Análisis de El fin de Zoe, DLC para Resident Evil 7

Los Baker vuelven a casa por Navidad. Una de las familias más perturbadoras de los últimos años regresa con una expansión de su historia, a modo de DLC, llamada El fin de Zoe, protagonizada por la más pequeña de la familia. Desde hoy mismo, todos aquellos que ya hayáis disfrutado de Resident Evil 7: Biohazard, la nueva entrega de la prolífica franquicia de Capcom que supuso un punto de inflexión en la saga tras su lanzamiento el pasado mes de enero, podréis conocer el destino que le aguarda a Zoe. ¿Creíais que todo había terminado? 

Tras una larga espera, ya están disponibles los dos últimos contenidos descargables de Resident Evil 7: No soy un héroe y El fin de Zoe. Mientras que el primero nos permite conocer la misión de Chris Redfield y su escuadrón de Umbrella Corporation al fin, pues, recordemos que debería haber sido lanzado durante la pasada primavera; el segundo nos pone en la piel de Zoe, la hija menor de Jack y Marguerite Baker, y hermana de Lucas Baker, para descubrir qué le sucedió tras el final del juego. ALERTA DE SPOILERS: Si todavía no habéis terminado Resident Evil 7, os recomendamos que no sigáis leyendo.

¡Zoe, despierta!

Como no podía ser de otra manera, El fin de Zoe comienza refrescando nuestra memoria, retrotrayéndonos hasta el momento en el que Ethan debe decidir entre curar a Mia o curar a Zoe con el único vial de Necrotoxina-E del que dispone. En el caso de elegir a Mia, Zoe se queda en la mansión, vagando por los bosques adyacentes a esta, hasta pasar a una especie de estado de congelación.

Al poco tiempo, justo en el momento en el que dos hombres de Umbrella Corporation intentan ayudar a Zoe, aparece Joe, un hombre fuerte, canoso y tosco del que, poco después, descubrimos que se trata del hermano de Jack Baker. A pesar de su aspecto y de las primeras impresiones que pueda llegar a dar, Joe Baker es un hombre que ama a su familia y, al tratarse de su sobrina, no duda en buscar una cura para su estado. 

A puñetazo limpio

Así, da comienzo nuestro viaje (aunque corto) desde la casa de Joe hasta la mansión de los Baker, visitando, por primera vez, nuevas zonas pantanosas, llenas de enemigos tanto conocidos como nuevos. Una de las primeras características de este contenido descargable que más nos ha llamado la atención y que, además, nos ha encantado, es el sistema de combate, heredado de las últimas entregas de la saga Resident Evil. 

Como si se tratara del mismísimo Chris Redfield, en Resident Evil 5, o Jake Muller, en Resident Evil 6, Joe se abre paso a través de los enemigos de El fin de Zoe a puñetazo limpio, haciendo alarde de su fuerza bruta. Para ello, dispone de una serie de combos compuestos por los puños, que, de alternarlos correctamente, nos permiten desde noquear a nuestros enemigos hasta propinarles puñetazos más rápidos. Además, es posible potenciar el ataque de los mismos, siempre y cuando tengamos en nuestro inventario efigies de boxeador.

No obstante, también hay armas, aunque bastante rudimentarias. No esperéis encontrar un cuchillo, una pistola o una escopeta, pues ese no es el estilo de Joe Baker, sino javalinas o un arma poderosa que no mencionaremos para no destripar nada más. Aun así, también es posible crear bombas, lo que supone un arma casera de lo más útil si varios holomorfos deciden acorralarnos. 

La criatura del pantano

Como decíamos anteriormente, tanto enemigos conocidos como enemigos nuevos nos pondrán las cosas difíciles en El fin de Zoe. Así pues, podemos encontrar desde los clásicos holomorfos, vistos en Resident Evil 7, hasta temibles caimanes infectados, destacando por encima de todos ellos el espécimen conocido como "la criatura del pantano". Todos ellos, sin excepción, convierten el afán de Joe por salvar a Zoe en todo un infierno.

Y es que, a pesar de lo que pueda parecer, este contenido que expande la historia de los Baker es, en realidad, otro gran ejemplo de cómo Capcom ha dado con el rumbo adecuado para la saga. Si bien El fin de Zoe ofrece un ritmo más frenético y lleno de acción comparado con el de Resident Evil 7, también contiene fases en los que andar con cautela es necesario, pues, donde menos os lo esperáis, puede aparecer un holomorfo cuadrúpedo o la criatura del pantano para mataros. 

Análisis de Resident Evil 7: Biohazard

A lo anterior, hay que añadir el hecho de que, a pesar de que Joe sea más fuerte que cualquier otro miembro de la familia (al menos en sus formas humanas), presenta una fragilidad algo mayor, pues, si nos descuidamos, con tan solo un par de golpes pueden acabar con nuestra vida. 

Guiños a gogó

Otra de las cosas que nos ha gustado de este contenido ha sido la cantidad de guiños que contiene. Uno de los primeros guiños que hemos encontrado ha sido la criatura del pantano. Aunque en el análisis no os lo hemos mostrado para no desvelaros su forma, se trata de todo un homenaje al personaje ficticio de DC Comics creado por Len Wein y Bernie Wrightson: la Cosa del Pantano. 

Otro de los guiños que hemos podido ver se trata de una especie de conjunto funerario compuesto por tumbas y una iglesia, y que podéis observar sobre la imagen situada sobre estas líneas. Si echáis la vista atrás, este guarda un gran parecido con el cementerio que rodea la Catedral de Tall Oaks, uno de los escenarios de Resident Evil 6. 

Con ganas de más por mucho menos

Aquí llega nuestra mayor queja de la expansión de la historia El fin de Zoe. Dicho contenido descargable puede obtenerse de distintas maneras: mediante la compra de la edición gold de Resident Evil 7, del pase de temporada o del mismo, de manera individual. La gran mayoría de personas que ya hayan adquirido el juego y quieran hacer lo propio con este DLC podrían encontrar su precio, 14,99€, algo elevado, teniendo en cuenta que su duración no supera las dos horas. Por lo tanto, nuestra principal recomendación es, o bien adquirir la edición gold, en el caso de que no tengáis el juego; o bien el pase de temporada, pues dispondréis de una serie de minijuegos bastante interesantes.

En definitiva, El fin de Zoe es una expansión de la historia que conocimos en Resident Evil 7 que merece la pena ser jugada. Además de un sistema de combate de lo más llamativo (dentro de los disponibles en el juego o en los contenidos descargables), cuenta con una serie de guiños bastante disfrutables; un personaje que consigue hacer que nos lo creamos, Joe; un doblaje excelente y la esencia del juego que le precede.