Que El juego del calamar es una moda no lo niega nadie a estas alturas. Que su éxito en Netflix ha ido más allá de lo imaginable hace poco más de un mes, tampoco.

La llegada "silenciosa" de la serie de temática battle royale coreana al catálogo de Netflix a mediados de septiembre vio el nacimiento de un fenómeno en cuestión de días.

Estamos viendo la influencia de El juego del calamar en redes sociales a diario, pero el impacto cultural está yendo mucho más allá.

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Desde gente preguntando a la policía por los símbolos "sospechosamente parecidos" a los de la serie en señales de tráfico de Reino Unido al dolor de cabeza que supone que algunos niños estén viendo la serie.

El juego del calamar ha cruzado una nueva frontera al irrumpir en el sector funerario a través de los ataúdes que se ven en la serie, aquellos negros con forma de paquete de regalo con lazo rosa.

Según recoge Diario de Sevilla, los féretros de El juego del calamar han llegado a la XVI edición de Funermostra, la Feria Internacional de Productos y Servicios Funerarios de Valencia.

Si bien es cierto que no son los ataúdes más raros que se encuentran en la exposición (por ejemplo hay una réplica del sarcófago de Tutankamon), es llamativo lo poco que han tardado en aparecer los féretros en el sector.

En la serie, cuando los jugadores son "eliminados", ya sea en uno de los juegos o en otro tipo de circunstancia, los guardias aparecen para recoger al fallecido con uno de estos ataúdes.

Teniendo en cuenta lo popular que se volvieron los portadores de ataúdes de Ghana en 2020, está claro que hay cierta tendencia por parte de una parte del sector funerario a diversificar en sus servicios.

¿Os plantearíais ser enterrados en un ataúd como los de El juego del calamar (u otro de temática relacionada con la cultura pop)?