El próximo 5 de marzo se estrena Raya y el último dragón, la nueva película de Walt Disney Animation Studios, a las salas de cine y también a Disney+ dentro del servicio Premium, siendo la segunda película de animación de marca Disney que llega a la plataforma de streaming después de Soul.
Raya y el último dragón nos introduce al mundo de Kumandra, donde la joven guerrera Raya se lanza a la búsqueda del último dragón del mundo para poder restaurar la paz en su tierra, con una aventura fuertemente inspirada por la cultura y los mitos del sudeste asiático.
Desde Hobby Consolas hemos podido hablar con los directores Don Hall y Carlos López Estrada, los guionistas Qui Nguyen y Adele Lim y la productora Osnat Shurer, quienes nos han contado un poco más de cómo fue el proceso de creación de esta película de animación.
Antes de nada, os quería preguntar por Kumandra, porque es un mundo muy creativo y llamativo... ¿Cómo fue el proceso de crearlo y su historia?
Carlos López Estrada: Fue un proceso de unos cinco largos años de duración. Llevó mucho tiempo y mucha investigación. El principio fue incluso antes de que Don [Hall], Qui [Nguyen] y yo nos uniéramos al proyecto, pero la semilla era crear un mundo de fantasía inspirado por el sudeste asiático, esa fue la génesis del proyecto. De ahí se hicieron varios viajes de investigación, donde los artistas fueron a las regiones y varios grupos de expertos nos ayudaron a diseñar todo, la arquitectura y los detalles.
Los artistas de Disney Animation trabajaron durante meses y meses haciendo diseños e innovaciones y diferentes aspectos y texturas, y entonces tendríamos conversaciones con ellos junto a los realizadores y los expertos... Es un trabajo muy, muy hermoso y colaborativo. Nosotros solo vimos el último año y medio de trabajo, pero todo lo que habían estado haciendo culminó en ese punto después de años de investigación y trabajo.
Carlos y Qui, vosotros que venís principalmente de trabajar en acción real, ¿cómo ha sido el cambio de pasar a trabajar en animación? ¿Qué es diferente a la hora de hacer una película?
CLE: Para mí, muchos de los conceptos también se pueden trasladar a animación... En la actuación o la construcción de la historia, el concepto es el mismo. La animación solo es un proceso, una herramienta. Y Don fue la conexión entre ambos mundos, porque él lleva mucho tiempo haciendo esto y entiende nuestro mundo muy bien, así que fue importantísimo a la hora de ayudarnos a meter el pie en el mundo de la animación.
Qui Nguyen: Para mí, la gran diferencia entre escribir para animación o para una película al uso en acción real o una serie es que estás mucho más involucrado en todo el proceso. No es como escribimos tradicionalmente, que haces un guión y le das dos vueltas y se rueda. Aquí, estoy escribiendo y reescribiendo la película prácticamente cada semana y cada día, desde el primer día hasta el último.
Es el proceso más colaborativo en el que he estado, consultando todo profundamente con Don, Carlos, los actores, y los otros escritores. Se crea esta atmósfera de familia, que a mí me encanta.
Habéis mencionado las innovaciones... ¿Para esta película se ha desarrollado algún tipo de innovación técnica a la hora de animar, como el pelo de Rapunzel o la nieve de Frozen?
Don Hall: Bueno, sin duda nos beneficiamos de la tecnología de la nieve de Frozen (se ríe), así que estamos muy agradecidos de todo este trabajo técnico que hay detrás. Nosotros queríamos conseguir un aspecto hiper realista, similar a acción real, así que nos centramos mucho en la luz natural. Los departamentos de efectos especiales e iluminación trabajaron mucho juntos, aplicando filtros de luz y polvo a toda la película, lo que consiguió crear una atmósfera muy guay para toda ella, especialmente al final.
Los Druun también supusieron mucho trabajo de luz y animación, así que tocábamos muchos departamentos a la vez. Con la luz también tratamos de trabajar el granulado. Si veis, la película tiene ese tipo de textura similar a la de una película de acción real. Queríamos poder llevar la luz un paso más allá.
También os quería preguntar sobre los personajes femeninos, porque tenemos muchos en la película y son muy importantes para el desarrollo de la trama. ¿Esto fue algo que se decidió desde el principio o surgió durante el desarrollo?
Osnat Shurer: Mucho de ello estaba ahí desde el principio. Sabíamos que queríamos que el personaje en el que se convirtió Raya fuera una guerrera fuerte, y teníamos estas tierras separadas alrededor del río que no se llevaban bien... Y el dragón, es un dragón asiático que simboliza agua, vida y armonía, y muy al principio era masculino, pero también muy al principio tomamos la decisión de que fuera femenino. Su relación de Raya y Sisu es clave en la película y queríamos explorar esa relación de mujeres que no vemos tantas veces.
Namaari fue creciendo también hacia ser un personaje más complejo, más interesante. Esos tres personajes son el centro. Las tres relaciones entre tres personajes femeninos fueron creciendo de manera un poco más orgánica y nos gusta muchísimo.
Adele Lim: Y creo que, de hecho, el personaje de Namaari al principio empezó siendo una villana clásica, pero al explorarla más y dándole más vueltas también conseguimos explorar un lado de las relaciones femeninas. Namaari se convirtió en alguien con quien Raya tenía una historia, y al crecer se convierten en enemigas, pero también tienen una fascinación la una con la otra. Así que tener estas tres relaciones como el centro de la película, como escritora y mujer cineasta, creo que es algo que no hemos visto en muchas películas así de grandes y teníamos muchas ganas de verlo en pantalla.
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DescúbrelasCon toda la investigación que se hizo para Raya y el último dragón, viajando a varios países y todo... ¿Cuál fue vuestra parte favorita de todo este proceso de documentación?
OS: ¿Sólo una? (se ríe). [...] La comida, que es una de las mejores cosas del mundo y que también quisimos introducir en la película. Para narrar el viaje de Raya a aprender a confiar, lo hicimos con la comida, el reunirse alrededor de la comida y compartirla. Sin duda eso, y el calor y el sentido de la comunidad, que a pesar de las diferencias vamos a trabajar juntos para lograr un bien común, es algo cultural que hemos tratado de plasmar también en la película.
AL: Habiendo crecido en el sudeste asiático, tengo que decir que lo mejor para mi fue traer a todos los expertos y asesores culturales porque había tantísimo que yo no sabía de la región donde había crecido, porque hay tantas regiones y culturas diferentes, pero con detalles que las unen y se repiten en todas ellas. Ya sea el ritual de purificación de agua, o el respeto a los mayores... incluso el nombre Raya, que significa algo en diferentes idiomas. Así pues, poder descubrir todos estos hilos que unen estos países y culturas, espero que sea algo que también se pueda sentir en nuestra película.
Disney
¿Cuánto tiempo lleva hacer una película como Raya y el último dragón... y cuánta gente estuvo involucrada en el proceso de producción?
OS: Yo he estado cuatro años en la producción, y el tiempo medio de producción de una película así está entre cuatro y cinco años. Al principio somos un grupo muy pequeño: directores, algunos guionistas, producción, directores de arte y diseño para algunos visuales. Y nos pasamos mucho tiempo investigando, haciendo versiones de los personajes, diseñándoles... El proceso más largo es el de diseño de todos estos elementos, que pueden ser varios años, y después ya vendría el "rodaje", que lleva algo menos de un año e incluye la animación, layout e iluminación.
En lo más alto del proceso, en la película llegamos a trabajar 460 personas, que trabajaron en su casa desde el año pasado, así que esta película la hemos producido desde nuestras propias casas. El marzo pasado nos dijeron que teníamos que irnos a casa y pensábamos que iban a ser una o dos semanas... pero ha pasado un año y la hemos hecho desde casa, lo que es muy interesante desde un punto de vista social y todo eso... Pero hicimos la película, y ha significado mucha confianza y transparencia y comunicación y estoy tan orgullosa de todo el equipo.
Puedes leer aquí nuestra crítica de Raya y el último dragón que, como os comentábamos, estará disponible el 5 de marzo en cines y Disney+.
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