Martin Scorsese se inspiró en el trabajo de Alfred Hitchcock para una de las mejores películas de su carrera

Que los directores de cine se inspiren entre sí no es algo extraño: no son pocos los cineastas que han destacado la influencia de otros maestros del Séptimo Arte. Akira Kurosawa (Kurosawa Akira) influyó en George Lucas, Steven Spielberg en Denis Villeneuve o, como hablaremos hoy, Alfred Hitchcock en Martin Scorsese.

Aunque la Academia solo le ha honrado en una ocasión con el Óscar, Martin Scorsese es uno de los directores de referencia a la hora de hablar de cine, y tiene algunas de las películas más queridas de la historia.

Una de ellas fue Toro salvaje, el drama deportivo protagonizado por Robert De Niro que se llevó dos estatuillas en 1981. Filmada en blanco y negro para reflejar la época en que se ambientaba, la película tiene muchos elementos de un clásico de otro director, Alfred Hitchcock.

Concretamente, Toro salvaje bebe mucho de Psicosis, una de las películas que nos vienen inevitablemente a la mente a la hora de hablar del legado de Alfred Hitchcock en el Séptimo Arte.

Martin Scorsese con el libro de estilo de Alfred Hitchcock

Tal y como rememoran en Collider, Toro salvaje recoge elementos que fueron clave para que Psicosis se convirtiera en el imperecedero clásico del cine de terror que es.

Por ejemplo, la ira contenida de Marion Crane (Janet Leigh) mientras se dirige hacia el Bates Motel está presente en el personaje de De Niro, Jake LaMotta.

Otro elemento básico de la película de Hitchcock que Martin Scorsese replicó son esos primerísimos primeros planos para destacar los problemas mentales del personaje, usando los movimientos de cámara para evidenciar que algo no anda bien en su interior.

Además, al igual que en Psicosis, Toro salvaje no abunda en violencia gráfica, sino que recurre a la edición rápida para construir escenas en las que el espectador alberga la sensación de haber visto más violencia de la que realmente le han ofrecido.

Alfred Hitchcock es u cineasta en el que muchos han buscado inspiración, y Martin Scorsese, maestro del cine por derecho propio, también ha mirado en su filmografía para hacer algunas de sus mejores películas aún más impresionantes.