Jean-Claude Van Damme se ganó a pulso su lugar entre los iconos del cine de acción ochentero y noventero con películas icónicas como Soldado universal. Sin embargo, a diferencia de estrellas como Arnold Schwarzenegger o Sylvester Stallone, Van Damme mantuvo un perfil bajo durante años.

El actor tuvo que aprender a reformular su marca y abordar su carrera desde otro ángulo. Una de las fórmulas que más éxito le dieron es la de las historias meta en las que interpreta a una versión ficticia de sí mismo.

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La película JCVD de 2008 y la serie Jean-Claude Van Johnson, de 2016, han visto sendas iteraciones ficticias del actor asumir el rol protagonista.

En la serie, Van Damme interpreta a una versión ficticia de sí mismo que usa su carrera como actor como tapadera para investigar un caso como investigador privado, aunque termina exponiéndose más y más al peligro.

Eso sí, al bueno de Jean-Claude Van Damme le sobrevinieron sospechas de que, en realidad, esas producciones eran intervenciones que sus amigos le estaban realizando.

Jean-Claude Van Damme: todo un personaje

En una entrevista reciente con Comicbook, Peter Atencio, director de Jean-Claude Van Johnson, compartió una hilarante anécdota del que fuera actor de Street Fighter cuando filmaban la serie.

"Un día se me acercó en el set, me agarró por los hombros y me dijo muy serio: 'Peter, sé honesto conmigo: no hay serie, esto es una intervención, ¿verdad?' Y yo estaba como, 'Odio decírtelo, Jean-Claude, pero definitivamente estamos haciendo una serie. Esto no es solo una sesión de terapia para ti.

Vale la pena conocerlo. Está completamente loco y es raro, pero también conoce muy bien este negocio".

Jean-Claude Van Damme ha tenido su resurgir glorioso, como lo han tenido Arnold Schwarzenegger y Sylvester Stallone, demostrando que sigue siendo ese actor que nos fascinó en películas como Soldado universal o movió el esqueleto en Kickboxer.