Análisis Twin Mirror, la aventura psicológica de Dontnod para PS4, Xbox One y PC
Dontnod Entertainment, el estudio que nos ha brindado las dos entregas de Life is Strange, el spin-off Captain Spirit y el reciente Tell Me Why, fue fundado por veteranos de la industria que querían marcar la diferencia. Sus juegos se alejan de las producciones AAA repletas de acción, y se apoyan en el argumento, el desarrollo de personajes y el compromiso.
En el análisis de Twin Mirror descubrimos que el ADN de la compañía se mantiene intacto, y lo más importante; que sigue funcionando "como un reloj" para conseguir aventuras gráficas que nos llegan dentro. Son casi retratos de una generación, con personajes muy bien desarrollados e historias interesantes, capaces de hacernos reflexionar. Podéis comprobarlo en nuestro análisis de Tell Me Why.
En este caso, el punto de partida puede parecer más convencional; se trata de resolver un asesinato, en un pequeño pueblo de Virginia occidental. Es casi una revisión del agente Cooper llegando al pueblo de Twin Peaks para resolver el asesinato de Laura Palmer. Pero como la serie de David Lynch, Twin Mirror pronto nos engancha con todos los detalles que surgen alrededor de la historia principal.
El primero de ellos es la ambientación. El pueblo de Basswood parece atrapar -como un agujero negro- a todos los que han pasado por allí. De alguna manera el juego consigue transmitir la sensación de que no hay forma de escapar de sus calles, y de la naturaleza que lo rodea. Sus habitantes se dividen entre aquellos que se han cansado de luchar -las generaciones mayores- y los que nunca tuvieron ambición.
Un retrato de una generación
Como hemos mencionado más arriba es un perfecto retrato de una generación. Y con unos pocos minutos de juego, ya tenemos una sensación de familiaridad; de habernos encontrado con todos los personajes, cada mañana en las calles, y cada noche en los mismos bares.
Sam, el protagonista del juego, regresa a Basswood para asistir al funeral de un amigo, y allí se encuentra con sus propios demonios. Tendremos que hacerle frente a una relación rota, a un montón de personajes decepcionados, y a todo el rencor de un pueblo que en cierto modo hemos arruinado (no queremos profundizar más en ello para no estropear la historia). Pero, ¿esto no iba de un asesinato?
En efecto, sólo hemos hablado del escenario, pero la trama es una historia de misterio alrededor de un crimen, que por supuesto, encierra mucho más de lo que parece. Baste decir que tiene un buen ritmo y consigue mantenernos intrigados hasta el final.
La mecánica principal del juego es la clásica de los juegos de Dontnod. Se trata de una evolución de las aventuras gráficas "point and click" en que nos desplazamos por escenarios pequeños, hablando con otros personajes e investigando algunos objetos. Durante las conversaciones, podemos escoger diferentes respuestas, y en los momentos relevantes, tomar una posición que determina por dónde seguirá la historia.
El elemento diferencial de Twin Mirror está en lo que ocurre en la cabeza de Sam. Por una parte, es un personaje esquizofrénico, capaz de mantener conversaciones con su "otro yo", un personaje imaginario que tiene una personalidad opuesta y que le aporta puntos de vista diferentes sobre los hechos y cómo tratar a los demás personajes.
Por otro lado, Sam puede utilizar el Palacio Mental, un refugio que le permite reconstruir los hechos y que es muy útil para la investigación. En estas secuencias, tenemos que recoger todas las pistas de cada escenario y "ordenarlas" en nuestra cabeza, hasta que obtenemos la respuesta más coherente a cada situación. Entonces podemos validar nuestra hipótesis y ver si todo "cuadra".
También es un mecanismo para recordar cómo ocurrieron las cosas, ya que Sam ha olvidado parte de su pasado (tanto lo que ocurrió hace años en Basswood como la última noche, en la que bebió hasta derrumbarse). Y en el tramo final, sirve para resolver una secuencia de acción, anticipando lo que ocurre como en las películas de Sherlock Holmes de Guy Ritchie.
El Palacio Mental
Dentro del Palacio Mental, los objetos y personas están construidos de cristal, y la realidad se desmorona, como suspendida en medio del vacío, lo que le da un aspecto único a lo que ocurre dentro de la psique. Pero este mundo interior también se puede volver un lugar peligroso.
Aunque Twin Mirror no es un juego de acción, si que tiene una serie de minijuegos en que demostrar nuestra habilidad. Estas secuencias se "disparan" cuando Sam pierde el control de la situación. Las crisis nerviosas se convierten en laberintos de los que escapar, persecuciones por pasillos llenos de puertas en que esquivar las salidas erróneas o asedios de personajes sin cara.
Lo que consigue el juego es un estupendo reflejo jugable de lo que ocurre en la mente de una persona enferma cuando se le somete a una situación de estrés. Además de su importancia para romper el ritmo de la aventura, demuestra una vez más el compromiso de Dontnod con determinados problemas (algo que ya había explorado en Tell Me Why).
Una fórmula recurrente
Quizá el mayor problema que presenta Twin Mirror es que la fórmula comienza a agotarse. Las novedades del Palacio Mental, los puzles y minijuegos no marcan una gran diferencia respecto a lo que hemos jugado en los títulos anteriores. Muchos de los temas que se tratan coinciden, e incluso la ambientación en Basswwood recuerdan demasiado a la fórmula que nos sorprendió en Life is Strange.
Otro problema, menor, radica en la ausencia de doblaje. En este caso, aunque contamos con subtítulos en castellano, se pierde el efecto de escuchar dos voces contradictorias al mismo tiempo, por ejemplo, cuando Sam intenta mantener una conversación con otro personaje mientras su voz interior se superpone. No es algo que ocurra a menudo, pero quienes tengan que leer los subtítulos se perderán una parte de la conversación.
Con todo, Twin Mirror volverá a conquistar a los seguidores del estudio francés. Es una aventura gráfica que se apoya en una historia sencilla, pero que se vuelve enorme gracias a la complejidad de los personajes. Hace un reflejo perfecto del pueblo de Basswood, sin necesidad de llevarnos por muchas localizaciones. Y además, trata situaciones recurrentes para Dontnod como la crisis de identidad, las familias rotas, las relaciones o los problemas mentales, desde un punto de vista respetuoso y empático.
VALORACIÓN:
Como las anteriores aventuras gráficas de Dontnod, el peso de Twin Mirror recae sobre una gran historia, unos personajes muy bien construidos y temas adultos tratados con empatía. El Palacio Mental añade mecánicas muy interesantes a la fórmula.LO MEJOR:
La historia,personajes y retrato generacional de Basswood. Las secuencias "deductivas" en el Palacio Mental.LO PEOR:
La fórmula y los temas que trata se repiten respecto a Life is Strange y Tell me Why.Plataformas:
PC,
PS4,
Xbox One
Versión comentada: PC
80
Muy buenoDescubre más sobre David Martínez, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Hobbyconsolas.