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La evolución de los mundos abiertos en 2022

Elden Ring

2022 será un gran año para los juegos de mundo abierto. Con el lanzamiento de títulos  como Elden Ring, Horizon II Forbidden West o Dying Light 2, el género del "sandbox" promete evolucionar.

Hace 20 años, GTA III revolucionó los videojuegos con su planteamiento de un mundo abierto en 3D, en que podíamos movernos con libertad y cumplir decenas de misiones. Podéis ver todo lo que significó este lanzamiento en nuestro reportaje sobre el juego que cambió el mundo

Las mecánicas de mundo abierto se extendieron como la pólvora (es imposible señalar todos los ejemplos que imitaron la fórmula GTA) y se han ido refinando con el paso del tiempo. A día de hoy, quizá los mejores exponentes de esta evolución sean The Legend of Zelda Breath of the Wild y Red Dead Redemption II.

El juego de Nintendo apuesta por un desarrollo orgánico, en que las misiones "salen al paso" a medida que exploramos libremente. De hecho, los primeros compases, en que Link se encuentra sólo frente a la gran llanura de Hyrule son todavía un ejemplo de diseño brillante.

Por su parte RDR 2 optaba por una narrativa más tradicional, pero en las partes de mundo abierto las actividades surgían naturalmente. Podíamos ver cómo el entorno, los animales y los personajes interactuaban entre sí y generaban situaciones interesantes simplemente observando. 

Y a estos dos ejemplos magistrales, hay que añadir las aportaciones de la "fórmula Ubisoft" con centenares de actividades que aparecen en el mapa (el modelo de Assassin´s Creed o Far Cry 6), la narrativa emergente de los "battle royale" como Fortnite y la creación de contenido de los usuarios en el omnipresente Minecraft.

Sin embargo, el género necesita una revolución. ¿Llegará con alguno de los juegos anunciados en 2022? En cuestión de semanas podremos comprobar cómo se ha adaptado el estilo "sandbox" a sagas legendarias.

Leyendas Pokémon Arceus, que se lanza el 28 de enero, tratará de revolucionar la fórmula de atrapar, evolucionar y competir con estas criaturas en un un mundo abierto. En este caso se trata de la región de Hisui (una versión antigua de Sinnoh que toma elementos de Japón durante la restauración Meiji). 

Elden Ring, por su parte, recupera los elementos de los "souls" y de Sekiro Shadows Die Twice, con un entorno que se presta más a la exploración libre. 

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El título de FromSoftware, que ganó el premio a juego más esperado de 2022 en The Game Awards, es una evolución de una de las fórmulas más influyentes de la pasada generación. 

A estos dos juegos hay que añadir Dying Light 2, que se lanza el 2 de febrero. En este caso, su apuesta por un mundo abierto plagado de infectados, se caracteriza por las opciones de navegación (con movimientos de parkour), el combate cuerpo a cuerpo y las decisiones que cambian tanto la historia como el entorno. 

Y por último, Horizon II Forbidden West, que expande los elementos de Zero Dawn, con mayor profundidad en el combate, nuevos entornos y opciones de navegación (con las novedades de un garfio y una especie de parapente en el inventario de Aloy). 

Cada uno de estos cuatro títulos apuesta por un modo de cambiar la fórmula. Pero 2022 también promete exponentes más clásicos del género, como GTA V para las consolas de nueva generación o Saints Row (el "reboot" de la saga que se ha retrasado hasta el próximo 23 de agosto).

También será el año en que Kirby dé el salto a las 3D en un entorno abierto, con Kirby y la Tierra Olvidada para Nintendo Switch, y podamos disfrutar de Sonic Rangers, con elementos de "sandbox". 

Sin embargo -no olvidéis que esto es un artículo de opinión al fin y al cabo- si tengo que apostar por un juego de mundo abierto que pueda revolucionar el género, me quedo con Starfield. 

El hecho de que Bethesda haya estado cocinando esta nueva IP durante tanto tiempo (se presentó en el E3 2019) que lo comparen -nada menos- con un Skyrim en el espacio, y que apueste por la exploración en diferentes planetas, algo que ya disfruté especialmente en The Outer Worlds, son sus principales bazas. 

Y claro, no podemos descartar que finalmente llegue la secuela de Zelda Breath of The Wild a lo largo del año, y vuelva a marcar un camino a seguir dentro del género. Desde luego se presentan unos meses apasionantes para cualquier aficionado al "sandbox". 

 

 

 

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