Películas que te hacen sentir simpatía por personas despreciables
Repasamos algunas películas que ya sea por el guion o por la perfecta interpretación de sus actores y actrices hicieron que sintiéramos empatía y compasión por personajes que, en muchos aspectos, no la merecían.
El Séptimo Arte ha conseguido dejarnos a lo largo de su historia películas muy variadas que han mostrado el lado más oscuro del ser humano. Filmes como Joker, que han visto como la sociedad contribuía a crear auténticos monstruos.
Muchas de esas películas, incluyendo la propia Joker, consiguen en ciertos puntos hacer que los espectadores simpaticen con personajes que, en otro contexto, encontraríamos absolutamente despreciables, e incluso que estrictamente hablando SON despreciables, pero son humanizados en pantalla.
Hoy en Hobby Consolas, repasamos 10 películas que consiguieron que el público simpatizase con personajes despreciables.
EL HUNDIMIENTO
A pesar de ser considerada como una película osada que se atrevió a llegar allá donde otros filmes nunca llegaron, El Hundimiento recibió una controvertida acogida por "humanizar" la figura de Adolf Hitler en la gran pantalla.
Algunos periódicos germanos llegaron a plantearse si era correcto realizar esa aproximación a la figura de Hitler, obviando el hecho de que, al igual que otros personajes de nuestra lista, Hitler era un humano con un desmesurado carisma con el que convenció a toda una nación.
BLADE RUNNER
Cuando pensamos en el personaje de Roy de Blade Runner, es difícil, por no decir imposible, no evocar el legendario discurso de las "lágrimas en la lluvia" con el que el personaje fallece al final de la película, tras salvar la vida a Deckard. Tan solo en ese instante, cuando ve su vida llegando a su fin, es capaz de mostrar empatía y salvar al personaje de Harrison Ford.
Es habitual que en ese instante, muchos olviden el sadismo del personaje a lo largo de la película, donde se dedicó a matar indiscriminadamente a sus prisioneros sin mostrar un ápice de arrepentimiento. Lo habían creado para ser así, cierto, pero eso no evita que sea una de las personas despreciables de nuestra lista (aunque nos encante).
ESCONDIDOS EN BRUJAS
Con un tono de comedia que nos saca descaradamente de lo que estamos viendo en nuestra lista, encontramos el filme Escondidos en Brujas, protagonizado por Colin Farrell y Brendan Gleeson.
Dos letales sicarios se van de vacaciones a Brujas, donde uno de ellos se fustiga por un error cometido en su último trabajo, donde mató a un niño. La metapregunta de toda esta historia sería "¿Por qué empatizamos con dos personas que matan a cambio de dinero?", ni siquiera son psicópatas que no se puedan controlar. La redención final nos hace empatizar todavía más con ellos, lo que no quita que llevasen una vida donde el dinero se intercambiaba por sangre con frecuencia. A fin de cuentas... solo son negocios.
HARD CANDY
Hard Candy, la película protagonizada por Elliot Page y Patrick Wilson, es un filme que consiguió que algunos espectadores llegasen a sentir lástima por el tormento que Jeff estaba sufriendo a manos de Hayley, quien iba a ser su víctima.
Naturalmente, no podemos obviar el hecho de que Jeff es un pedófilo, violador y asesino, por mucho que la película nos haga sentir mal por lo que estamos viendo, otra parte de nosotros también nos dice que "poco es".
PENA DE MUERTE
Susan Sarandon y Sean Penn consiguieron que, en la película de Pena de Muerte, empatizásemos sin remedio con el personaje de Matthew Poncelet, quien no asumía durante casi toda la película su culpabilidad y se mostró racista, sexista y desagradable en casi todos sus encuentros con la hermana Helen Prejean.
Pero al final se derrumba, y es en ese instante donde una parte de nosotros, una pequeña parte, esperaría que fuese indultado y siente en sus propias carnes cómo la solución de la inyección letal penetra en su cuerpo.
AMERICAN HISTORY X
American History X es un filme que juega con los sentimientos de los espectadores a niveles muy bizarros. La película presenta a Dereck (Edward Norton) como un consumado neonazi, violento y carente de empatía con cualquiera que no comulgue con sus ideas y que no tenga el color de piel "correcto".
Tras su paso por la cárcel y aprender una salvaje lección, su personaje inicia su redención, aunque los palos que le iban a venir eran tremendamente duros. La película juega con nosotros al explicar qué motivos llevaron a Dereck a convertirse en ese neonazi despreciable, haciendo que, en cierto modo, empaticemos con él.
MONSTER
La representación de Aileen Wuornos en Monster le valió el Oscar a Charlize Theron. El hecho de que muchos espectadores encontrasen en parte que sus crímenes estaban justificados tiene parte de la "culpa" de ese premio.
La película nos muestra el lado humano de Aileen Wuornos antes de iniciar su serie de asesinatos, cuando encuentra el amor. Incluso se encuentra cierta justificación en el primer crimen, cuando se defiende de una agresión, pero luego la cosa se desmadra.
HAPPINESS
Haciendo un magistral uso del humor negro y del género de la comedia dramática, Todd Solondz nos presenta otra historia centrada en un pedófilo, pero siempre orbitando en el "lado humano" del personaje, destacando el inherente patetismo de su comportamiento.
Happiness consigue que, en cierto modo, el espectador empatice con los sentimientos de Bill, ojo, empatizar, no compartir. La película explora muchos aspectos de lo que implica ser humano en una sociedad como la nuestra, con sus muchas cosas malas.
LA NARANJA MECÁNICA
Stanley Kubrick maravilló a algunos (y horrorizó a otros) con su magistral adaptación de La Naranja Mecánica, la novela de Anthony Burgess. Narrada desde la perspectiva de Alex, el filme busca en todo momento que empaticemos con el personaje, incluso en los momentos en que perpetra las mayores atrocidades.
Pero es realmente cuando pasa por rehabilitación y recibe la violenta venganza de sus víctimas cuando La Naranja Mecánica alcanza ese punto en que nos sentimos mal por el protagonista.
4 LIONS
El director Chris Morris se superó con su película de 4 Lions, una comedia satírica con grandes dosis de humor negro con ese ácido toque británico donde un grupo de terroristas yihadistas son los personajes principales de la película.
Más allá de los toques de comedia, el filme nos hace empatizar con el personaje de Omar, Riz Ahmed, cuando se despide de su hijo el día antes del atentado que quieren perpetrar. Como nota adicional, destacar que Morris lanzó la película tan solo tres años después de los atentados del metro de Londres.
Con esto finalizamos nuestro repaso a películas que nos hicieron simpatizar con personajes completamente despreciables. ¿Recordáis más de este estilo? Contadnos cuáles en la sección de comentarios.
Descubre más sobre Javier Cazallas, autor/a de este artículo.
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