Hay muchos juegos a los que se ha asociado continuamente con las microtransacciones, como la polémica que hubo con Star Wars Battlefront 2, los sobres de FIFA, o la más reciente, con NBA 2K son ejemplos que siempre se mencionan, pero hay otro juego que está causando controversia, y es en Runescape.
Para aquellos que no lo conozcáis, Runescape es un MMORPG gratuito y según informa el portal Kotaku, un jugador ha gastado 62.000 dólares jugando en un año, alcanzando el límite máximo fijado por la propia compañía que se encarga de su desarrollo, Jagex.
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En una reciente investigación sobre tecnologías adictivas en Reino Unido, se detallaba aún más la monetización que lleva a cabo la propia compañía en el juego. Los jugadores pueden gastar un máximo de 5.000 dólares al mes en el juego, antes de que el límite de la compañía haga que no se puedan comprar más objetos, por lo que este jugador ha estado alcanzando el límite durante todo este último año.
Runescape presenta un sistema llamado Treasure Hunter, que incluye algunos cofres con botín aleatorio, y las llaves que se utilizan para abrir estos cofres, son lo que se puede comprar con dinero real. También se presentan otros sistemas de suscripción tradicionales, como un pase de batalla, u otras mecánicas similares.
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Esta investigación llevada a cabo en Reino Unido ha llevado a la conclusión de que el gobierno inglés debería regular las cajas de botín como juegos de azar, aunque por ahora no hay confirmación de que se vaya a realizar ningún cambio a nivel legislativo.
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