Probamos el Black Shark 2 ¿el móvil gaming más rápido del mundo?

Hemos asistido al lanzamiento del Black Shark 2 en Pekín, un nuevo smartphone con una apuesta muy clara: el segmento gaming. Y lo hace apostando por esa idea en todos los frentes, tanto en estética como en el manejo (gracias a que puede incorporar controles físicos) o el rendimiento.

Un terminal diseñado para competir con otros smartphones que también apuntan al gaming, como el ASUS ROG Phone, el Mate 20X de Huawei o bien el RazerPhone 2. Tras nuestra primera toma de contacto,  primeras pruebas está por encima de ellos en términos de rendimiento gracias al Snapdragon 855 y su sistema de refrigeración líquida.

Este nuevo Black Shark 2 es, a todas luces, una apuesta realmente valiente por parte de la compañía y ofrece lo que cualquier jugador podría esperar de un smartphone que va a utilizar para gaming: el mejor rendimiento del mercado, acompañado de una estética tan agresiva como llamativa y repleta de detalles (como las luces RGB personalizables).

Ahora bien, ¿está este Black Shark 2 a la altura de otros terminales punteros del mercado? ¿Qué tal es su pantalla? Y, ¿cómo rinde en el resto de apartados? Vamos a verlo... aunque como anticipo, estas son sus características generales:

Corazón "gaming", con los jugadores en el centro de la experiencia

La compañía ha culminado un diseño para no pasar desapercibido, que frente a otros smartphones no gaming puede resultar "cantoso" para unos, y precioso para otros. Es un terminal que atrae las miradas. La parte frontal tiene un diseño "pantalla infinita", sin notch y con unos marcos inferior y superior "notables" para lo que suelen ser los diseños "todopantalla" más actuales.

La parte trasera tiene ese enfoque gaming con el logo iluminado así como dos barras laterales también personalizables con colores RGB. Es un diseño en unibody metálico con una parte trasera en brillo encastrada mientras que la mayoría del cuerpo es de aluminio anodizado con acabado mate, algo que ayuda a la disipación del calor.

Eso sí, debes tener en cuenta un detalle: se trata de un móvil grande, con más de 16 centímetros de alto y que supera los 200 gramos. Algo que se compensa con su impresionante pantalla con panel AMOLED de 6,39 pulgadas en formato 19,5.9 y con soporte HDR. En nuestro primer contacto con el terminal parece una pantalla de calidad con un buen nivel de brillo y ángulos de visión.

A diferencia de otros fabricantes y modelos, el panel tiene una frecuencia de refresco de 60 Hz y en lugar de trabajar en esta línea, la compañía ha trabajado en la frecuencia de refresco del panel táctil llegando hasta los 240Hz, es decir, tarda menos tiempo en detectar una pulsación, 43,5 ms.

Puede parecer un detalle más, pero a nivel "gaming" es importante: esas milésimas de segundo que se ganan pueden resultar cruciales en las partidas competitivas. Tenemos que probar más a fondo la pantalla, para poder compararla con la de otros terminales, como los mencionados ASUS ROG Phone o el RazerPhone 2 (y su refresco de pantallaña de 120 Hz)

Además cuenta con una batería de 4.000 mAh con carga rápida que promete media hora de juego con una carga de solo 5 minutos. Entre el resto de especificaciones también destaca el lector de huellas dactilares en pantalla que en estos primeros usos nos ha dado la impresión de ser bastante preciso, más que lo que hemos visto en otros terminales hasta la fecha.

Gran rendimiento con Snapdragon 855 (y refrigeración líquida)

El Black Shark 2 hace gala del último system on a chip (o SoC) de Qualcomm y en teoría debería convertirse en uno de los teléfonos Android más rápidos del mercado. Con una configuración de 6 GB, 8 GB o bien 12 GB de RAM es un dispositivo pensado para usar aplicaciones muy pesadas y multitarea a un alto nivel. En la primera toma de contacto con él nos hemos encontrado con una fluidez constante e incluso con un rendimiento destacado en juegos como Arena of Valor.

Los 20 mejores juegos de Android

Está claro que la compañía ha apostado por tener un procesador del momento, pero lo que destaca frente al resto es un sistema de refrigeración líquida personalizado. Tiene una cámara de vapor, como Xbox One X, en contacto directo con los principales componentes del smartphone para evacuar el calor que generan. Esto unido a una placa para repartir el calor por el resto del terminal y un heatpipe que llega hasta la zona de los controladores de carga completan el sistema.

En principio no hemos visto evidencias de ningún tipo de overclock frente a las frecuencias por defecto del Snapdragon 855 de Qualcomm pero sí que tiene un modo, Ludricrous Mode, que se activa mediante un botón interruptor en el lateral derecho que permitirá al móvil centrar todo su potencial en los juegos que lances desde él. Según Gameloft, consigue un mayor rendimiento y tasas de fps con este modo.

Software limpio, pero distinto en China y resto del mundo

Las unidades disponibles en la presentación tenían software chino, con aplicaciones propias del país así como una tienda de aplicaciones. No había rastro de los servicios de Google. Sin embargo la versión que hemos recibido para testear sí que trae preinstalados los servicios.

Es una versión muy limpia del software, Android 9, que recuerda en gran medida al Pixel Launcher, muy limpio y, al menos en la versión de software que estamos probando ahora mismo, con prácticamente nada de bloatware.

Es importante hacer notar que la funda está preparada para poder montar unos mandos que trabajan de manera similar a los Joy-Con de Nintendo Switch y permiten dotar al smartphone de controles físicos para poder ser usados en juegos. Es uno de los principales atractivos y puntos fuertes frente a otras alternativas gaming del mercado sin duda. Además, ofrece una solución intermedia, que nos ha recordado también al mando de Steam (uno de los dos "sticks" es es realidad una zona táctil). 

Otra de las funcionalidades del terminal es Magic Finger, que puedes personalizar dos pulsaciones concretas de la pantalla dejando pulsado un dedo bien en la zona derecha de la pantalla o de la izquierda y entonces se pulsaría la zona concreta de la pantalla que hayamos decidido, perfecto como acceso directo a botones en pantalla.

En términos de sonido la compañía ha decidido eliminar el conector minijack aunque ofrece ese adaptador desde USB-C que otras compañías cobran aparte. Es cierto que monta un sistema de sonido con doble altavoz frontal que suena muy bien, a la altura del RazerPhone 2, potente y estéreo.

Un móvil puramente gaming... no para todos

En la presentación no comentaron absolutamente nada del apartado de las cámaras y ello deja entrever que la compañía está centrada en el rendimiento gaming de estos dispositivos. Sin embargo, para la gran mayoría de usuarios la cámara tiene un peso importante en la decisión de compra.

Las cámaras pasan a tener una disposición vertical en el lateral izquierdo y bajo ellas el flash LED. No hemos podido probarlas mucho pero sí que podemos comentar que el software es el nativo de móviles actuales de Xiaomi como por ejemplo el Xiaomi Mi 9.

La configuración de cámara sobre el papel parece respetable con un sensor principal de 12 Mpx f/1.75 y un sensor secundario telefoto de 12 Mpx f/2.2 y la cámara frontal 20 Mpx. No parece ofrecer mal resultado como sí que vivimos por ejemplo con el primer RazerPhone. Pero aun es pronto para poder decir algo definitivo en este sentido.

En resumidas cuentas, el Black Shark 2 llega al mercado chino a un precio al cambio de 420 euros el modelo de 6 GB y 128 GB de almacenamiento mientras que el de 8 GB y 256 GB llegará a un precio de alrededor de 500 euros y el tope de gama, 12 GB + 256 GB de 550 euros. Como vemos, unos precios que si se mantienen al llegar al mercado europeo, es más que probable que le garanticen unas más que buenas ventas.

Artículo original publicado en ComputerHoy