Bright Lights: Crítica del documental sobre Carrie Fisher y Debbie Reynolds

Acabar 2016 fue un verdadero dolor. Sobre todo habida cuenta de la cantidad de celebridades, actores, actrices y artistas de no poco talento que nos dejaron durante ese año. Aunque, quizá, el golpe más duro fue el de la muerte de Carrie Fisher, actriz que encarnó a la Princesa Leia en Star Wars. Un golpe que fue también doble, pues poco después también moriría su madre, la súperestrella Debbie Reynolds. Pocas semanas después de estos aciagos sucesos hemos podido ver Bright Lights: Starring Carrie Fisher and Debbie Reynolds, un documental que honra la memoria de ambas estrellas.

Bright Lights: Starring Carrie Fisher and Debbie Reynolds, grabado por  Alexis Bloom y Fisher Stevens, es un documental de hora y media que sigue la relación de ambas mujeres en los últimos años, siendo un retrato íntimo de madre e hija, quienes vivían a pocos metros la una de la otra. De esta manera, se establecía un acercamiento a dos figuras clave de la industria. Una, la estrella de Cantando bajo la lluvia, uno de los mejores musicales de todos los tiempos; la otra, una figura de la cultura popular, además de una de las curadoras de guiones mejor valoradas de Hollywood.

Con Bright Lights: Starring Carrie Fisher and Debbie Reynolds, HBO dice adiós a dos grandes figuras del siglo XX, sendas representantes de la Edad de Oro de Hollywood y del turbulento mundo del espectáculo de los años 70 y 80, pero siempre parte de la realeza de Hollywood. 

Un retrato íntimo, para fans y cinéfilos

Bright Lights: Starring Carrie Fisher and Debbie Reynolds es uno de esos documentales que no busca la divulgación per sé. No esperéis una pieza historiográfica académica ni un estudio contrastado que pretenda revelar alguno de los oscuros secretos de la Meca del Cine. Tampoco esperéis que en él aparezcan Mark Hamill y el resto del reparto de Star Wars chupando cámara, ni un extraño giro de tuerca en el que alguna figura oscura del mundo del espectáculo surja, reivindicando la paternidad de los hermanos Fisher. No, nada de eso.

Bright Lights es como ya hemos dicho, un producto audiovisual intimista y no exento de cierto regodeo y autoindulgencia. Pero tampoco quiere ser otra cosa, ojo. Se trata de un homenaje póstumo a estas dos mujeres, explicando la vida de ambas, su relación, sus problemas y quiénes eran en los últimos años y cómo vivieron (lo mejor que pueden) hasta el último de sus días. Dicho esto, tampoco nos va a ofrecer morbosos planos de hospital, relatando los últimos momentos de ninguna de ellas. Los realizadores han tenido sobrado buen gusto como para no llegar a eso. 

Y es que Bright Lights lo que pretende es difundir tras ahondar en la dimensión humana de Carrie y Debbie, dos figuras que a lo mejor para los europeos y el público más joven no dicen mucho, pero para quien esté en el mundillo del cine y conozca un poco acerca de la historia de la Industria, sabrán reconocerlas como dos figuras de no poco peso o fama. Reynolds, como ya hemos dicho, fue una de las grandes y su hija tampoco se quedó atrás. Ora por sus escándalos, ora por su papel como escritora, ora por su fama como princesa Leia.

En este aspecto, el documental se centra pues en esta idea de mujeres detrás de la leyenda, refleja y ahonda en su relación y explica por qué han llegado a ser personas tan cercanas entre sí. Para ello contrasta testimonios recogidos en los últimos cinco años con documentos audiovisuales de 1950-80, repasando la trayectoria vital de cada una: el matrimonio con Bobbie Fisher, la ruptura a raíz de la infidelidad con Elizabeth Taylor (el Brangelina original, por cierto), el trastorno bipolar de Carrie Fisher, su debut en el cine y su salto a la fama con Star Wars, su posterior adicción a las drogas... y así hasta llegar a la actualidad. 

De ahí que este documental sea ante todo un retrato íntimo (y consentido) de las dos protagonistas del mismo, buscando más la emoción y la empatía que los meros hechos documentados. Esto claro, puede verse como un defectillo, pero debe entender más bien como el fin último de la cinta. Además, por otro lado, tampoco pretende ser del todo riguroso, debido al público que va dirigido. Esto es, admiradores, la familia de ambas y, gente adicta al mundo de las celebrities. De ahí que pretender compararlo con un documental de National Geographic o del Canal Historia no venga al caso. Sobre todo porque, les guste o no a sus detractores, el montaje está muy bien realizado, la iluminación es óptima y la edición no es mala del todo. Aunque, eso sí, haya a veces cierto desorden en las cronologías que hace algo lioso su visionado y se obvien algunos detallitos nimios de la vida de ambas en aras de no airear más miserias de las necesarias. 

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Por tanto, podemos decir que Bright Lights es un buen documento audiovisual que recomendamos tanto a cinéfilos, como fans de Carrie Fisher y Debbie Reynolds. Del mismo modo, a quien le gusten las historias de famosos encontrará en Bright Lights: Starring Carrie Fisher and Debbie Reynolds un placer culpable que visionarán con sumo gusto. Ya os avisamos de que no os defraudará. Ya os aseguramos de antemano que, aunque sea para pasar un rato agradable recordando a estas dos señoras, no malgastaréis vuestro tiempo. Es de esos documentales que os acaban dejando una sonrisa en los labios. 

Bright Lights: Starring Carrie Fisher and Debbie Reynolds se encuentra actualmente en el catálogo de HBO España, completamente doblado al castellano y con subítitulos en español.