Bad Dudes vs Dragon Ninja, el clásico de Data East, llega a Nintendo Switch, PS4, Xbox One y Steam justo en el año en que se celebra su trigésimo aniversario. Un inolvidable clásico de los salones recreativos que ahora salta a las consolas actuales conservando intacta su jugabilidad y sus opciones.

Este nuevo lanzamiento forma parte de Johnny's Turbo Arcade, la línea de clásicos recreativos de Flying Tiger Entertainment, que debutó en Switch con Gate of Doom, otro clásico de Data East que también ha llegado ya a la consola híbrida de Nintendo, entre otras plataformas.

Como muchos clásicos de los años 80, Bad Dudes vs Dragonninja nos plantea una historia surrealista: Ronnie, el presidente de los Estados Unidos (en clara alusión a Ronald Reagan), ha sido secuestrado por el malvado clan DragonNinja. Los servicios secretos contactan con Blade y Striker, dos luchadores callejeros, para que lo rescaten (para qué llamar al ejército o los agentes especiales, ¿verdad?).

Así, a lo largo de siete niveles nos enfrentamos a las huestes del clan DragonNinja, compuesto por incansables ninjas de todos los colores y tamaños y perros, que nos atacan por grupos y oleadas prácticamente sin descanso y desde todas las direcciones posibles.

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Para afrontar este imparable goteo de enemigos, la jugabildad siempre se mantiene sencilla, y con tan solo dos botones (uno de salto y otro de ataque) realizamos todas las acciones, desde barridos para eliminar los makibishi (o pinchos que se arrojan al suelo) a ataques cargados -presionando el botón que de ataque un par de segundos- o patadas giratorias, que requieren un "timing" preciso.

Estos siete niveles nos llevan por variadas localizaciones, desde las calles de una ciudad a las alcantarillas, un camión y tren en marcha o un bosque. Al final de todos ellos nos espera el jefe final, un enemigo más duro y que, por regla general, suele usar un arma o habilidad especial: unas garras a lo Freddy Krueger, un bastón de madera, un chigriki (una especie de hoz con un peso arrojadizo)...

Descubrir sus patrones de ataque y explotar sus puntos débiles era todo un arte de la recreativa (sobre todo para no arruinarnos echando monedas de cinco duros), pero aquí, con créditos infinitos, no supone ningún problema y permite jugar de forma mucho más despreocupada.

En este sentido, el de los jefes finales, tiene un detalle un poco cutre  y es que, como otras muchas recreativas de la época, el último nivel es un pequeño "boss rush", en el que salen versiones con menos vitalidad de todos y cada uno de los jefes. Incluso con esto, es posible despachar el juego en menos de 40 minutos... una duración breve, pero lógica atendiendo a sus orígenes arcade.

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Como otros juegos del género, Bad Dudes vs Dragon Ninja es un clásico beat'em up 2D con scroll lateral, que toma ideas de otros clásicos como Rolling Thunder o Shinobi, en el sentido de que todos los niveles tienen dos planos de altura, entre los que podemos movernos para avanzar y en los que también hay trampas, como fosos de pinchos, que debemos sortear.

La verdadera gracia del juego reside en que podemos disfrutar del juego entero con un amigo, algo que en Nintendo Switch resulta aún más natural y sencillo al ser posible compartir los Joy-Con y que cada uno juegue con un "minimando" (como hemos dicho, cada jugador sólo utiliza dos botones del mando, el stick y ZL y ZR para insertar créditos y pulsar Start). 

Eso sí, al igual que en Gate of Doom, nos hubiera encantado que para el análisis de Bad Dudes vs Dragon Ninja hubiera incluido más opciones de configuración (están los mismos filtros, que emulan las scanlines de los monitores antiguos, color RGB, VHS...) o incluso algún tipo de material gráfico adicional, como por ejemplo, marcos de pantalla mientras jugamos con el aspect ratio original (4:3).

Puestos a pedir, tampoco hubiera estado mal haber incluido poder haber configurado los "dipswitches" de la recreativa, para ajustar la dificultad, las vidas por crédito u otros valores. De nota hubiera sido ya incluir también las distintas versiones del juego (japonesa, por ejemplo), ya que como curiosidad, hay voces, sonidos y gráficos distintos, incluida la secuencia final de los créditos.

Pero por 7,99 euros tampoco le podemos pedir más. Sigue siendo un clásico que, aunque superado por otros beat'em up posteriores, sigue divirtiendo a lo grande, como en los años 80 y 90. Un lanzamiento que en Switch está claramente orientado a quienes lo jugaron y disfrutaron en su día, o quieren revisitarlo acompañados de sus hijos, hermanos o familiares pequeños.

Y, tranquilo, que si no te convence, en la eShop encontrarás muchos más títulos por menos de 10 euros en Nintendo Switch, aunque pocos con el encanto de las viejas máquinas recreativas de los años 80 y 90 (entre las que se encuentran algunos de títulos de la serie ACA, como ACA King of Fighters '94 o ACA Metal Slug 3, entre otros).