Dragon Ball Z capítulo 76 - Análisis y curiosidades
Dragon Ball Z continúa imparable con nuestros análisis domincales, y en el día de hoy, nos adentraremos en toda la magia onírica del dragón de los sueños, Porunga, que se alza en el cielo namekiano para conceder 3 deseos a Gohan y Krilín.
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En el capítulo anterior vimos a Freezer dejar fuera de combate a Nail, mientras Gohan y Krilín se reunían con Dende para invocar al dragón sagrado. Hoy, nos zambullimos en el episodio 76 de la serie para comprobar si logran su cometido, con una animación y arte excelsos gracias a Masahiro Shumanuki.
El capítulo arranca con Dende, Krilín y Gohan, listos para pedir a Porunga sus 3 deseos. Ante tal oportunidad, los Guerreros Z piensan su primer deseo... ¡resucitar a todas las víctimas de los saiyans! Así las cosas, Dende se pone manos a la obra y se lo pide a Porunga en namekiano, sin embargo... ¡el dragón solo puede resucitar a una sola persona por deseo!
El pesimismo se cierne sobre los terrícolas hasta que Piccolo decide comunicarse con ellos, hablándoles al corazón, a través de Kaioh Sama. El namekiano piensa que lo mejor es resucitarle a él primero, pues también lo hará Kami Sama y con ello, las bolas de dragón de la Tierra, las cuales pueden resucitar a todas las personas necesarias por deseo.
Como siempre, el raciocinio de Piccolo dicta el camino, así que a todos le parece una idea magnífica y Dende pide el primer deseo. ¡Concedido! Pero ahora quedan dos más, por lo que deciden teletransportar a Piccolo al planeta Namek con el segundo deseo. ¡Y concedido de nuevo! Este Porunga trabaja bien cuando se respetan sus normas.
¡Análisis del episodio 75 de Dragon Ball Z, el capítulo anterior!
No obstante, Piccolo no aparece en el terreno de batalla, sino que el dragón sagrado lo ha ubicado en algún lugar recóndito del planeta, un enclave que dista mucho del emplazamiento en el que Gohan y cía se encuentra. ¡Menudo fallo! Y en ese instante, mientras deciden qué pedir para el tercer deseo, Vegeta aparece delante de sus narices enrabietado. ¡Le han engañado y están usando las bolas de dragón sin su permiso!
Ni corto ni perezoso, coge a Dende del pescuezo y le ordena que le pida a Porunga la juventud eterna para su persona. El pequeño se niega, pero Freezer se acerca a toda velocidad hacia ellos y Goku todavía se está recuperando, por lo que la única salida que les queda es ayudar a Vegeta a hacerse con su deseo. Pues bien, cuando Dende está articulando las palabras del tercer deseo... ¡el Gran Anciano muere y Porunga deja de existir, convirtiéndose las bolas de dragón en burdas piedras!
La situación es muy grave, no en vano Freezer acaba de contemplar lo que acaba de suceder y le envuelve una furia sin precedentes. Vegeta, Gohan y Krilín pueden sentir lo que va a pasar, y no pueden estar más acongojados. ¡Esto va a estallar! ¡La batalla final de Namek se acerca!
¡CURIOSIDADES!
1- Tenemos unas escenas de relleno que no hacen justicia a los personajes, sacándonos completamente de la esencia de la serie. ¡Ten Shin Han discutiendo por no ser el primer guerrero resucitado, un debate al que más tarde se unen Yamcha y Chaoz! Así no, Toei...
2- El narrador denomina a Porunga al comienzo del episodio como Super Shenron, algo realmente curioso si tenemos en cuenta Dragon Ball Super, donde sí que aparece Super Shenron al reunir las Super Bolas de Dragón.
¿Qué os ha parecido esta nueva entrega de nuestros análisis de Dragon Ball Z? ¿Recordabas así el episodio 76 de la serie? Mañana regresaremos con más entregas de tu serie favorita. ¡Kai, Kai!
VALORACIÓN:
Un gran episodio donde la tensión se mantiene casi de principio a fin, sin saber si Gohan y Krilín conseguirán su objetivo. Además, la banda sonora y el gran arte de Masahiro Shimanuki rayan un nivel muy alto. Una pena que el relleno lastre alguna escena, como Ten Shin Han, Yamcha y Chaoz discutiendo por no ser los primeros en resucitar.LO MEJOR:
El arte de Masahiro Shimanuki, gozando de un nivel espectacular. La tensión durante el episodio deja en vilo al espectador hasta el final.LO PEOR:
El relleno en el planeta de Kaioh Sama está fuera de lugar.79
BuenoDescubre más sobre Antonio Sánchez-Migallón, autor/a de este artículo.
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