Anthony Mackie critica la falta de personas negras en sagas como Harry Potter o El señor de los anillos

Aunque hay sagas del cine que son queridas por miles de personas en todo el mundo, eso no significa que sean perfectas, sobre todo si ya han pasado unos cuantos años desde su estreno y se han "quedado atrás" del resto del mundo que sigue evolucionando. Como es el caso, según Anthony Mackie, de las franquicias de Harry Potter y El señor de los anillos. 

Pues el actor de Marvel, que próximamente va a estrenar su primera película como Capitán América, considera que estas sagas de película son un claro ejemplo de la falta de diversidad en el cine comercial. "Harry Potter no tenía ni un jo**do amigo negro. Frodo se recorrió todo el universo y nunca se encontró con un tipo negro", aseguraba el actor en una entrevista con Inverse.

"Me encantaría ver a Frodo en uno de nuestros barrios. De hecho, si alguna vez tengo la oportunidad de acudir a Saturday Night Live, tengo pensado un sketch sobre el tema", reconocía Mackie. No obstante, si bien es cierto que la trilogía de Peter Jackson peca bastante de falta de diversidad, no se puede decir lo mismo que la basada en los libros de Harry Potter. 

Pues aunque no eran exactamente sus amigos, sí que había alumnos negros en Hogwarts, como Dean Thomas, Lee Jordan y otros que aparecían como secundarios en el castillo. Además uno de los aliados más importantes de la Orden del Fénix no es otro que Kingsley Shacklebolt, también negro. Por no hablar de las hermanas Patil, de origen indio, o Cho Chang, asiática. 

Las medidas de Mackie para acabar con la falta de diversidad 

Pero Mackie no busca solo quejarse de que otras producciones no incluyan personas negras, sino que también quiere aportar su granito de arena para que el mundo conozca las historias de todas aquellas personas negras que cambiaron el rumbo de la historia. Es por ello que ha puesto en marcha el documental Sparks, sobre la joven Claudette Colvin.

Tal como explica Anthony Mackie, esta joven negra fue la primera en negarse a ceder su asiento a una persona blanca en un autobús, pero su historia fue silenciada hasta por la propia Rosa Parks, que más tarde haría lo mismo, al tratarse de una niña de 15 años soltera y embarazada. Su objetivo es estrenarlo antes de que fallezca la propia Colvin que actualmente tiene 83 años.