Ahora que se acerca un cambio de generación de consolas con PS5 y Xbox Series X, todos pensamos en si sus sistemas de retrocompatibilidad mejorarán mucho los gráficos de los juegos antiguos. Pero amigos, existe otra fórmula para que, con prácticamente cualquier consola, consigamos un chute en materia gráfica para los videojuegos. Hoy vamos a hablaros de mClassic, la apuesta de la compañía Marseille (creadores del mCable) para que tengamos una especie de "tarjeta gráfica externa" en nuestras consolas, con las que mejorar su rendimiento visual por defecto.
Como os contamos en el vídeo que tenéis justo arriba, mClassic sirve para prácticamente cualquier consola, siempre que consigamos sacar la señal por HDMI y, gracias a ello, podemos escalar la imagen por encima del 1080p, en el caso de que tengamos un monitor compatible. Si no, podemos usar mClassic para mostrar en 1080p nuestras consolas en cualquier tele Full HD y, de propina, añade antialiasing y una mayor nitidez en la imagen.
Aunque mClassic es una idea interesante para, por ejemplo, aumentar la resolución en juegos de Switch que se queden por debajo del 1080p, donde hemos notado un mejor rendimiento es en la generación de PlayStation 2, Xbox y GameCube, con cuyos juegos la imagen si experimenta una mejora notoria.
Es posible encontrar mClassic (tal y como lo llaman ellos, el primer procesador gráfico plug and play) por un precio que oscila entre los 90 y 100 euros y, aunque no proporciona unos cambios increíbles, sí puede ayudar a disfrutar más de consolas con algunos añitos a las espaldas en teles más recientes. ¡Ahí os dejamos la idea, por si os convence!
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