Crítica de Mr. & Mrs. Smith, la nueva serie de Prime Video basada en el hit de Brad Pitt y Angelina Jolie

Cualquier parecido con la película original es pura coincidencia: esta nueva serie, de ocho capítulos de entre 45 y 60 minutos de duración, toma el título Mr. & Mrs. Smith de la cinta de 2005 que protagonizaron Brad Pitt y Angelina Jolie, por entonces pareja de moda.

Nada queda de esa explosiva química en la nueva pareja protagonista formada por Donald Glover y Maya Erskine, como tampoco queda rastro del sentido del humor y del espectáculo que tenía aquella. No es que fuera un peliculón, pero desde luego era hija de su tiempo y ofrecía un festival palomitero estupendo firmado por Doug Liman.

La serie quiere retomar el corazón de la historia, la crisis de pareja de dos agentes que forman un matrimonio en apariencia arbitrario mientras trabajan para una misteriosa agencia que les propone distintas misiones. 

Cada episodio se corresponde, más o menos, con una de ellas. Empiezan siendo desconocidos, luego amantes, posteriormente enemigos y así va evolucionando una relación tormentosa.

La cuestión es que Mr. & Mrs. Smith no parece tener nada claro qué historia quiere contar ni cómo. Los espectadores, claro, esperarán una comedia de acción, quizás no tan loca como la recién estrenada en cines Argylle, pero desde luego sí bastante ligera. La serie no podría estar más lejos del objetivo de despertar risas ni de mantener el interés por la trama de espionaje.

Por el contrario, adopta muy pronto un tono inesperadamente dramático, la fotografía es de lo más plomiza, muy oscura y sí, aunque encontramos persecuciones, explosiones y sorpresas, es una de esas narraciones que va de más a menos, perdiendo de forma gradual interés.

Mr. & Mrs. Smith arranca mostrando el destino de una Jane y un John que terminan acribillados a balazos. A partir de ese momento conocemos a sus sustitutos, que son reclutados por una organización llamada Hihi que les hace un cuestionario exhaustivo además de tomar una muestra de ADN.

Pronto se conocen: serán un matrimonio ficticio para pasar desapercibidos e ir completando una serie de misiones con la mayor discreción. Sin embargo, empezarán a sentirse atraídos el uno por el otro, lo que les va a complicar la vida... aunque no tanto como cuando se abre una crisis de confianza entre ambos.

A medida que se suceden los casos en los que deben intervenir se pone de manifiesto que Jane tiene mayores aspiraciones que John, que nunca terminó de cortar los lazos con su pasado y siente menos fidelidad por Hihi. Lo malo es que, en este caso, el divorcio no es una opción.

Ver galería

Mr. & Mrs. Smith - Galería de imágenes (4 imágenes)

A pesar de sus muchos defectos, la serie cuenta con un buen elenco, con Erskine y Glover (que también ejerce de coguionista y productor ejecutivo) a la cabeza y un buen listado de intérpretes en papeles puntuales.

Tenemos, por ejemplo, a John Turturro, a Sarah Paulson, a Wagner Moura, a Paul Dano, a Ron Perlman y hasta a nuestra Úrsula Corberó en un pequeño rol. Narrativamente la estructura es bastante simplona y el desenlace se antoja perezoso, casi desganado. Queda abierto, de modo que nos queda la duda de la renovación, podría quedarse tal cual sin problema, abierta a la interpretación.

Hay buenas ideas en el metraje, pero el análisis de la crisis personal y de pareja de Jane y John Smith resulta muy pesada. Los episodios se hacen interminables y cuesta llegar hasta el final.

Es por todo ello que Mr. & Mrs. Smith no cumple las expectativas más básicas: es mucho menos entretenida de lo esperable y, si bien actualiza bastante la historia y las relaciones entre los personajes, también los hace menos atractivos e interesantes. Termina con una pátina algo patética de lo que supone el amor, como entrega y como desafío.

Ojo, que lo que pone de manifiesto, más allá del resultado, es que hay un gran hartazgo de historias que ya conocemos, por más vueltas que se les dé. La industria necesita fortalecerse desde nuevos proyectos con ideas inéditas y títulos independientes. ¡Aire fresco, por favor!