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Crítica de Dragon Ball ¡Fusión! La película que presentó a Gogeta

Dragon Ball Z Fusion
Un empleado del Más Allá ocasiona una avería en una máquina de depuración de almas, lo que da pie al nacimiento de un poderoso ser llamado Janemba, además del levantamiento de todos los muertos de sus tumbas. Mientras Goku y Vegeta encaran a Janemba en el Más Allá, los demás protegen la Tierra. La película se estrenó en 1995.

Ahora que, en Dragon Ball Super, personajes como Kefla han traído de vuelta el interés por las fusiones en Dragon Ball y que villanos como Freezer han recuperado una importancia que no habrían imaginado ni en sus mejores sueños, es un buen momento para recordar una película de Dragon Ball Z que jugó con todos esos ingredientes antes. Hablamos de ¡Fusión!, claro, de la que os refrescamos el análisis que le dedicamos en su momento.

La nostalgia puede jugar malas pasadas, también en el universo de Dragon Ball. Recuerdo esta ¡Fusión! como una de las películas que más me marcaron en su momento, pero su revisionado ha resultado bastante decepcionante. Y mira que tiene buenos ingredientes: Goku peleando en súper saiyano nivel 3, éste y Vegeta convirtiéndose en Gogeta, el propio Janemba y el caos que ocasionan, etc. Lamentablemente, todo esto se gestiona de una forma bastante desacertada, aunque la película tiene su miga. Vamos por partes...

Antes de profundizar en otros aspectos de la película, hay que hacer hincapié, una vez más en la traducción española. Por un lado, tenemos el nombre de Paikuhan, el "rival-aliado" de Goku en el otro mundo, que en este film se tradujo como Paul. ¿Ein? Más curioso es el caso de Janemba, el enemigo principal. En la versión castellana, este personaje no para de decir "no quiero". En realidad, debería decir su propio nombre, "Janemba", tal y como hace en japonés. ¿A qué se debe ese extraño cambio? Hay una teoría circulando por los foros: ya que la película se tradujo del francés (en el que sí dice "Janemba"), es posible que el traductor pensara que decía "je n'aime pas", "no me gusta", pues suena muy, muy parecido. A nosotros nos parece plausible...

 

Crítica de Dragon Ball: ¡Fusión!

Héroes con aureola

La historia de Dragon Ball Z: Fusión se sitúa en la saga de Boo, aunque de nuevo es imposible ubicarla en un punto concreto sin caer en errores de continuidad. Goku dice haberse enfrentado a Majin Boo y Trunks y Goten ya saben fusionarse, por lo que más o menos, los hechos tendrían lugar antes de la pelea contra Kid Boo. Pero claro, Goku y Vegeta nunca coincidieron en el otro mundo, así que no hay forma de encajar el puzle. Ya sabéis, no hay que dar mayor importancia a ese aspecto, pues las películas se toman muchas licencias en cuanto a la continuidad.

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El diseño de Janemba se inspira claramente en el de Boo: su primera etapa, la de un bebé gordinflón gigante, se parece mucho a la primera fase que vimos del monstruo rosado. La segunda recuerda a la de Super Boo. Ahora bien, el enemigo tiene ataques de cosecha propia muy interesantes. Sus puñetazos "teleportados" o la forma en la que él deshace "en cubitos" son muy estéticos. También destaca su capacidad para transformar objetos, gracias a la que crea una espada que da unos tajos parecidos a los que ofrecía Dabra. En general, supone una interesante aportación al universo Dragon Ball.

Otro aspecto interesante de Dragon Ball Z: Fusión es que, debido a la aparición de Janemba, todos los muertos resurgen de sus tumbas. ¡Eso incluye a todos los villanos de la saga, hasta los de las películas anteriores! Ni qué decir tiene que todo esto fue muy anterior a que se idearan algunos de los momentos más memorables de Dragon Ball Super. Así, Goku y Vegeta se encargan de Janemba, mientras los otros (básicamente, Gohan, Videl, Satan, Trunks y Goten) atacan a todos los demás. Al espectador se le empieza a caer la baba cuando ve aparecer a Freezer y, detrás, decenas de enemigos conocidos. Gohan, vestido de Gran Saiyaman, acaba con Freezer de un puñetazo (lógico, dado su nivel de poder)... Y se acabó. Todos los otros personajes huyen despavoridos y no se les vuelve a ver en toda la película.

Habría molado infinito ver a los héroes secundarios peleando contra todos estos villanos, pero en lugar de eso se nos ofrecen unos aburridísimos minutos de Goten y Trunks peleando contra el ejército de un pseudo-Hitler. Esta ¿pelea? que se intercala con la de Janemba es absolutamente anodina y boba y juega con las ganas que todos tenemos de ver a los demás personajes en acción. Por cierto, como bien apunta un compañero en los comentarios, esa presencia fue censurada en la versión occidental. Pero no, sólo vemos a este Hitler. Lo dicho, una premisa genial, desperdiciada.

Lo mismo podemos decir de la fusión de Goku y Vegeta, el gran reclamo de esta película. Aunque en el manganime vemos a Vegetto, la fusión mediante los pendientes Pohtala, esta fusión "por baile" era algo inédito, así que el interés por verla resulta evidente. Al igual que pasaba a Goten y Trunks con este movimiento, el primer intento de fusión sale mal y aparece un Gogeta gordinflón. OK, hasta aquí todo bien, tiene algo de gracia. La decepción llega cuando aparece el Gogeta definitivo. Tiene un aspecto imponente, lanza unos ataques súper vistosos... Pero aparece un minuto. ¡Un minuto! Tras eso, se acaba el combate. Vamos, que se muestra muuuucho más al Gogeta gordinflón. ¡Demonios, si hasta sale más Hitler! De nuevo, una película de Dragon Ball cae en el error de ponernos la miel en los labios y acabar antes de que podamos saborearla.

 

Crítica de Dragon Ball: ¡Fusión!

Hay muchos otras pegas. Por ejemplo, Videl, que aquí es presentada como una bobalicona deslumbrada por Gohan, cuando en el manga ella es todo un carácter. O el propio papel de Paikuhan, el cual se pasa más tiempo insultando a la cúpula donde está Enma que peleando. Agradecemos el humor, pero cuando es tan tontorrón, está un poco de más...

En realidad, lo mejor resuelto es la parte en la que Goku pelea en súper saiyano nivel 3 y la presencia de los cuatro Kaiohs y el Kaioh supremo, pues algunos de estos personajes son exclusivos del anime (nunca se dibujaron en el manga).

Supongo que, cuando habéis visto la nota que le hemos puesto, os habréis quedado decepcionados. ¡Pero si es una de las películas más míticas! Los personajes son interesantes, pero la película no lo es, lamentablemente. Había mucho más que rascar, pero el ritmo y el guión se quedan en una experiencia entretenidilla (por momentos, hasta aburrida), sin más. No perdáis la fe, todavía quedan más aventuras...


Recuerda, puedes leer las críticas del resto de películas de Goku en nuestro especial Dragon Ball.

VALORACIÓN:

Tiene personajes muy interesantes que ofrecer, pero la experiencia se desdibuja porque la película da prioridad a los momentos menos importantes.

LO MEJOR:

El aspecto y poderes que se presentan con Gogeta y Janemba.

LO PEOR:

Lo increíblemente desaprovechado que está todo lo demás.
Hobby

63

Aceptable

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