Análisis de Mortal Kombat 11: Aftermath, una expansión con muchos invitados estrella

El universo de Mortal Kombat es más grande que nunca, algo que nos demostró Mortal Kombat 11 con su modo historia y su enorme plantel de modos de juego y luchadores. Con el tiempo, diferentes expansiones han ido aumentando sus facetas, pero ninguno tan "kontundente" (sí, ya estamos con la bromita de la k) como Mortal Kombat 11 Aftermath, el nuevo DLC que aporta un torrente de novedades a la lucha de Liu Kang y compañía.

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Vamos por un lado con las novedades gratuitas para todos los usuarios. Cualquier persona que tenga Mortal Kombat puede actualizar el juego para disfrutar de los nuevos Friendships (ya sabéis, movimientos de broma y no letales que podemos ejecutar al final de un combate, en lugar de un Fatality) y dos escenarios extra: la Cámara de Almas y el Pozo de la Muerte, que los veteranos conocerán bien. Para rematar, se han añadido 3 "Fatality de escenario", que nos permiten rematar al desdichado rival usando las "bondades" del entorno.

Todo eso es gratis, pero las novedades de pago de Mortal Kombat 11: Aftermath tienen más enjundia. Se añaden 3 nuevos personajes (Robocop, Sheeva y Fujin) y una expansión para el modo Historia con 5 capítulos y 25 combates, además de 3 packs nuevos de skins. Es posible comprar solo Aftermath, pero 39,99 euros del ala (aparte, necesitas el juego base) y, la verdad, es la opción que menos compensa. También existe la opción de comprar Aftermath+Kombat Pack que, además de todo lo anterior, incluye otros 6 personajes lanzados previamente (Terminator, Shang Tsung, Night Wolf, Sindel, Joker y Spawn) y más trajes, todo por 49,99 euros. O, finalmente, el juego base+Aftermath+Kombat Pack por 59,99 euros, sin duda la mejor opción si aún no teníais nada.

Centrándonos en Aftermath, sus 3 nuevos luchadores son muy interesantes, aunque lógicamente todos los ojos van a estar puestos en un RoboCop muy molón y plagado de movimientos chulos, además de contar con la imagen y la voz de Peter Weller, el actor original de la primera película. Por supuesto, el principal jugo está en la expansión para la historia, que se juega aparte del modo historia principal. En cualquier caso, continúa los acontecimientos justo después del final de Mortal Kombat 11, así que es mejor jugar primero la historia principal y luego ir a por esta nueva.

Todos los personajes nuevos que han ido llegando tienen su momento de protagonismo en la Historia de Aftermath (lógicamente, se quedan fuera Spawn, Terminator y RoboCop), pero los que más brillan, de lejos, son Sindel y, sobre todo, un Shang Tsung que tiene buena parte del peso de la trama. Recordemos que el personaje está interpretado por Cary-Hiroyuki Tagawa, el mismo que lo interpretó en la primera película de 1995. Es un pedazo de actor (como se comprobó en la serie The Man in the High Castle) y su presencia se come la pantalla siempre que aparece.

La historia en sí es bastante redundante (otra vez estamos con viajes en el tiempo y alianzas imposibles), pero es cierto que ciertas escenas son tremendamente espectaculares (el motor gráfico sigue siendo una pasada) y ver cómo se desarrollan las inquinas entre personajes tiene su gracia si sois seguidores de la franquicia desde el principio.

Como en el juego base, Mortal Kombat 11 Aftermath estructura cada uno de sus 5 capítulos en torno a otros tantos personajes clave, pero en determinados combates podemos elegir quién luchará entre 2 posibles candidatos. En concreto, hay una elección de lo más chula que mejor no os desvelamos...

En conjunto, ¿compensa esta expansión de Mortal Kombat 11 si la compramos por separado? La verdad, nos parece excesivamente cara para lo que dura (si os ponéis, os podéis pasar la historia en un día sin problemas), pero si la compráis junto con la otra expansión o en el pack que reúne todo, es un añadido de lo más interesante. La elección es tuya: choose your destiny.