Tras tocar la melodía de los mares, abre tu inventario para leer la carta que Bobin te ha entregado. Con ella abierta, presiona sobre ‘Vías’ (abajo a la izquierda) y pincha sobre la región de los mares (sureste). A continuación, copia la posición de los números en tu mapa. Estos números indican el orden que debes seguir en tu viaje. En cada parada habrá una especie de pedestal con una bola roja, que tienen la particularidad de volverse azul si tocas el silbato mientras está en pantalla.
¡CUIDADO CON ESE TREN!
Si llegas al primer punto desde el sur, verás claramente la bola
roja en lo más alto de uno de los pilares de roca que hay en el
islote. Enfócala con la cámara y usa el silbato. Sigue hacia el
norte para llegar al segundo punto desde el este, y encontrarás la
segunda bola roja a la derecha del túnel por el que vas a pasar. La
tercera está a simple vista justo en la posición del número 3.
Cambia a azul la última bola roja y aparecerá la cabeza de un pez
por la que entran las vías. Avanza hacia ella para sumergirte y
descubrir el camino al templo de los mares. Una vez en el agua,
traza la ruta directo al templo. Al acercarte, saldrá de él un tren
lanzado hacia ti. Cambia entonces la trayectoria y dirígete a toda
mecha al norte para darle esquinazo, tal y como aparece en la
imagen (6), y tener vía libre al sur para entrar en el
templo.
(6) Sigue esta trayectoria para evitar el tren
CONSIGUE ¡EL LÁTIGO!
Cuando bajes del tren, entra por la única puerta de la sala. Al
otro lado, avanza hacia el norte para llegar hasta las escaleras
que llevan a la primera planta. Una vez allí, sube a una plataforma
móvil para alcanzar el otro lado. Podrás desviar las flechas de la
pared lanzando un golpe de espada justo antes de que te golpeen.
Sube a la siguiente plataforma móvil y te desplazará hacia el
sureste.
Cuando pases entre 4 esferas, usa el bumerán para golpearlas en
el siguiente orden: izquierda, derecha, arriba y abajo. Luego pasa
por la puerta que has abierto y, sin llegar a pisar el pasillo azul
que va hacia el norte, lanza el bumerán para golpear la esfera que
hay al otro lado de la pared. Ahora vuelve a la planta baja y
podrás llegar a la otra escalera, la de la parte este. Una vez
arriba, sigue subiendo por las escaleras que hay junto a ti.
Entra en la habitación central de la planta 2 y espera a que el
nuevo enemigo te arrastre hacia él para golpearle con la espada
(7). Una vez logres zafarte de su látigo, podrás golpearle
continuamente hasta eliminarlo, con lo que se abrirán las 4 puertas
de la habitación y aparecerá un cofre que contiene… ¡el látigo!
(7) ¡Derrotalo para consegur el látigo!
DE PLANTA EN PLANTA
Ve hacia la habitación oeste. Tendrás que estrenar el látigo para
engancharte al saliente de madera de la pared, y así superar el
abismo. Ahora sube a la planta 3 y avanza hacia la zona más al sur
del mapa. Llegarás ante una puerta cerrada junto a una cabeza que
sale de la pared. Para abrirla, usa el látigo sobre la argolla de
la boca.
Al otro lado hay tres estrechos pasillos que van hacia el norte.
Llega hasta el final del que está más al este, y tira con el látigo
de la argolla que hay justo enfrente. Cruza el puente que acabas de
desplegar y toma las escaleras que hay al sureste. Desde aquí,
avanza recto al oeste para encontrar dos cabezas más de las que
salen de las paredes. Usa el látigo para sacar la argolla de una de
ellas (verás que es una espada) y métela en la otra cabeza. Abre el
cofre que ha aparecido y usa el saliente para volver a la
habitación central.
Sal ahora por el norte, y abre la puerta con cerradura que hay al
noroeste. En la planta 3, avanza hacia el este usando el látigo de
saliente en saliente. Para ello has de pinchar en el siguiente
antes de caer al vacío. Entra en la sala que hay al sur y quedarás
encerrado junto a dos enemigos con armadura. Quítales la armadura
con el látigo, y luego elimínalos a golpe de espada. Ya puedes
tomar las escaleras de la planta 4.
Avanza hacia la habitación central, elimina a los dos enemigos con
látigo, y cruza el estrecho pasillo del oeste. Tira de la argolla
que encontrarás al final del pasillo al norte, y usa el látigo
sobre la especie de helicóptero que aparecerá ante ti (8).
Mantén el lápiz sobre la pantalla para no soltarte y espera al
final de su recorrido. Sube las escaleras a la planta 5, y luego
avanza un poco para quedar encerrado junto a dos pequeños enemigos
eléctricos. Para acabar con ellos tendrás que sacar la espada de la
cabeza y lanzarla contra ellos… ¡menos mal que tenemos el látigo
para agarrarla!
(8) Agarrate con el látigo a la hélice
LA GRAN LLAVE
Vuelve a la planta 4 y usa el helicóptero para volver al estrecho
pasillo del oeste. Saca las tres argollas de este pasillo para que
aparezcan salientes en la zona norte de esta planta. Ve hacia la
esquina noreste, y usa el látigo sobre los pinchos que te cortan el
paso para arrancarlos. De saliente en saliente, llegarás hasta la
esquina noroeste, donde tendrás que tomar unas escaleras.
En la planta 5, cruza el abismo al contrario que antes, pero
teniendo cuidado en el último, ya que está más bajo. Aquí debes
dejarte caer un poco y usar el látigo antes de caer al vacío. De
los dos pasillos estrechos, toma el de la derecha hasta el final, y
usa el saliente para llegar al cofre que hay justo al norte. Vuelve
a la esquina noreste y golpea la esfera para regresar a la planta
anterior.
Coloca todas las espadas de las cabezas de la planta 4 tal y como
están distribuidas en la planta 5. En los dos grupos de 5 cabezas
de los pasillos estrechos, colócalas en la tercera y quinta cabeza
empezando por la izquierda. Las de abajo a la izquierda sácalas
todas, y en las de abajo a la derecha deja sólo sin espada a la del
centro. Abre la puerta con cerradura para ir al sur y toma las
escaleras del sureste.
Tira de la argolla para pillar el helicóptero y suéltate cuando
pases por encima de la plataforma. Salta hacia el este y coge la
gran llave. Pisa el interruptor que hay junto a ella y avanza por
el puente hasta la gran cerradura. Para librarte de las manos
gigantes que intentan quitarte la llave, suéltala y golpéales con
la espada. En cuanto tengas una oportunidad, sube las escaleras y
mete la llave en la cerradura.