Crítica de Ummo. La España alienígena, el documental sobre el fenómeno ufológico que arrasó en los 60

"Extranjeros y extraterrestres", "Fake" y "Desmontando a Jordán Peña" son los títulos de los tres episodios que componen la serie documental Ummo dirigida por Laura Pousa y Javier Olivera que llega hoy al completo a Movistar Plus+. Además está disponible en abierto (sin necesidad de suscripción) por medio de la aplicación de la plataforma.

Previamente fue presentada en el Festival de Cine de Sitges con alboroto incluido. La razón es que en el pase de prensa se personó José Luis Jordán Moreno, hijo de José Luis Jordán Peña, quien no solo pelea por la marca registrada UMMO, el fraude que alumbró su padre, sino que desdice las declaraciones de su hermana en el documental afirmando que "UMMO existe".

Anécdotas aparte, cabe señalar que las repercusiones de este caso llegan hasta hoy de muchas otras formas, dado que sigue habiendo defensores del planeta UMMO y de la existencia de ummitas viviendo entre nosotros en España y otros países de Europa y Latinoamérica. Es una de esas teorías de la conspiración de largo recorrido, entre cuyos adeptos sigue estando, entre otros, Juan José Benítez.

Pero vayamos por partes para comprender bien de dónde viene toda esta polémica. Todo comenzó en el año 66 con el conocido como "el OVNI de Aluche", un avistamiento que suscitó muchísimo interés e inspiró a Peña para idear una broma que, en palabras de su hija, se le fue de las manos.

Determinados individuos del círculo de la ufología local, empezaron a recibir cartas firmadas por los ummitas en las que hacían alarde de su avanzada tecnología y se presentaban como seres pacíficos, infiltrados entre la población y deseosos de compartir sus adelantos con nosotros, los humanos de la Tierra. 

Uno de los aspectos más interesantes de Ummo es el hecho de que consigue retratar la España tardofranquista de finales de los 60 y analizar el éxito de este fraude mostrando cómo creer en fenómenos paranormales, en extraterrestres o en fantasmas era lo más normal del mundo y darles lo que era en aquel momento una apariencia exótica (la de los europeos del este), de lo más usual.

Para ello, se vale de entrevistas a diversas personalidades: hay testimonios de periodistas como Juan Ramón Lucas, Andrés Aberasturi o Marc Amorós; expertos en el caso UMMO como Eduardo Bravo o José Juan Montejo; el director de cine Nacho Vigalondo; Maite Jordán, la hija de José Luis Jordán Peña, o víctimas como Mercedes Carrasco.

Asimismo cuenta con la colaboración especial de Rosa María Mateo en calidad de narradora leyendo algunos de los extractos más relevantes de las misivas de los supuestos "ummitas", lo que ayuda a poner en contexto este fenómeno que podríamos calificar como uno de los más excéntricos pero triunfantes fake de nuestra historia reciente con derivaciones delirantes.

De aquellos barros, estos lodos

También se analiza la función de los medios de comunicación, muy limitados y por tanto influyentes en la época, y el pábulo que encontraron este tipo de fraudes en programas de máxima audiencia como el de Jiménez del Oso, donde Peña era colaborador habitual en calidad de escéptico, espoleando a los creyentes con su impostada actitud negativa.

Pero ojo, que el símbolo de UMMO llegó también a utilizarse en la secta Edelweiss que se convirtió en un red de pederastia de largos tentáculos (tenéis disponible en RTVE Play de forma totalmente gratuita el documental Edelweiss que nos pondrá la piel de gallina) y tuvo también relación con hipnotistas, experimentos de control social y hasta abusos.

Como es evidente, uno de los problemas para componer la narrativa es el acceso a material relevante: es muy limitado y se corresponde, sobre todo, con apariciones de Peña en programas en calidad de ufólogo y/o parapsicólogo además de fotografías y grabaciones. Por lo demás se echa mano a reconstrucciones (algo repetitivas) y a la intervención de dos actores que fingen ser ummitas.

Pero donde la serie da el do de pecho es con el uso de insertos de películas que le dan un toque de humor negro e ironía a la historia. Cierto es que en ciertos momentos es algo excesivo, a la vista de la gravedad de los hechos expuestos, pero en muchas ocasiones aligera el tono y le aporta capas a toda esta locura que sigue vendiendo libros y alimentando el bolsillo de unos cuantos.

En fin, junto con El palmar de Troya y Palomares, otras dos series documentales disponibles en Movistar Plus+, Ummo nos narra episodios de nuestra historia reciente que parecen más cerca de la invención que de la realidad y nos ayudan a comprender la forma en la que éramos y somos hoy e incluso nuestro reflejo en la parrilla televisiva.

No sabemos ya si alimentamos al monstruo o si el monstruo es el que nos ha terminado fagocitando por pura glotonería. Si sirve para despertar el espíritu crítico de quienes lo vean, ya hará un servicio público importante.