El año pasado fue un año potente para Pixar, ya que el estudio estrenó Onward a principios de 2020 y, a pesar de los retrasos y altibajos causados por la pandemia, finalmente Soul llegó a nuestras pantallas en diciembre. Este 2021 ha comenzado con buen pie para el estudio de animación, con numerosas candidaturas en diversos festivales y un nuevo Oscar bajo el brazo, y ahora calientan motores para el estreno de Luca, la nueva cinta del estudio que se estrena el 18 de junio en Disney+ sin coste adicional par subscriptores.
Luca es el primer largometraje de Enrico Casarosa, responsable del corto La Luna y artista de Storyboard experimentado. Desde Hobby Consolas pudimos formar parte de una mesa redonda en la que el director y Andrea Warren, la productora de la película, nos contaron un poco más de los desafíos que ha supuesto producir esta película en tiempos de COVID, y cómo ha sido el desarrollo de esta nueva aventura animada.
Los monstruos marinos son muy importantes en la película, y os basasteis en leyendas locales para esta parte de la historia. ¿Por qué te interesaban tanto estas leyendas, y mapas antiguos con monstruos?
Enrico Casarosa: Creo que lo que me fascinaba de ellos era el misterio. Siempre intento traer algo fantástico a las historias, y había algo en el misterio del lugar, y también en el escenario. Siempre ha habido algo en el mar que me da esa sensación mortal y peligrosa, y me encanta eso, puedes sentirlo en la cultura del sitio. Es muy guay y atractivo, hay mucho que no sabemos, y también es algo muy atado a la cultura local.
Andrea Warren: Algo que me gustó mucho de los mapas al trabajar en este proyecto fue esa noción de la imaginación humana. El tratar de rellenar esos huecos y lugares que no entendemos con nuestra imaginación, y como cineastas conectamos muy bien con ese deseo de querer contar historias. Esos mapas cuentan historias, tratan de explicar algo que no entendemos, y pasa en todo el mundo. Es una tradición increíble.
Siempre vemos a los monstruos marinos como amenazadores y peligrosos, ¿cómo fue el proceso de crear unos monstruos que fueran accesibles y amigables?
EC: Fue un proceso un poco largo, tuvimos que trabajar mucho en los diseños. Decidir cómo de coloridos y escamosos debían ser, pero también queríamos dejar claro que eran monstruos y eran parte del mar. El diseño nació directamente del personaje. Por ejemplo, con Luca, como es tan curioso, queríamos que tuviera los ojos muy grande. Con Alberto, todo era sobre su confianza. Los personajes hablaron por sí mismos, pero también tomamos notas de los mapas, como las colas de los monstruos de la Carta Marina. Tenemos un equipo con artistas geniales, y les dejamos expresarse y crear hasta encontrar el aspecto de los personajes.
AW: Además, nunca quisimos que dieran miedo, como un monstruo. Hay este tema en la película, de cómo se llaman unos a otros. Ellos se llaman "la gente del mar", y se refieren a los humanos como como "monstruos de tierra"... Pero los humanos los llaman a ellos "monstruos del mar". Se trata de dejar atrás esas etiquetas, porque en realidad no saben los unos de los otros. No queríamos que fueran monstruos, queríamos librarnos de esas percepciones, porque cuando conoces a Luca, te das cuenta de no eres un monstruo.
Para los niños de la edad de Luca y Alberto, ¿qué mensaje os gustaría que sacasen de la película?
EC: Yo siempre hago hincapié la amistad, y de cómo ser diferentes nos puede ayudar a salir de tu zona de comfort. La importancia de atreverte a hacer cosas y silenciar a las voces que te dicen que no puedes o no debes hacer cosas, que no eres lo suficientemente bueno. Aprender a tener confianza en uno mismo y librarte de las inseguridades, ser valiente, y que está bien aceptar la ayuda de tus amigos.
AW: Una de los aspectos de esta amistad que me encanta es cuando se preguntan sin están siendo demasiado o si se están pasando. Hay algo precioso en poder ser uno mismo, y de no resultar demasiado ni tener que cambiar alrededor de tus amigos. Cuando eres pequeño a veces tratas de cambiar para encajar en un grupo, pero es importante aceptarse tal como eres, y encontrar a gente con la que puedes ser tú mismo.
EC: Gente que te acepta por lo raro que eres (se ríe). Porque lo raro que eres, es parte de ti. Eso es lo que esperamos, que se identifiquen con ello.
La banda sonora es muy importante para una película, ¿cómo han sido las decisiones para la música de Luca?
EC: Quería elegir a alguien que entendiese al personaje y el mundo de un niño, y creo que Dan Romer tiene esa sensación en su música, muy independiente pero también de fantasía infantil. Hubo mucho de compartir música italiana el único con el otro, y bombardearnos mutuamente con canciones y bandas sonoras, como Nicola Piovani o Nino Rota, incluso tenemos una canción escrita por Nino Rota. Y también música un poco más folk, fue genial verle beber toda esta influencia italiana y encontrar nuestra propia banda sonora.
Luca es una historia muy personal para ti, ¿por qué decidiste basar la película en este capítulo específico de tu vida?
EC: La verdad es que cuando presentamos una película a Pixar, presentas tres ideas, y para ellas terminas fijándote en partes de tu vida para ver de qué es interesante hablar. Para mi, la infancia es algo mágico y lleno de imaginación, siempre me han atraído esos momentos de descubrir el mundo, mis historias favoritas son de "coming of age". Con La Luna, me sentía atrapado entre mi padre y mi abuelo, que no se llevaban bien, y tenía que encontrar mi propio camino. Con esto, es otro momento de mi vida en el que encontré mi propia identidad, y mi mejor amigo me ayudó a definir quién era, me cambió porque habría muchas cosas que no habría hecho si no llega a ser por él. No habría perseguido mis sueños, no habría ido a Estados Unidos y no estaría aquí, no habría salido de mi zona de comfort. Queríamos hablar de ese tipo de relación.
El punto de vista de un niño es importante en Luca, pero las películas las hacen principalmente adultos. ¿Cómo conseguís libraros de ese cinismo de los adultos para hacer una historia así?
AW: La verdad es que antes de meternos en producción tenemos muchas conversaciones, todo el equipo. Y Enrico tenía muy claro lo que quería capturar y celebrar, así que invitamos a todo el mundo a compartir sus propias historias, hablar de sus veranos, de sus amistades, y todos tenían sus propias aventuras. Así que conseguimos crear algo muy auténtico y encontrar una conexión, independientemente de dónde habíamos crecido. Conseguimos conectar con ese significado, y Enrico logró mantenernos con un rumbo fijo a donde quería llegar y qué quería contar y por qué, todos teníamos ese sentimiento.
EC: Creo que tienes que volver a esos días, hicimos muchísima memoria para capturar nuestros recuerdos. Te tienes que poner en los zapatos de tu yo de niño, y por suerte tenemos mucha gente en Pixar que se mantienen muy en contacto con su lado infantil (se ríe). La curiosidad es muy importante, especialmente cuando estás dirigiendo, la imaginación y la curiosidad.
Hablando de niños, Jacob Tremblay es la voz de Luca. ¿Siempre le tuvisteis en mente para el papel, o cómo fue el proceso de encontrar la voz adecuada?
EC: Fue un proceso muy largo, ¡ojalá hubiéramos pensado en Jacob desde el primer día! Hicimos una búsqueda muy, muy larga. Buscábamos al personaje, y también a alguien similar para interpretarle, y tuvimos mucha suerte con Jacob. Al igual que con Alberto, teníamos que encontrar a alguien que fuera de la edad adecuada, era como hacer un puzzle. Muchas veces trabajábamos con voces temporales y talento local, pero claro, con esta edad, crecían muy rápido para poderse quedar con el personaje. Con estos chicos, teníamos el miedo constante de que les cambiase la voz en cualquier momento, y cuando encontramos a Jacob Tremblay para Luca y Jack Dylan Grazer para Alberto nos dimos cuenta de su enorme talento, su inocencia y su honestidad... y también son geniales con la improvisación. Fue una búsqueda muy larga.
¿Cómo te sientes al ser el primer director italiano en dirigir una película para Pixar?
EC: Es un honor increíble, muy emocionante. Es un placer poder compartir el lenguaje, los detalles, todo de esta película, introducir a la gente a la cultura italiana. Hay tantos detalles que hemos puesto en todas partes, me siento muy afortunado y muy honrado de poder compartir nuestra cultura, y espero poder enorgullecer a los italianos que vean esta película.
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