Uno de los mejores gags de Los mercenarios fue improvisado y Sylvester Stallone casi lo quita de la película
Sylvester Stallone casi estuvo a punto de quitar en Los mercenarios uno de los mejores gags que, para colmo, fue fruto de la improvisación de su actor.
Aunque su última entrega ha dejado bastante fríos a la mayoría de fans, Los mercenarios no deja de ser una de las sagas cinematográficas de acción más populares al reunir a los más grandes intérpretes del género a lo largo de cada una de sus películas, con Sylvester Stallone al frente del elenco.
Su trama arranca con Barney Ross, líder de un variopinto grupo de mercenarios que son contratados para infiltrarse en un país sudamericano y derrocar a su despiadado y corrupto dictador.
Una vez allí, se verán atrapados en una telaraña de engaño y traición, lo que provoca que tengan que enfrentarse a un reto aún más difícil: salvar la unidad del grupo y la amistad que los ha unido durante largos años.
El genial gag improvisado de Los mercenarios que casi elimina Sylvester Stallone
La gracia de la saga sin duda son las diversas referencias y pullas que se hacen sus protagonistas a lo largo de cada película.
En la primera entrega tenemos un momento de lo más mítico cuando se reúnen por primera vez tres de las mayores leyendas del cine de acción: Sylvester Stallone, Arnold Schwarzenegger y Bruce Willis.
El actor de Jungla de cristal encarna al misterioso Mr. Church, mientras que la estrella de Terminator interpreta a un mercenario rival de Barney llamado Trench. Los tres están reunidos para abordar la misión que termina llevando a cabo Barney.
Entre los puntos clave de la trama, este trío de íconos de las películas de acción de los 80 encuentra mucho tiempo para bromear y lanzarse pullas mutuamente, hasta que Bruce Willis suelta una de las líneas más graciosas de toda la película fruto de su propia improvisación.
Al ver que los personajes rivales de Sylvester Stallone y Arnold Schwarzenegger se empiezan a llevar bien, Mr. Church lanza este dardo que pilló desprevenidos a sus compañeros: "No van a empezar a chuparse la polla el uno al otro, ¿verdad?", dijo.
A pesar de ser un momentazo, Sylvester Stallone reconoció que llegó a dudar si dejar o no la línea improvisada de Bruce Willis en el corte final la película. No obstante, finalmente decidió dejar la toma tal cual y el resultado fue muy satisfactorio. ¿Qué te pareció ese momento de Los mercenarios? Cuéntanos en los comentarios.
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Descubre más sobre José Carlos Pozo, autor/a de este artículo.
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