonas elevadas.
La combinación del parapente y el garfio nos dan una sensación de dominio total de la ciudad, sin necesidad de jugarnos el pellejo recorriendo las calles.
Combate cuerpo a cuerpo
El combate en Dying Light resulta muy visceral y salvaje. Esto es el resultado de una combinación de factores: un control bien ajustado, la necesidad de acercarnos a los enemigos para los enfrentamientos cuerpo a cuerpo, y el hecho de que las armas -hachas, mazas o cuchillos- se rompan con el uso.
Dying Light 2 incluye elementos de "crafting" que nos permiten construir y reparar elementos del arsenal con las piezas y materiales que hayamos recogido. Y como hemos adelantado, se trata de un juego de rol, así que cada una de las armas posee un rango de ataque, daño y resistencia.
Estas armas están clasificadas por diferentes niveles de rareza, desde comunes a legendarias, y también se podrán conseguir en los mercados callejeros del juego. Y como en el caso de los movimiento, nuestra habilidad en el combate se puede mejorar en el correspondiente árbol de experiencia.
En cuanto a los efectos de cada golpe, nos han resultado devastadores, con efectos sangrientos muy explícitos, y un sonido de crujido de huesos que pone los pelos de punta. Cada combate en Dying Light 2 nos recuerda que nuestra supervivencia está en juego.
Una ciudad que cambia con nuestras decisiones
El escenario de Dying Light 2 Stay Human es cambiante en diferentes sentidos. Por una parte, nos referimos al ciclo día/noche. La luz afecta al comportamiento de los monstruos e infectados, de modo que por el día, los tejados se convierten en una zona relativamente segura, mientras que los peligros aguardan en los interiores y zonas subterráneas.
De noche, sin embargo, las calles están plagadas de zombies, que se comportan de un modo más agresivo. Aiden puede descansar por la noche, pero también es el momento en que podremos conseguir mejor "loot".
El otro aspecto en que los escenarios se transforman, depende de nuestras decisiones. Este es uno de los aspectos que Chris Avelone -que ya no se encuentra en el proyecto- aportó: la importancia de las opciones del jugador, que no sólo se traducen en cambios en la historia, sino también en transformaciones del entorno.
Ya nos impresionó cuando vimos el primer gameplay de Dying Light 2 en el E3 2019, en que podíamos escoger entre drenar una zona del mapa o dejar inundada -y por tanto inaccesible-. Y de nuevo en nuestras impresiones "hands on" en que decidíamos dejar el control de una central en manos de una u otra facción, lo que alteraba las zonas que podíamos recorrer.
Seguro que podemos descubrir muchos más ejemplos de este mundo cambiante cuando se lance el juego, el próximo 4 de febrero, tanto en consolas actuales como en las máquinas de nueva generación, Ps5 y Xbox Series X.
Descubre más sobre David Martínez, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.