Si sois lectores asiduos de nuestra sección de cómic, recordaréis que os contamos hace un tiempo que Batman Arkham Knight iba a tener un cómic precuela basado en el villano titular de este último capítulo del Batman Arkham de Rocksteady. Esto es: Batman Arkham Knight: Génesis.
Este cómic, como os decimos, no debe confundirse con el cómic de Batman Arkham Knight, cuyo segundo volumen ya se encuentra en el catálogo de ECC y cuya historia sirve de tie-in o puente entre Arkham City y Arkham Knight. De hecho, antes de seguir, nos vemos obligados a avisaros de que esta reseña tiene SPOILERS en lo tocante a la trama del videojuego. Por eso mismo, si no os habéis pasado aún Batman Arkham Knight o estáis en proceso de hacerlo, os recomendamos que no sigáis leyendo.
¿Los motivos? ¡Jolines, parece evidente! Como os hemos dicho antes, Batman Arkham Knight Génesis se centra en la figura del Arkham Knight y, como su nombre indica, en su génesis. De ahí que ya en la séptima página el personaje se desenmascare para narrarnos su origen. A partir de la siguiente portada ya no nos andaremos con pelos en la lengua. Avisados quedáis.
El origen de...
...de Jason Todd, hombre, de Jason Todd! Como ya sabéis, Peter J. Tomasi (autor del cómic de Batman Arkham Knight y uno de los principales guionistas del videojuego) firma esta precuela que pretende dar profundidad al origen de Jason Todd, explicando su tortuoso camino desde sus orígenes como pillo callejero, pasando por su etapa como Robin y su linchamiento a manos del Joker y terminando en su conversión en el Arkham Knight. Aunque el número de cómic que nos ocupa, únicamente detalla su conversión de criminal adolescente en Robin.
En este aspecto, de lo poco que hemos podido leer del primer número de esta colección, hemos de decir que Tomasi es innovador sobre material original. El autor desarrolla su propia génesis de Jason Todd, debido a que Batman Arkham es un universo contenido dentro del multiverso de DC Comics (que este Batman no es el mismo que el de otros cómics ni el de otras películas, sino que vive en su propia realidad independiente) y que por lo tanto cuenta con sus propias reglas, tono y continuidad.
Mucho menos agradable que la génesis clásica ni su retcons modernos, la historia de Arkham Knight es mucho más cruenta, ajustándose a la atmósfera de los juegos Batman Arkham, revelando unos comienzos más difíciles para el personaje. Esto implica que este Jason Todd se aleja unos pasos de su homólogo "oficial", con un pasado ligeramente más siniestro y cuestionable. Y es que aunque el Jason Todd "original" no es ningún santo, el de esta colección ya desde su principios coqueteaba más abiertamente con los elementos oscuros de su personalidad. Da la impresión de que el guionista es consciente de que necesita crear un Todd de Arkham... ¡y vaya si lo crea! No se corta ni un pelo para hacer una versión creíble del personaje.
En tanto, la ilustración corre de manos del brasileño Alisson Borges (al que recordaremos por haber trabajado en algunos números del cómic del nuevo Lobo del Nuevo Universo DC). Su trabajo, únicamente, diremos que es correcto. Cumple el papel que se le ha encomendado, sin demasiada brillantez, pero tampoco de manera torcitera. Su estilo, en ocasiones, recuerda al de Greg Capullo (salvando las diferencias) al generar una atmósfera similar a la de los cómics de la etapa Snyder/Capullo. Aunque, como decimos, sin el mismo nivel de calidad.
Las composiciones páginas y viñetas son correctas y la anatomía está bien realizada. Quizá, únicamente, falle en lo tocante a los retratos, cuyas expresividades quedan algo limitadas. Esto, no obstante, habría de compararse sobre los originales, sin el color de Dave McCaig. Solo así sabríamos si este fallo se le debe al dibujante o al entintador.
En conjunto, ya finalizando, podemos decir que Batman Arkham Knight: Génesis no es uno de los mejores cómics de Batman, sí os podemos decir que es una serie que os va a encantar si sois fans del videojuego o sencillamente batmaniacos que disfrutáis con cualquier versión de Batman del multiverso DC. Por cierto, que este primer número está a un precio de risa: 1 euro.
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