Crítica de Sonic 2, la película - ¡Tiene más y es mejor que la primera!

Quién nos iba a decir, hace unos años, cuando vimos las primeras y decepcionantes imágenes de Sonic: La película, que esta iba a suponer un éxito tan importante... Y que ello nos llevaría a esta secuela más grande, mejor y más divertida.

Paramount Pictures y SEGA parecen haber dado con la fórmula mágica en ese siempre espinoso terreno que es adaptar videojuegos al cine. Y al final, parece recaer en algo tan sencillo como que se lo pasen bien los espectadores, pero también los creadores.

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Por si tenéis alguna duda: sí, Sonic 2 la película vuelve a ser un producto principalmente pensado para los niños, o simplemente para que los padres pasen un rato agradable en el cine con sus hijos. Hay humor blanquito y tontorrón, mensajes sobre la importancia de la familia y acción intensa, pero sin sangre.

Pero el director Jeff Fowler ha sabido combinar muy bien esta faceta con la de los fans, tanto de nueva como de vieja escuela, que simplemente quieran ver trasladados los videojuegos que nos marcaron a la gran pantalla. ¡Y vaya si lo ha hecho!

En esta crítica de Sonic 2: la película no vamos a colaros spoilers, pero podéis tener claro que vais a encontrar más y mejores momentazos que en la primera película, que os harán soltar algún "aaah, he pillado esa referencia", pero también un grito de flipe que os hará sentiros como niños otra vez. ¿Hay algo más sano y satisfactorio en el cine?

Entretejiendo esos puntos álgidos hay una historia tan simple como cabría esperar (esta vez, todo gira en torno a encontrar la Esmeralda Maestra, ¿la recordáis de Sonic & Knuckles?), pero que se ve rodeada de personajes que cumplen a la perfección con su cometido.

Por un lado, tenemos al propio Sonic, cuya recreación es espectacular y al que da gusto ver correr. Los efectos de estelas y explosiones funcionan tanto para adultos como para los niños, que estamos seguros van a ver extasiados este relámpago azul.

En el catálogo de los recurrentes tenemos a James Marsden como el bonachón Tom y a Tika Sumpter como Maddie, que hacen el papel de "papis absolutamente guais que nos enseñan las verdaderas moralejas de la historia". 

Está claro que no será el papel de sus vidas, pero cumplen bien para hacernos llegar el lado didáctico de la película, sobre lo que realmente importa: la familia.

Y, por supuesto, está de vuelta el gran Jim Carrey como el Dr. Robotnik, con un papel en el que ha tenido que volvérselo a pasar teta, porque eso atraviesa la pantalla y llega a un espectador que mira con una sonrisa cómo hace el ganso. ¡Y qué gusto da esa faceta más boba de este gran actor, que sigue pareciendo de plastilina!

Lee Madjoub también vuelve como Stone, el subalterno de Robotnik. Es el típico "sidekick" aún más tonto que su jefe, en una relación que recuerda a esas series de dibujos inocentonas y sencillas (en el buen sentido), en la que como críos nos gustaba reírnos de las bobadas del malo.

Por supuesto, el gran cambio de esta segunda parte de Sonic es la aparición de Tails y Knuckles. Y hemos de decir que su representación es muy fiel, no solo en lo visual, sino en su carácter.

Tails representa ese niño un tanto solitario, pero genial inventor, que admira a Sonic como héroe (esta faceta se muestra en detalle en las series de dibujos y en los cómics, además de los juegos más recientes), mientras que Knuckles es un tipo duro y distante, que solo conoce el deber y el honor, pero que tiene buen corazón. Por cierto, lo dobla Iris Elba en VO, nada menos.

Ambos aportan mucha variedad al desarrollo y tienen su propio encanto, aunque es verdad que Knuckles resulta particularmente espectacular. En ese sentido, esta película tiene más acción que la primera. Parece que han tomado nota de las críticas, en ese sentido, porque el ritmo está más cuidado, en términos generales. Y eso que son 2 horas de peli.

Otra de las facetas que se criticaban de la primera parte es que el humor a veces se pasaba de vueltas y no sabía cuándo parar. 

Aquí, al principio, nos invade el mismo miedo, porque Sonic no para de hacer gansadas que, seguramente, al espectador adulto no le interesen.

Pero es cierto que el resultado es más comedido y que, sobre todo, hemos de pensar para quién es el foco principal de la película: los niños. Para ellos, ver a Sonic montarse una fiestuqui en el salón o vacilar a Robotnik sea "canalla" y divertido.

Sí hemos de reconocer que, aunque la faceta "humana" está mejor llevada aquí (esas subtramas eran excesivas en la primera parte), hay un tramo dedicado a Rachel, la amiga de los protas, que, aunque bienintencionado, corta el ritmo de lo que verdaderamente queremos ver: a Sonic y los suyos en acción.

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Pósteres en español de los personajes de Sonic 2 La película (9 imágenes)

No es terrible y cuenta un momento bonito, pero ralentiza. En cualquier caso, el volumen de gags y momentos de acción está, claramente, más afinado.

Por un lado, tenemos chistes orientados a los adultos (bromas sobre películas actuales, por ejemplo) y, por otro, el apartado visual es tan espectacular que no te da tiempo a aburrirte, seas un niño o un cuarentón.

Y ya que estamos hablando de los que somos más viejales, toca preguntarse: ¿hasta qué punto se basa la peli en los juegos de nuestra infancia? 

Bueno, los productores ya han dicho que no buscan seguir el orden exacto de los juegos (y hasta planean un universo cinematográfico sobre él), pero hay referencias muuuuy claras a Sonic 3 y, sobre todo, a Sonic & Knuckles.

Y, por supuesto, también recompensa al espectador atento con pequeños huevos de Pascua, que aluden a todo el lore de Sonic. Desde melodías de un móvil hasta nombres de establecimientos, hay mucho por descubrir.

Sonic 2 consigue, en definitiva, coger todos los ingredientes que ya tenía la película original y limarlos, refinarlos para una experiencia más satisfactoria en el cine.

Su historia es simplota, sus personajes no pretenden romper moldes, pero todo funciona para que nos relajemos en el cine y disfrutemos del espectáculo por el espectáculo. Si, por el camino, nos volvemos niños por un momento y nos tocan la patata aludiendo a la familia, el balance es... Sónico.

No queremos cerrar esta crítica de Sonic 2: la película sin reconocer el mérito en una faceta en la que, como sabéis, solemos fijarnos mucho. Y es que se convierte en el ejemplo perfecto de cómo adaptar BIEN los videojuegos al cine. A veces, basta con dejarse llevar...