Crítica de Ms. Marvel capítulos 1 y 2 - La comedia adolescente se une al imaginario Marvel

Desde hace unos años, Marvel está peleando fuerte por renovar y actualizar su imagen, no solo en materia de cine y televisión, sino también en los propios cómics, donde "nace todo". Una de las principales abanderadas de esa tendencia es Ms. Marvel.

Kamala Khan, la protagonista de esta historia, no lleva ni diez años protagonizando sus propias viñetas, pero su popularidad ha crecido tanto que era una cuestión de tiempo que llegara una serie de Ms Marvel a Disney Plus.

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Nosotros hemos podido ver ya los dos primeros episodios de Miss Marvel (de un total de seis) y a continuación os contamos qué nos parece esta serie del UCM por ahora.

Quizá, lo más inmediato deba ser advertir de que esta serie tiene, como era de esperar, un enfoque muy distinto a otras del UCM y está orientada principalmente a adolescentes que puedan sentirse identificados con el carácter, los anhelos y las aventuras de Kamala.

Eso no significa que un espectador adulto no pueda disfrutar de Ms. Marvel, pero hay que tener el "chip" preparado para un enfoque más naïf y sencillo de los acontecimientos, al menos por ahora. De hecho, todo el primer episodio se centra en los problemas cotidianos de la protagonista: los conflictos con su madre, sus ganas de ir a una convención de fans de superhéroes...

No esperéis una mezcla de humor, terror y drama como en Caballero Luna, por ejemplo. Aquí, todo es bastante más luminoso, sin que ello soterre algunas reflexiones sobre el legado de Los Vengadores o la importancia de encontrar buenos roles de conducta.

En cualquier caso, Ms Marvel es una serie que quiere ser simpática y agradable para el público adolescente. Quizá lo sea en exceso y tanto el guion como la puesta en escena parezcan "ya vistos" en otras producciones similares.

Los recursos de la protagonista dibujando sus fantasías en un cuaderno (a lo Capitán calzoncillos ) o ella bailando algún "temazo" para demostrar su alegría cuando un chico le gusta resultan algo manidos, pero tienen mucho sentido y por suerte hay alrededor dos factores clave.

Por un lado, Iman Vellani, la actriz protagonista, que demuestra un gran desparpajo a la hora de interpretar a una Kamala Khan alegre y risueña. Su actuación es de lo más divertida.

Por otro, es muy interesante la representación del ambiente familiar y social. Kamala proviene de una familia pakistaní y musulmana, elementos que no son típicamente representados "desde dentro" en una serie de superhéroes... o en un blockbuster en general.

Las reflexiones sobre la importancia de la familia, la mezcla de la tradición y los gustos modernos de las nuevas generaciones o, simplemente, el hecho de ir a rezar a una mezquita se muestran aquí con mucha naturalidad y nos ayudan a eliminar ese halo de misterio en torno a una cultura que puede resultar muy desconocida para muchos.

¿Y qué hay del elemento superheroico? Como decimos, el primer episodio muestra poquísimo de ello, pero en el segundo las cosas ya se ponen más interesantes.

Por cierto, que también hay algunas observaciones en torno a la necesidad de mantener la identidad secreta versus el impulso de contarlo todo a todo el mundo hoy en día para conseguir un puñado de "me gusta". Es una reflexión necesaria, aunque una vez más no es nueva y ya la veíamos hace años en Kick-Ass, por ejemplo.

A los más puristas quizá les choque que el origen y la representación de los poderes de Ms Marvel sean diferentes a los de los cómics (en ellos, sus habilidades tienen origen inhumano y se desatan por las nieblas terrígenas), aunque reconocemos que el nuevo enfoque es acertado y tiene mucho sentido para aportar misterio y esa dualidad tradición-nuevos deseos.

Además, la forma de mostrarlos es muy espectacular y, sin duda, hace volar la imaginación en torno a lo que pueden dar de sí en un futuro. No solo por sus capacidades sobrehumanas y visuales, sino por cómo pueden cambiar a una protagonista Marvel "de segunda generación".

Igual que Kate Bishop encontró su propia identidad al conocer a Ojo de Halcón, aquí Kamala parte de una admiración total hacia Capitana Marvel (a la que, recordemos, está "condenada" a unirse en la futura película The Marvels) para, a partir de ella, dar forma a una nueva generación.

La fase 4 de Marvel tiene mucho de eso, de renovación, después de que Iron Man o Capitán América ya no estén para defender un mundo post-Thanos.

También hay renovación en la forma de comunicarse. Kamala no para de intercambiar mensajes de chat con su mejor amigo, Bruno y estos se "funden" con elementos del escenario en una apuesta estética muy divertida. 

A fin de cuentas, para las nuevas generaciones la comunicación a través del móvil está íntimamente ligada al resto de la "realidad", ¿no?

La serie Ms. Marvel representa estupendamente cómo el mundo sigue girando y cómo los héroes originales pueden convertirse en leyendas que inspiren a nuevas generaciones (que la mayor aspiración de Kamala sea conseguir el mejor cosplay de Capitana Marvel es toda una declaración de intenciones), las cuales desarrollan su propia identidad y nuevos métodos.

Es cierto que, por ahora, esperamos algo más de "conflicto", de tensión heroica, pero las semillas ya están ahí y resultará interesante ver hacia dónde evoluciona esta historia. 

Hay muchos ingredientes prometedores pero, aunque no los hubiera, solo con la banda sonora tan molona (ojo a los créditos finales) ya nos tendrían bien amarrados...