Angustia, misterio y terror - Análisis de Martha is Dead, el juego más controvertido del momento

La culpa y el miedo tienen muchas facetas, lo cual puede ser especialmente terrible si varias de esas facetas coinciden en el interior de una misma persona. Con parte de esa reflexión como inspiración, nace Martha is Dead, la nueva aventura de misterio y terror para PS5, PS4, One, Series/S y PC.

Detrás de este proyecto está el pequeño grupo LKA, que ya firmó el interesante The Town of Light. Esta vez, se trata de una historia todavía más personal, que nos habla sobre nuestra propia identidad, los sentimientos que provocamos en los demás y lo terrible que puede ser una guerra.

La historia gira en torno a Giulia, una joven que vive en la campiña italiana durante el clímax de la Segunda Guerra Mundial. Un día, descubre el cadáver de su hermana gemela Martha flotando en un misterioso lago. Ella quiere averiguar qué pasó con Martha, pero a la vez aprovecha para hacerse pasar por ella, pues su madre parecía quererla más.

Con estos ingredientes se articula una historia en la que Giulia va conociendo poco a poco sus demonios interiores: la culpa por suplantar a su hermana, la rabia por lo sucedido, pero también la incertidumbre sobre lo que está pasando realmente: ¿se está imaginando los acontecimientos? ¿Qué tiene que ver la batalla de los partisanos con los alemanes?

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Desde un primer momento, Martha is Dead tiene una atmósfera de misterio e inseguridad, pero en realidad no somos conscientes entonces de lo mucho que puede llegar a jugar con los acontecimientos. Cuando nos pasamos el juego (que es corto, pues en el mejor de los casos os llevará unas 6 horas y media), no vamos a tener claro qué ha pasado exactamente.

De hecho, esa es parte del encanto de esta aventura de misterio: sus propios creadores ya aclaran que quieren expresar sentimientos, sensaciones, más que un sentido claro de lo que sucede. Tanto es así, que probablemente queramos jugar de nuevo para entender mejor qué pasó "entonces" o para tomar otras decisiones que pueden alterar acontecimientos del juego...

La dinámica jugable es muy sencilla: nos movemos siempre en vista subjetiva, desde los ojos de Giulia, y hemos de explorar la casa de nuestra "Tata" (la abuela) y sus alrededores, para descubrir pistas sobre lo sucedido o tomar partido en algunos acontecimientos, como una revuelta de los toscanos contra los nazis.

Aparte de desplazarnos, solo podemos interactuar con ciertos objetos que tengan el correspondiente icono, así que la observación es fundamental, si bien podemos pulsar un botón para destacar los objetos interactivos cercanos.

En cualquier momento, podemos acceder a nuestro bolso para consultar los objetos que tengamos (como llaves), aunque no hace falta usarlos cuando llegue el momento adecuado, Giulia lo hará automáticamente.

Sí es importante consultar el mapa a menudo, pues el bosque está lleno de caminos serpenteantes y podemos tener varias misiones activas a la vez, aunque por lo general muchas requieren que superemos otras para poder completarse. En cualquier caso, es fácil saber qué nos toca en cada momento.

Para ayudarnos, contamos también con un diario en el que Giulia anota sus objetivos, pero también sus sentimientos, con inquietantes ilustraciones. Y es que, como decíamos, Martha is Dead va mucho de que nos empapemos de la atmósfera: los periódicos que hablan sobre bombardeos, la radio informando del avance alemán...

Hay un par de rutinas especiales en el juego: consultar las cartas del tarot y usar nuestra cámara de fotos.

Las cartas del tarot se pueden consultar una vez al día (la narrativa del juego se divide en días) y, más que pistas, nos dan nociones y sensaciones generales sobre lo que estamos viviendo.

La cámara sí da mucho más juego y, de hecho, usarla es imprescindible para avanzar en algunas misiones. Podemos usarla en cualquier momento y hemos de ajustar el enfoque o la obturación para sacar las fotos deseadas. Es más sencillo que con una cámara real, pero las sensaciones están muy bien conseguidas.

Además, la cámara supone una cierta faceta "coleccionista" del juego. Podemos encontrar nuevos aspectos para ella y poco a poco damos con nuevos filtros para el objetivo, que nos permiten fotografiar mejor en interiores, en condiciones de mucho sol, etcéra.

En realidad, muchos de esos extras son meramente accesorios y no hacen falta para llegar al final, pero motivan de cara a explorar con calma los escenarios, pues tenemos fotos infinitas, que luego podemos revelar en el cuarto oscuro.

De hecho, un interesantísimo contraste de Martha is Dead se encuentra en cómo nos muestra esa Italia campestre, idílica y soleada en ocasiones, para pasar de golpe a escenas duras. Pero cuando decimos duras, queremos decir TREMENDAMENTE DURAS, en torno a conceptos como la muerte o el gore más desagradable.

Tanto es así que, como muchos sabréis, en PlayStation decidieron censurar su versión física (con el consiguiente retraso en el lanzamiento) para que la calificación por edad no se disparara. Lógicamente, a nosotros no nos parece bien, porque buena parte del "feeling" de este juego viene de ese contraste tan brutal y cruel.

Tanto es así que, incluso en la versión sin censurar, hay un momento en el que el propio juego nos advierte de que viene una imagen muy desagradable, que podemos saltarnos si lo deseamos.

Así, Martha is Dead va más sobre la angustia, el misterio y lo desagradable que sobre el propio terror, aunque hay algún momento que puede dar algo de miedo. Es en esos momentos más duros cuando nos puede tocar decidir sobre qué hacer, lo que puede alterar acontecimientos previos.

También tenemos algunos quick time events en los que hemos de construir frases que resuman lo que estamos sintiendo. Eso nos lleva al que posiblemente sea el principal problema del juego en España: la traducción.

Por un lado, este juego de aventura se ha concebido para jugarse con voces en italiano, para dar autenticidad a la ambientación, aunque es posible jugarlo en inglés, pero con voces bastante peores.

Pero claro, los textos y los subtítulos sí están en castellano. Suelen estar bastante bien adaptados, pero en algunos momentos de puzzle (por ejemplo, cuando hemos de usar un telégrafo), algunas palabras no se corresponden exactamente con el texto original italiano. Y esa falta de exactitud puede llevar a equívocos, que no os podréis explicar si no cambiáis los textos a italiano por un momento.

Además de las voces, la música también es crucial para meternos en atmósfera. Escuchas melodías tradicionales italianas y algo de música clásica en la radio, para pasar a cuerdas chirriantes y sonidos distorsionados en los momentos más tétricos.

Los gráficos destacan por su recreación de los escenarios y de esa luz mediterránea que nos imaginamos al pensar en Italia. Los modelos de personajes son meramente cumplidores y se nota que en LKA se las han ingeniado para no meterse en camisas de once varas con las animaciones complicadas, a la vez que preservaban la atmósfera.

Esto tiene sentido porque el estudio es pequeño (de unas diez personas) y porque todo el juego se concibe como una narración de Giulia, así que tiene sentido que a veces solo veamos texto y no imágenes, aunque para nuestro gusto se ha abusado del recurso. Hubiéramos querido ver según qué cosas, del mismo modo que se muestran otras más contundentes.

En cualquier caso, los desarrolladores han conseguido su objetivo: impactarnos con lo que hemos jugado. No solo por lo duro de lo que nos cuenta o cómo lo cuenta (hay algunas metáforas visuales muy, muy poderosas, sobre todo en el tramo final), sino también porque no podemos evitar dar vueltas a nuestras decisiones, para intentar entender qué ha pasado realmente.

Martha Is Dead es un juego con claro espíritu indie y con un perfil que seguramente lo aleje de buena parte del público, pero a la vez supone una reflexión necesaria sobre la naturaleza humana y sobre nuestro lado más oscuro. Todos lo tenemos y, quizá, solo hace falta que llegue el detonante adecuado para exponerlo...

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