Definir Bienvenidos a Utmark (Utmark) es todo un reto para quien se lo proponga. Esta serie noruega llega a HBO el domingo 18 de abril y está compuesta por ocho episodios de entre 40 y 45 minutos de duración.
Ha sido creada y escrita por Kim Fupz Aakeson (Venganza bajo cero, Perfect Sense, Conociendo a Astrid) y dirigida por Dagur Kári (Corazón gigante, Dark Horse, Un buen corazón) y, a grandes rasgos, podríamos decir que nos traen a la cabeza el estilo de los Coen, eso sí, pasado por el refrigerador, porque es bastante fría.
Uno de los primeros aspectos que llama la atención de Bienvenidos a Utmark es su pausado ritmo: es de las que apuran los planos y se toma su tiempo, así que si sois impacientes, os hará desesperar. Sin embargo, también cabe señalar que hay recompensa para quienes inviertan en ella su tiempo, aunque solo sea por los puntazos que se marca de vez en cuando. Es muy imprevisible.
Nos desplaza a una remota región norteña de esas en las que el ser humano es una minucia a merced de la naturaleza y en la que, por tanto, son muy importantes las relaciones sociales y el equilibrio. Y asistimos justo al momento en el que ese balance se rompe: Finn, un granjero de Utmark encuentra a una de sus ovejas muertas y se dispone a pedirle explicaciones a su vecino, un orgulloso y prepotente sami que se niega a disculparse.
De forma paralela, Kari, una joven profesora, se traslada al pueblo con el ánimo de vivir en comunión con la naturaleza y echar raíces, quizás formando su propia familia con el paso del tiempo. Desde el comienzo, nota cómo en ese rincón apartado del mundo, los extranjeros no siempre son aceptados con los brazos abiertos, pero encontrará una inesperada amiga, la esposa de Finn, con quien poder hablar de su vida.
Como decíamos al comienzo de este análisis, definir esta serie es difícil porque es muy caleidoscópica. Eso sí, hay varias ideas centrales que copan mucha atención desde el comienzo: se trata con profusión el tema de la pérdida y también los contrastes culturales.
Esto hace que Bienvenidos a Utmark sea a la vez un retrato interesante a nivel local, al desarrollar conflictos como el de los indígenas (sami) con los colonos noruegos y a nivel universal porque lanza tramas muy humanas en las que es fácil reconocerse, por más que los códigos culturales sean distintos a los nuestros.
La serie está poblada por toda clase de personajes que sorprenden una y otra vez, como lo hace también el propio tono de la narración que pasa del suspense al romance, del romance al drama, del drama al terror y del terror al humor negro de forma aleatoria y sin solución de continuidad.
Es decir, que aún en los últimos instantes del último episodio, a sabiendas ya de qué historias quedan más o menos cerradas y cuáles podrían seguir desarrollándose en el futuro, un simple cambio en la banda sonora hace que podamos interpretar el final de una forma distinta al momento anterior. Tremendo el uso del sonido y de la banda sonora para crear atmósferas.
Otro de esos contrastes que llaman la atención es el del mundo de los adultos versus el de los niños. Los primeros encuentran verdaderas dificultades para explicarles a los menores su comportamiento e incluso son ellos quienes les dan lecciones de madurez mientras se enredan en asuntos turbios como venganzas o peleas de egos.
Al final hay espacio para hablar de cosas tan dispares como la identidad sexual, las expectativas ante el devenir de la vida, las adicciones o algo tan básico como encontrar el lugar que a cada uno le corresponde.
En resumidas cuentas, aunque no es una serie generalista, Bienvenidos a Utmark tiene su atractivo: en un inhóspito lugar se dan cita lo ilegal, lo amoral, la muerte, un exorcismo y ¿una resurrección? Si buscáis algo distinto, lo vais a encontrar en HBO. Reconforta pasear por historias que se salen tanto de las fórmulas preestablecidas... hay un horizonte más allá de la etiqueta del "nordic noir" y muchas historias por contar.
VALORACIÓN:
La serie noruega Bienvenidos a Utmark es, como poco, peculiar. En ella se entremezclan elementos de humor negro, drama y tramas de tintes sobrenaturales... todo a un ritmo bastante reposado, así que no esperéis grandes dosis de adrenalina sino más bien una serie que va cuajando a fuego lento.LO MEJOR:
La galería de excéntricos personajes, el humor negro y el saborcillo tan único de la serie que mezcla un montón de géneros en un mix curioso.LO PEOR:
El final queda muy abierto, no esperéis una conclusión definitiva sino más bien un anzuelo de cara a una segunda temporada.70
Bueno
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