¿Quién dijo que ser estrella de Hollywood era un camino de rosas? Muchas veces el proceso de grabación puede ser todo un tormento para directores y actores, llegando a sumirse en la desesperación. Estas son algunas películas cuyo rodaje se convirtió en una auténtica pesadilla.
Si bien el mundo de Hollywood es muy atrayente y a muchos les gustaría convertirse en toda unas celebridades del cine, no siempre es un camino de rosas, pues los rodajes tienden a ser bastante duros y requieren estar disponibles prácticamente las 24 horas del día cuando se busca un determinado momento o clima del día para poder rodar la secuencia en cuestión.
A pesar de su dureza, aún te puedes llegar a encontrar con rodajes peores cuyo proceso fue todo un tormento para actores y directores. Para mayor ejemplo Stanley Kubrick y su meticulosidad a la hora de rodar sus películas, llegando a repetir la misma toma un centenar de veces y sumiendo en la locura a sus intérpretes.
Al igual que con el cine de Kubrick hoy, en Hobby Consolas, recopilamos algunas películas cuyo rodaje se convirtió en una auténtica pesadilla.
Apocalypse Now
Una de las grandes películas de Francis Ford Coppola tuvo un proceso de rodaje de lo más apocalíptico. Originalmente Apocalypse Now iba a ser dirigida por George Lucas, pero como el cineasta estaba ocupado con Star Wars, fue Francis Ford Coppola quien tomó las riendas del proyecto. Sin embargo, la cosa se complicó de inmediato para el equipo de rodaje debido a los tifones y enfermedades que asolaron en la región en la que iban a rodar la película.
Para colmo, el reparto de la película tampoco ayudó a que el rodaje de Apocalypse Now fuese sobre ruedas. Marlon Brando llegaba continuamente tarde al set y sin haberse leído el guion, Dennis Hopper estuvo drogado durante el rodaje, Martin Sheen tenía problemas con el alcohol y sufrió un ataque de corazón... ¡Santa paciencia la de Coppola!
Corazones de acero
Dentro de los rodajes de pesadilla de las películas de Hollywood, sin duda Corazones de acero (Fury) se encuentra entre los peores posibles. Su director David Ayer instó a los actores a vivir una auténtica experiencia inmersiva en la Segunda Guerra Mundial, haciéndoles experimentar el auténtico "vínculo" entre los soldados con un brutal entrenamiento de cuatro meses y viviendo juntos dentro del tanque, teniendo que hacer todas sus necesidades básicas en su interior.
A esto hay que añadir la presencia de Shia LaBeouf en la película, uno de esos actores que llevaron sus papeles hasta el extremo. Para hacer aún más verosímil a su personaje, Shia LaBeouf se quitó uno de sus dientes y se cortó la cara, además de estar sin bañarse durante dos semanas antes de comenzar el rodaje, lo que provocó todo un malestar entre Brad Pitt y el resto de sus compañeros de reparto, que tuvieron que aguantar el mal olor del actor durante horas en el estrecho espacio del tanque. Podéis leer aquí nuestra crítica de Corazones de acero.
El faro
Una de las grandes películas de 2019, El faro también tuvo un proceso de rodaje bastante complicado por la metodología de su director Robert Eggers y el clima frío y lluvioso de Nueva Escocia para grabar la película. El propio Robert Pattinson admitió haber estado a punto de golpear al director por hacerle volver a rodar escenas de forma repetida y que apenas hablase con su co-protagonista Willem Dafoe en los descansos del rodaje.
No obstante, Pattinson también es un actor que le gusta dar lo máximo de sí mismo y llevar sus papeles hasta el extremo, haciéndose vomitar, orinarse y comer barro para hacer más veraz el desequilibrio mental del guardián del faro. Os dejamos aquí nuestra crítica de El faro, sin duda una de las mejores películas del cine reciente.
Fitzcarraldo
Escrita y dirigida por Werner Herzog, Fitzcarraldo también contó con uno de los peores rodajes de la historia del cine. La trama principal de la película gira en torno a un barco de vapor de 320 toneladas que es arrastrado sobre una colina, algo que Herzog decidió recrear de verdad sin efectos especiales, lo que, junto a las duras condiciones del clima, provocó múltiples lesiones en buena parte del reparto, entre ellos el actor principal Jason Robards, quien tuvo que ser reemplazado y se volvió a rodar el 40 por ciento de la película.
Para colmo el actor suplente de Robards, Klaus Kinski, tenía bastante temperamento y se enfadaba sobre los detalles más triviales, enfureciendo a todo el mundo hasta tal punto que algunos extras peruanos se ofrecieron con total sinceridad a matar a Kinski en nombre de Herzog, lo que el cineasta rechazó de mala gana porque necesitaba terminar la película (¿Lo habría permitido de haber concluido sus escenas con el actor?).
Estas situaciones se quedarían en meras anécdotas del cine si no fuera porque durante el rodaje varios extras y equipos indígenas sufrieron heridas graves y algunos incluso murieron, lo que hace de Fitzcarraldo una película extremadamente controvertida a nivel ético.
El hombre que mató a Don Quijote
Otra de las películas cuyo rodaje fue todo un infierno es El hombre que mató a Don Quijote, cinta dirigida por Terry Gilliam y que iba a ser protagonizada por Jean Rochefort y Johnny Depp. Desde que Gilliam se interesó por el proyecto, hubo todo un duro proceso de desarrollo que tardó ni más ni menos que 29 años en realizarse.
Finalmente Gilliam comenzó el rodaje de la película en el año 2000, y con ello las calamidades fueron en aumento. En el primer día de grabación, unos aviones de una base cercana de la OTAN dejaron las imágenes inutilizables por el ruido producido y en el segundo día, el granizo y las repentinas inundaciones alteraron irrevocablemente el paisaje y destruyeron el equipo de filmación. Para rematar, Jean Rochefort se vio forzado a abandonar el proyecto debido a una doble hernia discal. Estas y otras calamidades del rodaje se recopilaron en un documental titulado Lost in La Mancha.
Tras todo esto, Gilliam tuvo que reclamar los derechos de las compañías de seguros del rodaje de 2000 y solo los volvió a adquirir en 2005. Mientras intentaba asegurar el financiamiento, actores como Johnny Depp perdieron interés o, como John Hurt, murieron antes de que comenzara de nuevo el rodaje. El cineasta también tuvo que pasar por una prolongada disputa legal con la productora Paula Branco, quien manipuló el presupuesto, hizo demandas creativas abiertas y declaró que ahora era la dueña de la película. Finalmente, Terry Gilliam consiguió lanzar El hombre que mató a Don Quijote en el año 2018, teniendo como protagonistas a Jonathan Pryce y Adam Driver.
Abyss
James Cameron tiene la fama de ser uno de los directores más temibles y exigentes de Hollywood (para muestra todo el tiempo que le está dedicando a Avatar 2). A pesar de ser tan perfeccionista, hasta el propio Cameron admitió no querer volver a pasar nunca por lo que pasó durante el rodaje de Abyss, película protagonizada por Ed Harris y Mary Elizabeth Mastrantonio que el cineasta dirigió en 1989.
Centrándose en un misterioso suceso de aguas profundas, el 40% de la fotografía principal se llevó a cabo bajo el agua en tanques especialmente creados para la ocasión, lo que hizo que los actores se tirasen 70 horas a la semana en escenarios claustrofóbicos en un rodaje que duró seis meses debido a los retrasos en la producción provocados por inundaciones y problemas técnicos. Esto se agravó aún más cuando un rayo dañó la cubierta de lona negra de los tanques, haciendo que la producción tuviera que cambiar a tomas nocturnas frías y oscuras.
Estas duras condiciones de rodaje afectaron muchísimo al equipo y reparto de Abyss. Ed Harris tuvo un colapso por sus escenas, entre las que incluía el tener su casco lleno de agua y fingir que respiraba (en la película ese agua es agua oxigenada "respirable", pero en la realidad era simplemente agua) y Mary Elizabeth Mastrantonio se sometió a una brutal escena de reanimación en la que está empapada, con el torso al aire y siendo golpeada por Ed Harris.
Hasta el propio James Cameron casi se ahogó durante una toma cuando su regulador falló y sus asistente de dirección, sin darse cuenta de ello, mantuvo al cineasta bajo el agua para intentar calmarle. Cameron sobrevivió de ser ahogado dándole un puñetazo a su asistente y nadando lo más deprisa posible a la superficie.
Hasta aquí nuestro repaso a algunas películas cuyo rodaje se convirtió en una auténtica pesadilla. Si quieres conocer más curiosidades cinéfilas, aquí te dejamos algunos trucos de cámara que juegan con tus sensaciones en el cine.
Descubre más sobre José Carlos Pozo, autor/a de este artículo.
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