Análisis de Red Faction Guerrilla Re-Mars-Tered para Nintendo Switch

Lanzado originalmente en 2009, Red Faction Guerrilla es recordado, por muchos, por ser una aventura en mundo abierto en la que la destrucción es el eje de todo. Destruir cualquier edificio y construcción que viéramos, si eso nos ayudaba a liberar las seis zonas que componían el mapa del juego de la opresión del EDF, que era el objetivo final del juego.

El 3 de julio de 2018 THQ Nordic lanzó Red Faction Guerrilla Re-Mars-Tered para PS4. Xbox One y PC, versión que ha servido de base para este port para Nintendo Switch (realizado por Kaiko) y que, como aquellos títulos, se limita a reunir la campaña individual, el multijugador y el contenido adicional junto a ciertas mejoras gráficas, como una puesta al día de las texturas y los efectos de luz. Pero ¿es suficiente? ¿se mueve bien en Switch? ¿tiene algún problema reseñable? Vamos a verlo.

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En análisis de Red Faction Guerrilla Re-Mars-Tered para Nintendo Switch no vamos a dejar de comentar las características generales, aunque sea un juego que lleva una década a la venta. En él encarnamos a Alec Mason, un ingeniero especializado en demoliciones que acude a Marte para trabajar con su hermano.

Pero no pasan ni cinco minutos desde que pone el pie en el planeta rojo, y todo cambia para siempre, pasando a colaborar a la fuerza con la Red Faction, un grupo de rebeldes que lucha contra la opresión del EDF, la fuerza de defensa de la Tierra, que se ha hecho con los mandos y explota y aniquila sin piedad a los colonos.

Como experto en demoliciones, Alec Mason utilizará sus "demoledores" conocimientos para debilitar al EDF, destruyendo sus infraestructuras clave, y así recuperando el control de las 6 zonas que componen el mapa del juego. Pero no todo es tan sencillo como llegar y demoler...

Tendremos que cumplir misiones de la guerrilla (muchas de rescate de prisioneros, otras de demolición...) para aumentar la moral de los rebeldes, lo que puede suponer ayuda como la presencia de NPCs en los tiroteos, lo que a su vez repercute en que sea más fácil acometer las misiones principales.

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Por si no conocéis Red Faction Guerrilla Re-Mars-Tered, quizá os estéis preguntando... ¿y como es en la práctica la demolición? Pues comenzamos con el emblemático martillo de la saga, con el que podemos destruir casi cualquier pared y objeto del juego, así como unas bombas lapa que podemos detonar a distancia. Eso para empezar, pero pronto se unen lanzacohetes, minas de proximidad, torretas fijas en algunos puntos del mapa y otros ingenios que mejoramos con la chatarra que conseguimos (es la "moneda" del juego). Y eso sin contar vehículos como una especie de mecha, una mochila propulsora...

El caso es que la demolición, a poco que te atraiga la idea, es tremendamente divertida... y lo sigue siendo una década después del lanzamiento original. Es más: quizá sea lo más divertido de todo el juego, ya que otras áreas no son tan brillantes, un aspecto que con el paso de los años es especialmente evidente.

Nos estamos refiriendo a la propia historia (evidente desde lejos, y que pasa de puntillas por aspectos que podían ser más interesantes, como la moralidad tras los actos del protagonista) o incluso la evolución de los personajes, que en todo momento son bastante planos. O incluso la propia recreación de Marte: todas las zonas son muy parecidas, y varían algunos detalles luminoso, el tono rojo de la tierra... y poco más.

Eso sin hablar de la estructura de misiones, que peca de ser muy simple y repetitiva (el rescate de rehenes es el pan nuestro de cada día, como la propia demolición). Pero insisitimos: a poco que te atraiga la demolición del entorno, te lo pasarás como un enano.

En cuanto al port, al igual que el otro sandbox remasterizado de Volition, Saint Row The Third The Full Package, lo cierto es que el trabajo es bastante sólido y consistente. Durante la inmensa mayoría del tiempo no hay caídas de frames, ni incluso cuando se amontonan las explosiones y los cascotes cayendo.

Red Faction Guerrilla Re-Mars-Tered no tiene una tasa de frames bloqueada en Nintendo Switch, y aunque en ningún caso supera los 40-45 fps (en modo portátil), tampoco suele caer por debajo de los 30. Y si la tasa de fps mantiene el tipo, casi siempre sucede lo mismo con la parcela gráfica: quitando alguna textura "bailonga" o que carga más tarde, suele dar el tipo siempre.

Eso sí, como hemos dicho, se le notan las costuras en algunos detalles: las secuencias de vídeo resultan especialmente añejas (y como si estuvieran a resolución más baja). Algo parecido sucede con el modelo de los personajes, que resulta menos detallado para los tiempos que corren, o la IA, un tanto errática y con picos inexplicables en la dificultad (algunas misiones serán un paseo, y la siguiente una pesadilla, sin lógica alguna).

Esto último enlaza con el que, quizá, es el aspecto más molesto de todo el juego: los tiempos de carga. Como en otros ports de Nintendo Switch, son sensiblemente más altos que en otras versiones del juego. La primera carga puede rondar los 30-40 segundos. Si nos matan, los 20-30 segundos de espera no nos los quita nadie. Y lo que es peor: nos dejará en nuestra base, teniendo que volver a activar la misión y el viaje hasta donde tiene lugar la misión.

Y, aunque las texturas también están remasterizadas en Red Faction Guerrilla Re-Mars-Tered para Nintendo Switch tampoco llegan a deslumbrar por lo parecido que resulta todo el mapeado. El juego no luce mal, pero Marte tampoco da lugar a una gran variedad de escenarios. Lo que sí ha mejorado, y deja algunas estampas espectaculares, es la iluminación.

El port para Nintendo Switch también deja una de cal y una de arena con el control. A bordo de vehículos y a pie usando armas como el martillo o las minas la cosa funciona bastante bien y es muy disfrutable en modo portátil... pero la cosa se tuerce al apuntar con las armas de fuego con los Joy-Con. Por defecto la sensibilidad es demasiado alta, y no se corrige ni bajando al mínimo de sensibilidad. Con un mando Pro la cosa mejora, y mucho.

El juego incluye las misiones adicionales del DLC y los modos multijugador. En estos últimos no hemos encontrado a nadie para una partida, por lo que no podemos contaros qué tal funcionan, aunque por otras versiones que hemos probado, sus modos también giran en torno a la destrucción (y en el caso de Nintendo Switch, necesitas una suscripción de Nintendo Switch Online).

Por último, el juego también incluye la pista de audio en castellano, algo que es de agradecer ya el el doblaje es bastante bueno y cuenta con algunas voces conocidas, como la de Roberto Encinas, la reconocible voz de Nathan Drake, entre otras muchas.

Así pues, si te estás preguntando si merece o no la pena el juego, nuestra valoración de Red Faction Guerrilla Re-Mars-Tered para Nintendo Switch es muy clara: si le perdonas sus defectos (que algunos son subsanables vía actualización) y buscas diversión directa, con explosiones y destrucción por doquier, el juego te gustará, pese a los tiempos de carga. Además, nos llega a precio reducido, y por 29,99 euros puedes disfrutar de una divertida aventura en mundo abierto, aunque mucho menos loca y variada que Saint's Row The Third...